N/A: ¡Ya estamos entrando en cuenta regresiva! ¿Cuántos capítulos nos faltan con exactitud? ¡Ni yo lo sé, pero estoy segura que son menos de diez!
Siempre hago un apartado especial de curiosidades, datos y todo eso. Hay una pequeña sección de preguntas, así que si tienen una pueden dejarla aquí o en mis dm y con gusto sale anónimo en la última parte del libro :)
es todo, un besito y ya nos vamos leyendo ♥
竈 かまど, 栗花落 カナヲ
estragos: capítulo cuarenta
«extraña, creo que ahora puedo comprenderlo»
diecinueve de agosto
El tacto de Kanao es cálido. No ha cambiado mucho en todos esos años, o si lo hizo entonces no puede sentirlo. No puede percibir las cosas muy bien porque su cabeza está hecha un lío y la verdad es que prefiere mantener la boca y el corazón cerrados para que no nuble su razón. Estás molesto con ella, Tanjirou, estás indignado porque se fue y estuvo todos estos años viva sin importarle que estuviste buscándola tanto tiempo. Hay que repetírselo para no olvidarlo. Estás molesto con ella, estás molesto con Kanao y quieres explicaciones, no te desvíes, no te desvíes, no te desvíes...
Tanjirou hace un movimiento de hombros y después empieza a zafarse de ella. Carraspea un poco porque siente un nudo en la garganta; se relame los labios y luego crea distancia entre su tacto que añora y su raciocinio. Se levanta del suelo, sacude sus prendas y gira a verla: tiene los ojos heridos, como si su acto le hubiese lastimado. ¿Pero quién de los dos ha sufrido más, Kanao? No quiero averiguarlo por el momento.
—Mi padre se suicidó hace algunas semanas —le dice sin tapujos, directo esta vez porque ese sí es un tema que ha ido apaciguando con el pasar del tiempo—. Te dejó una carta.
Kanao acomoda el parche sobre su ausencia de orbe y con el otro le interroga en silencio y asimismo le hace notar su extrañeza. ¿Una carta para mí...? Así es, Kanao, una carta especialmente para ti. Tanjirou le pasa el sobre que pesa una minucia y le pide, le implora así como él sabe hacerlo que la lea frente a él, que necesita saber qué hay ahí y por qué su último esfuerzo es dirigido hacia una extraña que entiende que no conoce de nada, solo de relatos insulsos y un dibujo con sus facciones aniñadas.
—Tanjurou... —lee la cubierta, la toca con sus yemas de sus dedos y vaticina lo que es evidente—: así que al final sí eras hijo de Tanjurou-san... ¿Tanjirou Kamado...?
Se toma un momento y luego suelta una risita que se evapora en ese ambiente tenso. Es cierto, hasta ese momento ella no sabía su apellido. O quizá ya lo había averiguado antes, pero lo gracioso radica en que no supo su apellido hasta después, es más, recuerda que luego de acostarse ninguno de ellos habló más de su pasado. Qué irrisorio, ¿no? Amar a una persona sin siquiera saber su apellido o segundo nombre.
—¿De dónde lo conocías?
—Era el chofer de mi papá biológico. —Kanao camina a través del estudio por un abrecartas, pero no al encontrarlo decide simplemente rasgar el papel y sentarse en su silla, invitándole a él a sentarse en un mueble o si desea en la misma alfombra. Tanjirou se sienta en el escritorio luego de hacer a un lado todos los papeles que encuentra su tacto; necesita ver sus expresiones de cerca para asegurarse que no mienta.
—¿Lo recuerdas? —insiste—. Quiero decir, ¿recuerdas a mi padre como el chofer del tuyo?
—Sí, lo recuerdo muy bien —confirma, aspirando un poco de aire porque en sus planes del día no estaba ensuciar la memoria de un muerto—. Tanjurou-san fue quien nos trajo del extranjero hacia Taiyou.
ESTÁS LEYENDO
ESTRAGOS | TANJIKANA
Fiksi Penggemar«Tuve la mayor parte de ti, luego un poco menos y ahora no tengo nada». ›kimetsu no yaiba fanfiction: tsuyuri kanao x kamado tanjirou. ›imagen: bondora5423. ©𝗲𝗿𝗶𝘀𝗱𝗲𝗮, 𝟮𝟬𝟮𝟮.