Misión: GusuLan debe caer [XianWang]

[Capítulo 13]

Abismo sin fin.

A Lan WangJi le suena ese nombre, lo recuerda en una de las tantas conversaciones de Wei Ying.

"Aiyoooo~ Lan Zhan, a mi hermano mayor le sale una cola y orejas cuando se habla de su Shizun. ¡Lo prometo! Parece un cachorro en busca de atención. Abismo sin fin se vuelve un caos cuando el omega de su jefe está presente."

Hermano mayor.

Si Lan WangJi no se equivoca es Luo Binghe.

Wei Ying habla tanto de sus hermanos, el tuerto y el perrito, les llama. La primera vez que escuchó de ellos y sus negocios fue el primer día de su "encierro", después fue en conversaciones casuales donde el alfa se quejaba del trabajo.

—Amo Lan, podemos esperar en el auto a que el amo Wei salga—sugirió XingChen con una sonrisa tensa, una gota de sudor resbaló por su columna cuando Lan WangJi negó.

El Patriarca los iba a matar si dejaban que su precioso omega fuera comida en ojos hambrientos.

—Vamos a entrar. —El tono de voz del omega no dio lugar para negarse, con sus zapatos negros con un pequeño tacón haciendo un ruido inquietante para los pobres guardaespaldas.

Cada sonido del tacón era un martirio, eso era indicio de que cada vez estaban más cerca del edificio de luces rojas.

Al llegar a la entrada, Lan WangJi se detuvo un momento, la fila era muy larga y la gente estaba abarrotada en la entrada, un sentimiento de incomodidad se formó en su pecho. Nunca había lidiado con multitudes así, tenía que tener ventajas al relacionarse con el Don Wei, ¿verdad? Regresó a ver a la pareja que venía con él y con una mirada dio a entender todo.

—Amo Lan... —suplicó XingChen con su última carta de ruego en juego, pero no fue escuchado, los ojos dorados todavía seguían insistiendo. Con un suspiro, el omega mayor se acercó al guardia de seguridad, empujando los cuerpos de alfas y omegas que obstruían el paso. —Vamos a pasar.

—¿Uh? ¿Por qué debería dejarte hacer eso? —el alfa corpulento le dio una mirada de arriba abajo. —¿Tienes reservación?

—No, vengo por un vaso de Sonrisa del Emperador.

En el bajo mundo, "un vaso de Sonrisa del Emperador" era la clave para identificar a la gente del Patriarca. Y es bien conocido que no debes meterte con estas personas si no quieres enfrentarlo. Para ese jefe en particular, meterse con sus empleados es como meterse con él. Por eso todos aquellos bajo el ala del Patriarca eran respetados.

El alfa palideció por completo, haciéndose a un lado de inmediato.

—Por supuesto, mis disculpas—el alfa agachó la cabeza. Sabía lo que le convenía y meterse con la gente del Patriarca era suicida.

—Amo Lan—llamó Xiao XingChen, haciendo una seña hacia el omega menor y el alfa a su lado, quienes rápidamente se acercaron. — Por favor, pase—el omega mayor se hizo a un lado, el Lan pasó sin dedicarle una mirada al guardia.

Ya adentro, Lan WangJi se preguntó si cuando armó todo este plan no se le pasó por la cabeza que era un lugar muy concurrido y que seguro habría un mar de gente. No lo pensó, ¿ok? Su omega lo cegó con solo una cosa en mente, "traer de los cabellos a ese alfa".

Se aferró al brazo de XingChen disimuladamente, el omega mayor solo dio un brinquito, pero le permitió al omega colgarse de su brazo. Song Lan solo observaba detrás de ellos, siempre atento de las miradas que los alfas le dedicaban a los omegas. Por un lado, tenía que cuidar a la pareja de su jefe y del otro... bueno, hay un pequeño maniaco con el que no quiere problemas.