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Sebastián.

«No te quería Sebastián, te odiaba»

Trate borrar todo respecto a esa mujer, pero con su llegada a provocado que todo vuelva a mi mente. Y es doloroso.

Todo lo que me ha dicho cuando estaba con ella.

«Todo es tu culpa» «No te quiero niño» »no te me acerques» «ojala te perdieras» «odio tu existencia »

Ella nunca me quiso. ¿Por qué ahora viene y quiere hacer el papel de madre, el cual ella mismo decidió perder?

Ella no es mi madre y debo buscar a la que en verdad lo es.

—¡Mamá! —corri y corrí. Me resbale en un charco de agua.

Entonces la vi.

—¡MAMÁ! —me levante torpemente— ¡No,no,no!

Me arrodille donde ella

—Mami, por favor, por favor. Mami —coloque su cabeza en mi regazo. Vi su herida, la sangre.

Pero ella abrió los ojos. Lo hizo.

Suspiré aliviado

—Mami —llore.

—Sebastian. Tienes que irte de aquí. —me colocó su mano en mi mejilla— Estaré bien. Vete. —saco su celular.

Ya que Ella me lo había quitado el mío.

— No llames a Tyler, no te contestará —limpie sus lágrimas— Llama a la policía y pide ayuda. Hasta que ellos lleguen busca un lugar seguro.

Negué.

— No te voy a dejar —le prometí.

—Sebastian......

— No, mamá no lo haré —me levanté con cuidado— Vamos mami, ayúdame a irnos de aquí.

— No puedo —estaba perdiendo mucha sangre. Y aún así pudo ponerse de pie

— Arrimate a mi ¿Si? —ella lo hizo.

No colocaba todo su peso, ella hacia lo posible.
Marque a el 911 desde el celular de mamá

— Emergencia ¿Cuál es.....? —no lo deje terminar.

— Necesitamos ayuda, mi madre y yo estamos en peligro, ella está herida. Nos persigue una mujer armada.

—¿En donde se encuentra?

— No lo sé. Estamos muy alejados de la cuida.

—dile que estamos en la bodega de embarques —dice mamá.

— Bodegas de embarques —le dijo.

— Escuché. Ya mandé varias patrullas, pero deben mantenerse a salvó mientras ellos llegan, la ambulancia va en camino. Resistan y no...
.
— Deja ese teléfono Sebastián —escuche decir.

Mierda.

— ¿Hola? Sigue ahí...—preguntaba por el teléfono.

— he dicho que lo dejes —advirtio de nuevo Mina o Ginger.

Hago lo que me pide. Después su mirada va a mamá.

—eres una mujer muy fuerte Doctora.  —nos apunta— Deja de juegos Sebastián, ya es hora de irnos.

Mamá coge fuerzas y me coloca tras suyo.

— El no se irá contigo. No dejaré que te lo lleves. —dice seria— ¿Te haces llamar su mamá, cuando lo has dejado solo todo este tiempo?

La Adopción CorrectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora