Capítulo 31 (Toda la verdad)

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Narra Natalie

-¿Que me paso?-susurré y veo a Liam. Él estaba cruzado de brazos y no tenía una cara agradable.

-Siempre lo supiste, siempre lo supiste y nunca lo dijiste. Eres igual que ellos-dijo Liam y lo miro confundida.

-¿De que hablas?-pregunté

-No te hagas, tú sabes de lo que hablo-dijo y mis ojos se llenan de lagrimas.

-Realmente no lo sé-dije y el me lanza el celular de mala manera y se comienza a reproducir un video. Mis ojos se llenan de lagrimas al ver el video. De repente un montón de Flashes comenzaron a venir a mi mente.

Esos recuerdos...

Yo no recordaba esto...

¿Porque ahora si?

-Ella era mi madre, y tus padres son unos asesinos. ¡Ellos la dejaron desangrándose y no hicieron nada!-gritó Liam con sus ojos llenos de lagrimas.

-Yo...-el no me dejo hablar.

-Se que estás embarazada, y desde ahora te digo. Que no te quiero volver a ver en mi puta vida, eres igual de asesina que tus padres. Vete a la mierda Natalie-dijo Liam y esas palabras entraban en mi como si fuesen un puñal.

-¡No te quiero en mi puta empresa!-gritó Liam y sale dando un fuerte portazo.

*****

-¿Se puede saber porque estás empacando tus cosas?-preguntó Steven observándome.

-No tengo nada que hacer aquí, creo que quien mejor te lo puede explicar es Liam-dije terminando de cerrar la caja.

-Natalie no te vayas, mira trabaja para mi. Yo te contrato, pero no te vayas. Sabes lo especial que eres para mi, aunque entiendo tus sentimientos hacia mi hermano-dijo Steven y miro a Steven.

-Mereces algo mucho mejor que yo. Mírame no soy nadie, no tengo nada. Yo no puedo darte la vida a la que estás acostumbrado. Además, te veo y te quiero como un amigo-dije y tomo la caja entre mis brazos.

-Ah, y ten esto-dije dándole la liquidación.

-Dile que gracias, por todas las cosas que hizo por mi. Y que, le deseo toda la felicidad de este mundo. Esta será la última vez que sabrán de mi-susurré y salgo de allí y un millón de recuerdos vienen s mi mente. Estalle en llanto cuando entre al acensor.

Narra Liam

-¿Que mierdas paso? ¿Porque Natalie se está yendo?-preguntó Steven y lo mire.

-Los padres de Natalie fueron quienes asesinaron a mamá-dije y los ojos de Steven se llenan de lagrimas.

-Pero ella no tiene culpa-dijo y lo mire.

-Ella estaba ahí-dijo el.

-¡Era una niña!-gritó Steven.

-¿Como va a recordar eso?-preguntó Steven.

*****

-No quiero volver a saber nada de ti-dije mientras observaba cómo las fotos eran consumidas por las llamas.

-Para mi estas muerta desde ahora-dije secando mis lagrimas con rabia.

*****

-Estoy muy preocupado, Natalie no contesta hacen días y no se ni donde esta. Fui a buscarla a su casa y nada-dijo Steven.

-Te desconozco-dijo.

Narra Natalie

-Señora, su hijo está llorando-dijo mi ayudante. Llevaba días en la cama, solo me levantaba a ir al baño y regresaba y apenas había comido. Estaba cayendo de nuevo en esa maldita depresión.

-Por favor atiéndelo-susurré y mis lagrimas no tardaron en salir.

-Usted no está bien-dijo ella y la miré.

-No soy tan fuerte como pensé-susurré y ella sostiene mi mano.

-Usted es fuerte, solo tiene que levantarse-dijo ella y niego.

-Mis padres asesinaron a una mujer-susurré estallando en llanto.

-No puedo con la culpa-dije y comienzo a temblar, según el llanto.

-Señora, eso no le hace bien a su bebé-dijo ella y la miro.

-Por favor, quiero estar sola. Este es el número de Steven, para cualquier cosa-susurré y ella toma la tarjeta y la guarda y se va. Mi celular comenzó a sonar y veo que era Morgan. Pero tampoco conteste, no tenía ganas de hablar con nadie y mucho menos de mirar a nadie.

Toda mi vida viví engañada.

Jamás imaginé que mis padres hicieran esto...

Y me dejaron cargando con la culpa.

Me levanto de la cama y comienzo a caminar hacia el balcón del apartamento. Realmente estaba muy alto. Observo con detención el suelo y luego miro hacia lo lejos. Para vivir así lo mejor es estar muerto. Estoy cansado de luchar. Oigo voces que me dicen "hazlo".

-Sra. Thompson. Su hijo tiene hambre-dijo mi ayudante sacándome de mis pensamientos. Observé a Harry y lo tomé entre mis brazos y me senté en la silla mesedora que estaba en el balcón.

-Yo sé que tienes un papá muy bueno, que te ama mucho y se que él va a cuidarte muy bien. Nunca olvides lo mucho que te amé y lo importante que fuiste para mi mi amor. Espero que me perdones pero ya no puedo cargar con esta cruz-susurré entre lagrimas, y mi hijo tomaba de mi pecho.

-Nunca voy a olvidarte mi niño-susurré y dejé un beso en su frente. Harry se calmó y se quedó dormido, entre y lo puse en su cuna. Regresé a la terraza y vuelvo a mirar hacia lo lejos. Bajo la vista a mi vientre que ya está empezando a notarse.

-Aun no se si eres niña o eres niño. Porque se que e sido irresponsable y no e ido a verte nuevamente. Pero... quiero que sepas que sin aún conocerte te quiero muchísimo, pero... espero que tú también puedas perdonarme-susurré y cuando voy a cruzar la pierna para las rejas siento la mano de mi ayudante que agarra mi brazo.

-¡No lo haga!-dijo y la miro.

-¿Para que? ¿Para seguir con este martirio?-susurré entre lagrimas. Ella tomó su celular. Y comenzó a marcar un número.

-¿Que estás haciendo?-pregunté y rápidamente me saque su agarre y vuelvo a mi habitación. Y salgo de mi apartamento. Así como estaba. Con una ropa vieja y con un moño mal echo. Comencé a correr hasta llegar a la salida de estos apartamentos. Encendí mi camioneta. Veo a mi ayudante que intenta detenerme pero yo solo doy reversa y arranco a toda velocidad.

Narra Liam

-Hola-contestó Steven.

-¿Que? Carajo y no la detuviste-dijo Steven y rápidamente su color desaparece y me mira.

-¿Para donde fue?-dijo y rápidamente corre hacia la salida. No entendía que estaba pasando, me levante y lo seguí. Cuando me doy cuenta el estaba con lagrimas sobre sus mejillas y buscaba las llaves desesperadamente.

-¿Que está pasando?-pregunté y él me mira.

-Natalie-susurró y lo mire.

-¿Que con ella?-pregunté.

-Natalie se va a suicidar, tengo que detenerla-dijo y siento como si un barde de agua fría cayera sobre mi cuerpo.

-¡Si a Natalie le pasa algo tú serás el único culpable!-gritó Steven.

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