Faceoff

Capítulo 10

Capítulo 10

Lo admito, tenía una sonrisa en los labios porque me encantó molestar a Román, ese sabor dulzón de la victoria iba a durar un buen rato.

Si, amaba a mi hermano pero a veces se comportaba como un troglodita que provocaba golpearlo o como mínimo mandarlo a la mierda, la mayoría del tiempo lo hacía, pero a veces eso no era suficiente.

Desde que entré en la adolescencia he tenido que soportar su sobreprotección y se que debe estar diciendose a sí mismo que no me cuido bien, que fue su culpa que haya quedado embarazada porque no amenazó a algún tarado que intentó conquistarme.

Pero obviamente él no tiene culpa de nada, yo era una adulta que tomaba mis propias decisiones, quizás no fueron las mejores pero yo sola me metí en este lío.

Agradecia que me quisiera tanto, pero a veces simplemente se sobrepasaba como lo que había hecho en la cafetería, me sentí en ese momento ridícula y de cierta manera humillada, y eso no está bien, llegó un punto donde me sobrepasó tanta protección y aunque lo amaba y lo entendía, me seguía me abrumando.

Y durante esa semana me había sacado de mis casillas varias veces, además no estaba haciendo algo malo, mi crush de toda la vida me había invitado a cenar, sabía de mi estado y al parecer no le importaba.

¿Estaba mal que hubiese aceptado? Yo creía que no, así que se podía meter su opinión muy al fondo por donde no le cae el sol, simplemente quería relajarme porque mi vida estaba siendo una locura en las últimas semanas y él no me estaba ayudando para nada.

Por otro lado, tampoco sabía qué pensar de eso; me parecía extraño que durante años estuviera babeando por Jackson y justo ahora las cosas estaban fluyendo cuando mi vida estaba más patas arriba de lo normal, no me quejaba, porque, después de todo, mejor tarde que nunca pero me hubiera gustado que fuera antes.

No era como que Jackson me estuviera prometiendo nada, pero él mismo dijo que al saber del intruso decidió que debía hacer algo o nunca tendría la oportunidad, yo solo quiero ver qué pasaba, quizás simplemente las cosas tenían que suceder así.

Porque sí, siempre me gustó pero en ese momento ya tenía responsabilidades diferentes que un mes atrás y necesitaba estar segura si él entiende mis prioridades y qué implicaba salir conmigo en ese momento.

-Espero que Ron no me cuelgue de de las bolas cuando nos veamos mañana en el partido -dijo el moreno para romper el hielo y yo solo me reí, no parecía en realidad asustado por esa muy posible realidad.

-Si te molesta, tu me dices, yo lo pongo en su lugar. -El rió un poco y asintió sin quitar la mirada de la carretera. -¿Y cómo te has sentido hoy?

-Bien -no sabía si era apropiado contarle sobre mis malestares y esas cosas, si era un tema adecuado o se volvería incómodo.