Ver a los hermanos (o ex-hermanos) de Lily Evans con el uniforme verde y plata, hacía que muchos sintieran que podían derretirse, más que nada por el aura que el pelirrojo y la rubia; emanaban.
Violett Evans observa a sus hijos con sorpresa, orgullo y melancolía. Durante las noches que paso en vela, pudo ver que anteriormente no tomaba en cuenta a Petunia en nada (aunque la culpa era de la niña por no pedir su atención) pues donde su bella Lily quería vestidos nuevos, Petunia se mantenía callada y después, aparecía un libro, un nuevo juego de costuras en su mano, por lo cual; sospechaba que la rubia absorbía el dinero que el pelirrojo ganaba.
Eso explica porque no nos daba dinero. pensó la Evans, mientras observa a sus hermosos hijos sentarse en la mesa verde y plata. Suspira, ¿Ellos no podían entender que Lily era el impulso para la alta sociedad? Tendría que hablar con Petunia volviendo a su hogar.
El señor Evans por otro lado, observaba con disgusto a la rubia. Nunca amo a Petunia, ella era esa reencarnación que aborrecía, la detestaba por ser naturalmente buena en las cosas sin haberlas practicado, pero su odio hacía ella era más que nada porque se parecía a su madre, una mujer que no era lo que él decía (una ama de casa) sino que era una mujer que trabajaba en un burdel y todo porque su honorable padre, que estaba desafortunadamente casado (aunque eso no era culpa de él) no podía sustentar en su hogar. Frunce el ceño, necesitaba poner en su lugar a esa niña, porque la única que podía sobresalir era su Lily.
Las cuatro mesas se llenan de alumnos, y de los adultos, pero faltaban unas personas.
- ¿Dónde están? - interrogo un pequeño Slytherin
- No se, pero ahora que recuerdo, ellos no llegaron a la sala común a dormir - señaló de pronto Severus
- ¡¿Eh?! - exclamó James, quien ingresaba al comedor
Los pasos del azabache se escuchan fuertemente, y pronto estaba frente a Severus, quien desconcertado, no pudo evitar la acción de James, que fue alzado y colocarlo frente a frente.
- ¿Cómo que no están? - interrogo
- No Potter, tampoco es que hagamos conteo de corazones latiendo - bufo Severus
Podía parecer algo normal que ellos pelearan, pero aquello no lo era. Todos notaban como uno de los brazos del Potter rodeaba la cintura de Severus, mientras que la otra hacia gestos raros, también estaba que por culpa de la suave diferencia de estatura, el Prince estaba de puntillas, manteniendo el equilibrio por el Potter.
Estaban incrédulos, pues aunque muchos quisieran negarlo, ¡Se veían adorable! Estaban emocionados viendo como todo iría, pero Jackson no lo estaba, ¡Estaba furioso! En movimiento rápido, el pelirrojo quitó las manos de James de la cintura de Severus, cosa que sorprendió a los dos involucrados que apenas se percataban de la posición en donde estaban.
- Lo lamento - expresó James - No era mi intensión hacer eso
- No lo vuelva hacer heredero Potter - expresó neutro Jackson
Severus observó a su hermano con incredulidad, pues sabe que su hermana mayor es... sobreprotector. James por su parte; se remueve nervioso en el lugar, saber que tiene que hablar con Jackson, pero la mirada que le ha dado, le provoca miedo, ansiedad y la forma en la que brilla sus ojos, solo era una promesa de destrucción total.
- Jack, estoy bien - asegura con tranquilidad
Los ojos verdosos de Jackson se vuelven cálidos y pronto, el ambiente se calma.
- Prince, ¿En serio no sabes donde están ellos? - interrogó James de nuevo
- No - niega suavemente - Abuelo, ¿Tu los viste?
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𝐋𝐞𝐲𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐄𝐥 𝐑𝐞𝐲 𝐄𝐬𝐭𝐞𝐥𝐚𝐫
FanfictionLa guerra dejó varias heridas en muchas personas, y Harry Potter era una de ellas. Perder a su padre, no se comprará con ver morir frente a sus ojos a su papá, al hombre que le dio la vida ni mucho menos quien lo cuido. Por tal motivo, el conocido...