Distinto

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Narro yo:

El chileno se acercó al pequeño Perú y tomo su mano llamando su atención, el pequeño lo miraba de forma temerosa ¿Y esque quien no? Todo allí lucía horrible, la sangre, los cadáveres....Quería irse ya.

Chile: Vámonos. No quiero que te asustes con lo que pasara aquí --Susurra-- quiero hacer tantas cosas contigo,pequeño...

"Virú...soy Virú" dijo, bueno al menos no sería tan confuso así. Esos ojos dorados, dios allí estaba su pequeño... Cuando eran niños...

Virú: Quiero irme a mi casa señor.

Chile: Eso no va a poderse. Pequeño, ahora tu vivirás conmigo, Virú...vámonos ¿Si? --Dijo suavemente para después tomarlo en brazos cargandolo--

Ambos bicolores mayores se miraban atentamente, Suiza por su lado, miraba perplejo al otro Perú, así que ese era el ser que acabo con el mundo, el de años antes...

Principe: Chile, me regresaras al final de esto ¿No es así? Estaba en medio de algo con Dinamarca.

Chile: Si, si --Dijo-- vendré aquí en dos horas para regresarte allá.

Principe: el tiempo sobra entonces

La mirada del príncipe se desvío a ver al suizo, admitía que esos ojos verdes eran fascinantes.Verdes claro...lindo...

Perú: ¿Si entiendes que soy tú?

El pequeño fue entonces llevado en brazos del chileno hasta un grupo de soldados quienes vieron curiosos al niño.

Chile: Regresemos.

Escoltados entonces, dieron rumbo al nuevo hogar y quizás "escuela" para el pequeño bicolor quien no podía evitar mirar los al rededores.

Principe: Realmente no entiendo una mierda de lo que está pasando, pero si se algo: Mi boleto de regreso a mi realidad es tu cabeza y la del "ojitos bonitos" también.

Suiza: Creí que eras más fuerte --Dijo-- pero pelear contra alguien que está en el estado de Perú es cobarde.

Principe: Ja ¿Y qué? Igual estará bajo tierra.

Y quizá, quizá aquella era una batalla justa, era él contra él mismo, ya no era una cuestión de "¿Cual es el don más poderoso?" Sino "¿Quien usa mejor sus armas?"

Por otro lado, era innegable que la ventaja la tenía cierto peruano autodenominado "principe" era superior al contrario dado que: Quizá nuestro Perú había errado en dejar de usar sus dones. Estaba fuera de forma, aún así >>El diablo sabe mas por viejo que por diablo<< ¿Verdad?

Perú: Veremos --Dijo mientras de sus manos dos llamas de fuego se creaban-- Ponte a salvo Suiza.

Principe: Suiza --Repite-- Lindo nombre, ojitos bonitos, quiza me lleve tus lindos ojos para recordar esto.

Muy opuesto, el contrario creo un ventarrón en el cielo, aquel oscuro cielo quien presenciaba la escena. El príncipe creó un escudo, pero no uno que lo cubría por completo, sino que esté solo se enfocaba en su rostro, cual casco de seguridad

Había olvidado lo vanidoso que era para aquellos días.

De Perú además de el fuego salieron ocho navajas

Principe: Para hacerlo más divertido, la parálisis no es válida. --Dijo tomando aire--

Perú: Como quieras.

El bicolor uso su valocidad entonces para tratar de llegar al príncipe quien lucía bastante tranquilo, sin embargo, no alcanzo ni el metro pues tan de pronto un silbido aturdio todos sus sentidos, lo había olvidado, quizá se había desconectado tanto de sus dones que había olvidado algunos.

Sus oídos sangraron, ponía resistencia, dejo a un lado el fuego y con inmensos trozos de tierra trato de noquearlo, pero estaba todo tan borroso, no miraba bien y le daba a objetivos erróneos.

Trato de pensar, tenía que enfocarse.

Suiza: ¡PERU! --Llama-- ¡OBJETIVO A LAS 5!

Por otro lado, gracias al suizo había aprendido ciertas cosas importantes como códigos militares, trato de calmarse y de un suspiro envío a sus navajas hacia la dirección pedida. No sintió que sus extensiones le dieran a algo y eso le frustró

Suiza: Objetivo en movimiento --Dijo tratando de ver bien donde estaba--  ¡es muy rápido!

Maldijo para sus adentros, había tratado de no hecerlo pero el dolor y la presión en su cabeza estaban por dejarlo inconciente, sus ojos sangraban y su nariz también.

Perú: Cubrete --Pidio alzando la voz --

El suizo no lo pensó mucho, solo hecho a correr unos metros y se posicionó tras unos escombros.

El silbido no se detenía, tomo aire y uso uno de sus dones más destructivos, ni siquiera su oponente esperaba que se usará, no si lo que pretendía era reconstruir aquel lugar.

Extendió la mano e hizo que el entorno de destruyera en una gran explosión,sabía que eso no lo mataria, ni a él ni a su oponente pero si dejaría que dejase de silbar.

Parpadio, todo estaba consumido en cenizas, no quedaba nada en al menos 5 metros a su al rededor.

Vio a su oponente toser, rápidamente se acercó y golpeó su abdomen quitándole aire, escucho las costillas querer romperse, agradecía haber recuperado sus dones, se le abalanzó encima sentándose en su abdomen, alzó su puño queriendo golpear su rostro

Pero uno se adelantó, el contrario golpeó sus costillas queriendo sacarlo de encima. Perú sintió un fuerte viento, un huracán, maldita sea.

Un descuido, uno pequeño, las manos del príncipe estaba ahora cerca de su rostro y éstas se incendiaron. El menor pensó rápido y usado el don que personalmente más interés le causaba, hizo de su mano un cuchillo clavándole en el pecho del príncipe.

Perú: Je...--Aprieta el cuchillo en el  pecho contrario --

La mirada del príncipe lo vio feliz, así que en su futuro seria así de fuerte...

Principe: No hemos cambiado --Sonríe--

Perú: Lo hemos hecho, y demaciado. --Dijo--

Principe: Mírate y mirame...No lo hemos hecho, solo nos hicimos más fuertes... --Dijo mientras con cautela llevaba su mano al abdomen del peruano-- Tu y yo estamos destinados a ser dueños de todo...

Perú: No...Solo tienes miedo. --Dijo-- Pero lo superarás y te amaras tanto...Tendremos una familia...amigos....un novio que nos ame...

Principe: ...Estúpido.

La espada se clavó en su abdomen, el menor giro a verla, estaba transpasando su abdomen de lado a lado, lo atravesaba...

Principe: No sé qué carajo paso en esta realidad, pero en la mía nunca he sido más feliz

Lo empujó quitándole de encima ahora las cosas se invertían, Perú estaba bajo suyo, el principe sonrió de oreja a oreja mientras tocaba su herida en el pecho, sangraba y demaciado...Pero aguantaría

Principe: Con nuestro don hubieras enterrado la navaja hasta transpasar el corazón. Eres un idiota por no hacerlo, pudiste haberme matado.

Perú: --Tose-- Quería...quería que regreses a tu realidad...salvalo...A Chiru...A los gemelos...Quiza allá es distinto...

Principe: No sé qué carajos me hablas. Pero se terminó para ti.

Juntos Para SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora