Temptation || Draco Malfoy

c.067

Sin saber donde mierdas había ido mi tío, yo decidí ver a mi nueva prima.

Estaba en esa típica salita con más bebés recien nacidos cada uno en una pequeña cuna de hospital.

No sabía cual de todos ellos era mi prima, hasta que la sanadora que me había llevado hasta ahí se acercó a una de las cunas y sonrió mientras señalaba a una de ellas.

Mi vista fue directa a esa cuna y vi a una niña pequeña durmiendo en esa cuna.

No pude evitar sonreir al verla, se parecía a mi tío.

Me pregunté cuando podríamos llevarnosla del hospital.

-Supongo que esto es el fin-suspiró mi tío regresando a mi lado-se ha ido y ha dejado a nuestra hija aquí, si es que es mi hija

-Es tu hija-sentencié-en verano escuché a Laura hablar con Nacho por teléfono, ella le confirmó que la niña es tuya y de nadie más

-Pero por que lo ha hecho!-suspiró tapandose el rostro-ha dejado aquí a su hija recién nacida, y a mi también! Nos ha dejado!

-Laura dejó de ser de mi confianza tras su secuestro-hablé-dejé de fiarme de ella, pero tampoco quería interferir en vuestra relación

-Por que siempre lo sabes todo?

-No lo se-respondí-me vendrá en la sangre

-Que hacemos ahora?

-Tu ve y sientate, yo iré a encargarme del resto-sentencié

Busqué de nuevo a esa misma sanadora, la cual se encontraba hablando con otra sanadora más mayor que ella.

-Quando possiamo portare la ragazza?-pregunté (Cuándo podremos llevarnos a la niña?)

-Dobibamo fare alcuni esami medici-aclaró la sanadora mayor-possiamo farle stasera e domani puoi prenderla (Necesitamos hacer algunas pruebas médicas que podemos hacer esta noche y puedes llevartela mañana)

-Saremo qui-sentencié-potrei tenere la ragazza per un po? (Estaremos aquí, podría quedarme con la niña un rato?)

-Sì!-habló la sanadora más joven- tu sei Martino?

-Keira Martino-repetí

Ambas asintieron y fueron a por la niña. La sanadora más joven la cargó en sus brazos y con cuidado salió de la habitación y me la entregó en medio del pasillo.

La traian envuelta en una manta de hospital y a decir verdad bajo la manta la niña solamente llevaba puesto un pañal y un gorro de bebé que le habían puesto en el hospital.

Sonreí al verla, era la versión en femenino de mi padrino.

Busqué a mi tío con la mirada y lo encontré sentado en una salita de espera, con la vista fija en el suelo.

Así que me acerqué a él y me senté a su lado.

-Mañana por la mañana nos la podremos llevar-hablé sin separar la vista de la niña-es tu versión femenina, será toda una reina cuando crezca

-Como lo eres tu-respondió-almenos Laura no se la ha llevado, sino me hubiera vuelto completamente loco

-Ella ya es una de los nuestros-hablé-será una Martino, como todos nosotros

-Será como tu entonces, una joya de la corona-suspiró mientras la miraba-me recuerda a ti, tiene las mismas mejillas que tu cuando naciste, rellenitas

Sonreí al escucharlo.

-No le han puesto ningún pijama-hablé-no le habeis traido nada?

-Laura dijo que se encargaría, pero suponiendo que ni si quiera tiene nombre, dudo de que le haya traido ropa