Capítulo 2

1K 52 0
                                        


SEBASTIÁN

Solo debo concentrarme, dar pases, confiar en mí equipo, correr, evadir y.....

¡GOOLLLLL! se escuchó por todo el estadio, las personas encargadas estaban felices, pues habían luchado mucho para entrar en las finales y no solo lo hemos conseguido, si no que hemos logrado eliminar a unos de los candidatos a las finales.

¡Así se hace Sebastián!

¡Esos son mis chicos! la gente estaba loca, solo estaban a tres partidos de ganar.

Ya lo tenemos Sebas dijo mi amigo Samestamos a punto de ser campeones lo hemos logrado ¡El dinero está prácticamente en nuestras manos! ―dijo caminado de espaldas.

No nos confiemos aún, faltan tres partidos ―advertí, Sam asintió y corrió a su área. Yo me quedé en la mía, Sam era defensa con otro más y yo con otros dos éramos delanteros. Y Marcos era el capitán. jugamos bien juntos éramos mejores amigos del instituto. Aunque faltaban los cinco minutos adicionales el partido ya era nuestro ya que todos los anteriores partidos habíamos ganado seis y empatado dos Mientras que ellos habían perdido dos y empatado uno y ahora la derrota sería sumada a tres lo cual era grandioso.

El equipo ganador recibía una buena cantidad monetaria la cual sería transferida a su casa hogar, la nuestra lo necesitaba, había escuchado sobre la crisis del orfanato, si no ganamos este cerrará y nos llevarán a otras ciudades más lejanas sin saber si nos quedaremos todos juntos. Por esto jugábamos, por nosotros. Por el orfanato que nos recibió cuando no teníamos a dónde más ir.

¡Águilas! ―miré y sonríe, Mina estada echando brincos y gritando, alcé mi mano para saludarla. Su vestimenta combinaba con la del equipo, azul y blanco¡Mete un gol por mi Sebastián! Asentí. Era una excelente persona y lo que había hecho por mi desde que llegué aquel lugar es mucho para mí. Ella se había convertido en una madre para mí. Así que un gol no se lo puedo negar, ya había metido el primero, pero uno más uno menos. Así que me aliste. Balón en el centro, Cap. en medio, Robert a la izquierda yo a la derecha, el otro chico del equipo rival se alista para rebasar. Mi mirada cae en el Cap, que asiente. El silbato suena, el sol está en el centro, todos estamos cansado, la diferencia es que tenemos ventaja, admiro a estos chicos ya que, aunque ya estén eliminados lo siguen dando todo. El balón se mueve y Robert se lo quita corre al área de ellos, dos tipos lo rodean, Robert juega con el balón y lo alza, brinco para atraparla con mi pecho, comienzo a correr, esquivo a dos, el Cap me hace seña para que se la dé, pero si lo hago no podré dedicarle el gol a Mina, entonces decido arriesgarme, hago una maniobra y me saco a dos, corro más rápido y con todas mis fuerzas pateó al arco, todo sucede a cámara lenta, el portero intenta agarrarla, pero ya es muy tarde el balón golpea la maya y....se lo que sucede corro hacia Mina y junto mis manos para hacerle un corazón con ellas y todo el mundo grita.

― ¡Goool.......! la gente se levanta de sus puestos unos felices y otros no― ¡Y ganan, ganan las Águilas del norte, pasan a finales, pasan! grito el locutor !!Gol de Sebastián número 12, ¡su segundo gol y da por terminado el partido! Los muchachos se tiran encima de mi felices.

Eres un maldito loco dijo el Cappero eso fue genial Sebas ―las chocamos entre todos, Mina viene hacia mi feliz y me rodea con un abrazo.

No, estoy muy sudado digo entre risas.

No me importa campeón me beso en la cabezaEres un loquitome sacudió el cabello.

La Adopción CorrectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora