La guerra dejó varias heridas en muchas personas, y Harry Potter era una de ellas.
Perder a su padre, no se comprará con ver morir frente a sus ojos a su papá, al hombre que le dio la vida ni mucho menos quien lo cuido. Por tal motivo, el conocido...
Los elfos eran increíbles cocinando, de eso no había duda, y sinceramente, muchos se sorprendieron cuando vieron como las comidas habían sido cambiadas por cosas más nutritivas y deliciosas, de las que se servían antes.
Los enormes platones que antes eran llenados por comidas que chorreaban aceite, ahora estaban llenas por comidas que si vienen, eran cocinadas con algo de grasas, pero no tenían esas cantidades de grasas. Había al menos cinco tazones de ensaladas de lechuga con zanahorias, pepinos, manzanas verdes, y a lado de cada tazón, había pequeños tazones de cacahuetes salados y enchiladas con pequeños cubitos de queso, muchos no comprendían el porqué, hasta que vieron a Marcela llenar un tazón con ensalada y ponerle los dos tipos de cacahuetes y cubitos de queso, para después ponerle chilito en polvo y limón. Curiosos, muchos hicieron aquello, así como otros tentaba las comidas que se le estaban dando.
-Vaya, esto está delicioso- comentó con calma alumno de quinto año -No sabía que esto estuviera así de delicioso
-¿Verdad? Es una experiencia total de sabores- sonrió una joven señorita que estaba al frente de él
-Me encantan las papas que estamos comiendo- sonrió alguien más
Más comentarios gustosos sobre la comida que estaban degustando, y aunque a los Evans les costara aceptarlo, podían sentir la diferencia en la comida de días anteriores habían estado consumiendo. Está era más saludable.
- Disculpen- dijo con calma el pequeño Claude quien estaba en las piernas de Cygnus.- ¿Podemos ir a caminar un poco? Por favor
- Claro, no veo porque no, es más, de hecho, les íbamos a comentar que tenemos unos asuntos que atender y tenemos que partir al ministerio - comentó con calma Hadriel - Así que después de comer, tienen el día libre, mañana seguiremos leyendo
Muchos Festejan, alegres de saber que podrían estirarse un poco, mientras que los adultos se cuestionan que es lo que los futuristas tienen que hacer.
- Hadriel - llamo Eileen a su nieto mayor.- ¿Qué es lo que estás tramando, querido?
- Nada malo abuela, pero es hora de que Hogwarts vuelva a su gloria - dijo con calma el Potter
Muchos los miraron con curiosidad y fue entonces cuando se levantaron para irse, aunque claro, no fue así de fácil, pues Teddy y Delphini habían exigido su despedida y su cariño.
- Que exigentes, Mocosos malcriados - dijo Damián, mientras besaba las mejillas regordetas de su hermana
- La culpa es nuestra - se lamentó Percy, mientras tomaba la mano de Marcela. - No debimos de dejarlos siempre hacer de las suyas
- Si, pero quien podría negarles algo a estas pequeñas cositas- sonrió Luna - Los vemos después, compórtense
Todos se fueron, mientras que los menores quedaban a cargo de sus padres, quienes no comprendían que era aquello tan importante que tenían que hacer.
- Por qué siento que van a dominar el mundo - suspiro de manera resignada Eileen
- Eso es porque lo harán - suspiró Fleamont
Nadie podía ya dudar de eso, ya que los mayores se ha Ian ido con los futuristas.
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