Marcado En Las Sombras

Capítulo 22: Cicatrices

Daniel's POV

Siempre había estado ahí.

—Siento que estoy olvidando algo.

Como la alarma que no apagas porque estás haciendo otras cosas, es demasiado molesta, y eso te irrita, pero tú crees que estás muy ocupado como para apagarla, así que la dejas sonando hasta que se rinde...

—Siento que estoy olvidando algo.

A veces esa alarma vuelve a sonar un rato despué, y por más que te fastidie debes tomar en cuenta que... Fuiste tú quien puso esa alarma en primer lugar.

—Siento que estoy olvidando...

—No solo "Algo", Daniel.

Lo primero que vieron mis ojos, fue la imagen borrosa de un reflejo, un trueno se oyó a mi espalda y una pequeña mano pasó frente a mí, limpiando lo que pronto comprendí que era un espejo empañado.

La pequeña mano bajó y pude ver mi rostro, mis ojos oscuros con ojeras y mi cabello con puntas decoloradas, seguía siendo yo... Pero no era el único yo que había.

Apenas bajé la mirada por el reflejo, descubrí a quien estaba limpiando el espejo con su pequeña mano, un niño, de unos nueve años de edad. Un niño que yo ya conocía.

—No solo "Algo", Daniel—repitió esa misma voz, por detrás de mí.

Me volvi rápidamente. Tobías estaba sentado sobre una cama, mi cama, solo que más pequeña y con cobijas de dibujos animados.

—¡Algo asombroso!—exclamó mi hermano mayor, levantando las manos.

Pero aunque sus ojos estaban fijos en mi dirección, él no esperaba que yo le respondiera.

—¡¿En serio?!—el niño a mi espalda me atravesó como si yo fuese un maldito fantasma, corrió directo hacia Tobías, y este se agachó frente a él.

—Sí, Daniel—Tobías lo tomó de los hombros—. Pasarás unas vacaciones de verano geniales.

Entonces ese niño soy yo.

Miro a mi alrededor, todo es justo como recuerdo que era mi habitación hace más de 10 años. Si no estoy mal, a juzgar por mi apariencia y la de Tobías yo debo tener unos nueve años.

Entonces esto es otro recuerdo, ¿Pero en qué momento me dormí?

—¿Vendrás conmigo, Tobías?—pregunto mi yo pequeño.

A mi hermano se le desvaneció su sonrisa, o eso fue al principio, pues luego volvió a esbozarla, solo que ahora tenía un atisbo de tristeza.

—Yo prefiero trabajar durante las vacaciones, ya sabes, quiero dinero.

El pequeño Daniel asintió, no muy conforme con su respuesta, pero desde entonces ya conocía bien a mi hermano, si él había decidido trabajar durante las vacaciones entonces es lo que haría.

"Trabajar durante las vacaciones"

Fue entonces que caí en cuenta, nuevamente, de la ausencia de algo más en mi interior. Pues yo no tengo ningún maldito recuerdo de mi hermano trabajando durante las vacaciones, mucho menos, de haberme emocionado tanto por ir a un campamento.

Yo nunca fui a un campamento en mis vacaciones, o al menos eso creía.

Me giré para ver el calendario pero mis ojos chocaron contra un cartel clavado al tronco de un arbol. La flecha de madera apuntandome hacia mi izquierda, me obliga a volver a mirar al frente para encontrarme con un cambio de escenario completamente distinto.