Anahí: ¿Por qué hay que hacerlo sí o sí hoy si aun quedan dos mese?
Tisha: Cuando antes lo hagas, mejor. - me dijo mi madre mientras leía los folletos de Columbia. - ¿Haz visto los campus?
Anahí: No me interesan los campus mamá, viviré aquí. - suspiré.
Llevaba dos horas sentada con mi madre en el salón. No tenía porque rellenar la inscripción ya, pero con tal de no oírla más... El problema era que me había echo esperar a que se leyera detenidamente cada punto del folleto.
Lo único bueno era que Diego no estaba y así evitaba esa mirada de burla. ¿Sabes donde estaba? Acertaste, entrenando. No hacía otra cosa y mamá no paraba de decirle que descansara, pero él insistía con que cada vez se acercaba más y más la competencia.
Anahí: Mamá. - decidí lanzarle una indirecta.
Tisha: ¿Si, cariño?
Anahí: ¿Alguna vez pensaste estudiar otra cosa en la universidad?
Tisha: ¿Cómo que? - preguntó sin mirarme. Debía estar muy interesante ese folleto.
Anahí: No sé... ¿Interpretación? - le dije otra carrera al azar.
Levantó la cabeza de golpe y se rió como si hubiera dicho la cosa más divertida del mundo.
Tisha: ¿Para ser actríz? - yo asentí. ¿Se podía estudiar la interpretación para otra carrera profesional? - Por Dios, Anahí, no me hagas reír. Eso no es una carrera.
Anahí: ¿Por qué? - le pregunté con verdadera curiosidad. - ¿Por qué crees que esa es inferior a otras, como la tuya?
Tisha: ¿Qué por qué? - me miró como si la respuesta fuera obvia. - Esa carrera no aporta seguridad.
Anahí: Han muchos actores y actrices que han triunfado. Es más, muchos de ellos son incluso más ricos que traductores o empresarios.
Tisha: Esa es una rara exepción. La mayoría harán obras de teatro, anuncios o modelarán. Ahora bien, he sido positiva. También podrían acabar durmiendo en la calle porque apenas tiene salida profesional.
Anahí: Pero, ¿y si ese es tu sueño? - insistí con el tema.
Tenía que saber si había una mínima esperanza.
Tisha: No importa si es o no es tu sueño. Otra carrera también puede hacerte feliz y sobre todo, - me miró divertida. - te paga las facturas. - iba a seguir leyendo el folleto, pero de golpe volvió a mirarme con interés. - ¿A qué se deben esas preguntas?
¡Oh, oh, oh!
Anahí: Maite duda sobre si estudiar derecho o interpretación. - mentí.
Tisha: ¿Tu amiga está loca!¿Como puede siquiera dudar? - negó con la cabeza como si Maite fuese un caso perdido. - ¡Derecho! - suspiró. - En esta si te otorgaran carrera. ¡Qué pena me da que Diego no la quiera estudiar! En cambio, prefiere sudar en una pista de atletismo. - otra vez negó con la cabeza. - ¡Menos mal que tú no me has decepcionado, cariño!
Fingí sonreír con felicidad, pero por dentro estaba muriéndome. ¿Sentiría decepción si escogiera arte? Eso no me consolaba en lo absoluto.
Tras otra hora más, ya estaba lista la inscripción. Si todo iba bien, tendría una entrevista personal en un mes. No era como si me hiciera una especial ilusión acudir para que unos trajeados me recordaran la mierda de vida que tenía.
Decidí pasar el resto de la mañana del sábado haciendo lo que más deseaba, dibujar. El lápiz se deslizaba por las hojas. Nada me apetecería más que gastarme una buena cantidad de dinero en materiales que valieran la pena, pero la verdad era que si me los compraba, mi madre acabaría descubriendo mi secreto.
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PONNY Y BARKEN [COMPLETA]
JugendliteraturAlfonso me empotró contra la taquilla, haciéndome daño en la espalda. Ahogué un gemido de dolor y le mantuve la mirada lo mejor que pude. - Me parece que no lo entiendes Anahí. No había nadie por el pasillo por si necesitaba chillar, suplicar por ay...