"Tu misterioso alguien"

capítulo 23.

5 de octubre. Otoño.

Jungkook fue abriendo sus ojos lentamente, su cabeza dolía, escuchaba un pitido molesto, entonces volteó su cabeza, intentando encontrar ese ruido que lo molestaba.

Observó una máquina a su lado, y pudo darse cuenta que ese ruido que escuchaba provenía de las sondas que estaban conectadas a su cuerpo. Estaba en el hospital. Otra vez.

"Mierda"

Pensó que quizás las enfermeras ya recordaban su nombre. Nunca estuvo antes tanto tiempo en el hospital como en el año. Tanto trabajo, y sus descuidos, y mala alimentación le pasaban la cuenta.

Lo que agradecía era que cuando estaba en el hospital podía dormir a gusto, porque, lo sedaban.

Jeon se mantuvo en silencio cuando la enfermera ingresó al lugar, y lo vio sonriendo cortés. Sabía quien era, las veces que estuvo en el hospital le tocaba la misma enfermera. Su nombre era Jisoo, era amable, como su apariencia así lo decía.

— ¿De nuevo aquí? — le dijo ella, y lo ayudó a sentarse. Luego revisaba algunas cosas de su cuerpo, como la intravenosa, y cambiaba la bolsa de suero lentamente.

— Me gusta hablar con otros pacientes. — bromeó Jungkook, aunque, cada vez que estuvo en el hospital, las camillas de al lado suyo, estaban vacías, y él se encontraba sólo.

— ¿Sabes cuánto tiempo estuviste aquí? — le preguntó Jisoo, y Jungkook se detuvo a pensar.

Nunca duraba más de un día en el hospital. No era grave su condición, estaba bien, o eso decía él.

— ¿Un día? Mi cuerpo se siente pesado. — Jisoo sonrió sarcástica, cosa que no entendió Jungkook.

— Fueron más de tres días, llegaste aquí casi arrastras, y cuando te caíste al suelo, rápidamente intervenimos, el doctor Lee le explicará mejor su situación. — Jisoo se alejó de él, y lo miró desde la punta de su camilla.

— ¿Mi celular? Tengo que notificar a mi trabajo. — dijo Jungkook. Jisoo salió de la habitación en busca de sus pertenencias.

Jungkook temía por su vida, si Jin o Namjoon supieran de su situación, no podría evitar que ambos estén encima suyo como si en verdad fueran sus padres. Además sería regañado seriamente.

Tampoco fue algo que él haya querido, si bien era su responsabilidad su salud, se excusaba con el trabajo... tuvo muchas horas en el trabajo, y queriendo evitar sus propias emociones se hundía detrás de una computadora.

— Aquí tiene. — le dijo Jisoo, entonces Jungkook salió de sus pensamientos y le sonrió agradecido a la enfermera.

— El doctor Lee Jong Suk estará en unos minutos aquí con usted. Intente no moverse demasiado, y puede tocar el timbre que estaba en el escritorio por cualquier necesidad y vendremos a ayudarlo. — le explicó Jisoo, y Jungkook quería reír, porque le hablaba como si fuera la primera vez que se encontraba allí. Él ya sabía todo eso, pero, de igual modo no dijo nada.

— Así lo haré, gracias. — dijo Jungkook, y su sonrisa de cortesía se fue cuando la mujer salió de su campo visual.

Al ver su celular, tenía demasiadas llamadas perdidas, y la mayoría provenían de Jin y Namjoon. Sintió  su estómago revolverse, no sabría que excusa darles para no preocuparlos.

Observó una llamada perdida de Lalisa, así que, le devolvió la llamada.

— ¿Jungkook? — atendió Lisa, con voz suave. Jungkook la consideraba una amiga, quizás no tan íntima, pero si una amiga, y una compañera de trabajo formidable.

— ¿Estoy despedido? — preguntó Jungkook, riendo entre dientes.

— No, pero dime, ¿por qué recién te comunicas conmigo? Te he llamado varias veces, ¿qué pasa contigo Jeon? — Jungkook la escuchaba hablar enojada, pero, en voz baja.

— Lo siento Lisa, estaba en el hospital inconsciente, sabes, la próxima vez respondo tus llamadas desde mis sueños, así no te preocupas.

— No me preocupo por ti idiota, y guarda tu sarcasmo. ¿Por qué estás en el hospital Jungkook? ¿Quién te puso en tu lugar? — Jungkook rió.

— Nadie me golpeó tonta, además, no perdería. — respondió, y ahora ella rió. — Estoy internado por idiota, me olvidé de comer sano, o algo así.

— ¿Cómo te olvidas de comer? ¿Eres imbécil? Dios, quiero golpearte.

— A veces pienso que en verdad no eres mi amiga, pareces mi enemiga. — respondió Jungkook.

— Si, si, lo que digas... pero, ¿quieres que le diga a Taehyung? — preguntó Lalisa, y Jungkook guardó silencio.

— No, no quiero dar lástima, además, él ya no es nada mío, y es lo mejor.

— Te diría lo muy idiota que eres y fuiste, pero, ya lo sabes, además, tienes que descansar, luego te llevo flores.

— ¡Hey! No me morí. No quiero flores. — se quejó entre risas.

— Nos vemos luego Jungkook. — dijo Lisa, para luego cortar la llamada.

Jungkook no puso si quiera suspirar porque recibió una llamada.

Atendió la llamada entrante de Namjoon. Y pedía internamente poder engañarlo.

— ¡Jungkook! te llamé varias veces, con Jin estamos preocupados por ti, ¿por qué no respondiste? — habló apresuradamente Namjoon.

— H-hyung... sólo, estuve muy metido en el trabajo, no usé el celular, lo siento. — dijo tristemente Jungkook.

— Juraría que piensas que soy un idiota, dime la verdad Jungkook. — respondió Namjoon, y su voz sonaba gruesa, y su respiración se escuchaba pesada a través de la línea.

— Yo no creo que sea idiota Hyung. — respondió Jungkook. Riendo para matar el ambiente tenso, cosa que no funcionó.

— Jungkook, dime la verdad, o prometo ir allí en el primer vuelo que tenga escala a Corea del sur. ¿Piensa que creeré que no usaste el celular, cuando por tu trabajo lo tienes encima en todo momento?

— Esta bien Hyung... — Jungkook respiró pausado, inhalando y exhalando lentamente. — Estoy en el hospital. Antes de que me regañe, ahora estoy bien. No fue nada grave.

— Jungkook desde hace días quiero hablar contigo, ¿y dices que no fue nada grave? — dijo Namjoon enojado, y Jungkook guardó silencio.

— Estaré al pendiente de tu estado, cuando te den el alta, ve y prepara tu maleta, iré por ti, tu vuelo se adelantó, ¿escuchaste? 

— Hyung, no puede decirme que hacer, yo iré a Inglaterra, pero el día que tengo asignado, no voy a adelantar mi vuelo.

— No me importa lo que quieras, ni que seas mayor Jungkook. Yo iré a Corea del sur, y quiero que tengas tus cosas preparadas, de lo contrario viajarás sin nada, no te estoy preguntando qué quieres. ¿Me entiendes?

— ¡Namjoon Hyung! — se quejó enojado Jungkook. Quería protestar, pero, tampoco sabía que decirle exactamente.

— Nada, por más de que te quejes las cosas se harán a mi modo, no voy a dejar que te sigas dañando, ¿quieres morir acaso? Porque parece que eso deseas. No le diré a Jin, pero iré yo, y no te estoy preguntando Jungkook. Asegúrate de cuidar tu salud hasta ese día, ¿escuchaste? — preguntó Namjoon.

— Si, lo escuché Hyung. — respondió Jungkook, estaba enojado, pero no podía decirle nada a Namjoon, no cuando tenía razón.

Dejó el celular a su lado, y pensaba que solo sabía meterse en problemas. Al menos vería de nuevo a su Hyung, aunque no le agradaba el porqué.