CAPÍTULO 5.

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"AMOR INCONDICIONAL"

Betty iba a tomar el monitor para poder escuchar lo mejor posible lo que Armando iba a contestarle a su mamá, pero con lo alterada y triste que estaba al querer tomar el monitor este se le cae de las manos y se rompe por lo que Betty no pudo escuchar la respuesta de Armando.

Armando: Mamá, yo no necesito hacerle ninguna prueba de ADN a mi hijo, yo estoy completamente convencido de que Armandito es mi hijo y completamente seguro de que mi Betty jamás me ha puesto los cachos.

Doña Margarita: Yo también estoy convencida de que Betty sería incapaz de engañarte con otro.

Armando: Claro que sería incapaz y no desconfiaré de ella aunque el idiota ese de  Calderón me diga mil veces que mi hijo sea rubio y de ojos claros es otra prueba de que es hijo de Michel por que él tiene los ojos azules y también es rubio.

Doña Margarita: Pero que tontería más grande, que mi niño sea rubio no es ninguna prueba de nada, pareciera que Mario no conoce a tu hermana, ella también es rubia y que ni se le ocurra decir Mario que yo engañé a Roberto con un rubio y Camila no es su hija por que mínimo lo mato. En mi familia hay muchos rubios, mi mamá lo era y habemos varios que tenemos los ojos claros y tu hermana Camila y Armandito heredaron esos rasgos físicos de la familia de tu abuela, además los ojos de mi niño son igualitos a los míos. ¿Cómo podríamos dudar que sea de nuestra familia?

Armando: Yo sé, sé que el físico de Armandito no quiere decir que no sea mi hijo, pero el imbécil de Mario disfruta tratando de lograr que yo desconfíe de Betty, pero no lo va a volver a lograr, yo le prometí a Beatriz que jamás volvería a desconfiar de ella, me dijera lo que me dijera Mario y se lo pienso cumplir.

Doña Margarita: ¿Cómo así? ¿Ya antes Mario había intentado hacerte desconfiar de la fidelidad de Betty?

Armando le cuenta a doña Margarita lo que ocurrió el día que Michel y Betty salieron juntos, que Mario logró hacerlo dudar de que Michel y Betty estuvieran en un almuerzo inocente y que terminó yendo a buscarla en la habitación del hotel de Michel y que obviamente Betty no estaba ahí. Armando también le cuenta a doña Margarita que en lo que el estaba buscando a Betty en la habitación de Michel ella le estaba preparando una fiesta por su cumpleaños, que terminaron festejando solos ellos dos y que él le prometió a Betty que jamás volvería a permitir que Mario lo hiciera dudar de ella.

Doña Margarita: Pues me parece muy bien que hayas decidido confiar en Betty y que no dejes que nadie ni siquiera Mario te haga dudar de su amor.

Armando: Ya he atormentado demasiado a Beatriz con mis celos y dudas y jamás lo volveré a hacer, Betty no volverá a sufrir por mi culpa... Por cierto, espera un momento, voy a nuestra recámara a ver si está dormida y si no le pediré que venga para que la puedas saludar.

Doña Margarita: Me parece buena idea, pero si está dormida no la despiertes, ¿bueno?

Armando: Vale, ya vengo.

Armando entra a su habitación y ve a Betty sentada sobre su cama.

Armando: Mi amor que bueno que sigues despierta, mi mamá vino a visitarnos y quiere saludarte, está en el cuarto de Armandito.

Armando se acerca a Betty y se da cuenta de que está llorando.

Armando (se sienta junto a Betty en la cama y la abraza) : Mi amor, ¿qué pasa, por qué lloras? Es por qué sigues estresada por que los niños no nos han dejado dormir, ¿cierto? Mi vida, trata de relajarte que seguro Camila pronto se acostumbrará a compartirnos con Armandito y él algún día no muy lejano dejará de llorar por las noches, la pediatra asegura que así será, así que muy pronto podremos dormir mucho mejor que lo que dormimos ahora, sé que no es fácil, pero por favor trata de estar tranquila, ¿bueno?

Betty: No Armando, yo no estoy triste por que los niños no nos dejan dormir, lo que ocurre es que por el monitor para escuchar al niño escuché lo que tu amigo Mario te dijo y me duele mucho que haya logrado que una vez más creyeras que te puse los cachos con Michel. Mi amor, de verdad entre Michel y yo jamás pasó nada, te lo juro, de verdad todo el tiempo que pasamos juntos Michel y yo él me acompañó a hacer las compras para organizar tu fiesta de cumpleaños, por eso no fuimos al Lenoir y por eso no te dije en dónde iba a estar en realidad, por favor no desprecies ni rechaces a Armandito que él de verdad es tu hijo... Ve, para probártelo estoy completamente de acuerdo con tu mamá en que le hagan al niño una prueba de ADN, no quiero que ni tú ni doña Margarita tengan ninguna duda sobre que Armandito de verdad es un Mendoza.

Armando: Mi amor, para un momento por favor... Ve mi vida, yo no necesito ninguna prueba de ADN, por que estoy completamente seguro de que Armandito es mi hijo y que tú no has tenido nada con Michel.

Betty: ¿De verdad?

Armando: Pero claro que sí mi amor, tú sabes perfectamente que cuando los celos se apoderan de mí me pongo como loco, imagina cómo estaría si tuviera aunque sea la ligera sospecha de que Armandito no fuera mi hijo, te aseguro que no estaría aquí abrazándote y besándote, si no más bien haciéndote un drama monumental. De verdad mi amor yo no tengo ninguna duda de que soy el verdadero y orgulloso padre del niño.

Betty: Pero entonces... entonces, ¿por qué tu mamá dijo que podrías disipar tus dudas sobre la paternidad de Armandito con una prueba de ADN?

Armando: No lo sé, tal vez por que me vio muy alterado por lo que Mario me dijo, lo que sí sé y te puedo asegurar es que ni ella ni yo dudamos de ti, pero a ver mi amor, si escuchaste mi conversación con Mario y lo que mi mamá dijo sobre la prueba de ADN, eso quiere decir que también escuchaste cuando yo le dije a mi mamá que yo no necesito hacerle ninguna prueba de ADN al chino por que yo no dudo de ti ni de que Armandito sea mi hijo... No entiendo qué es lo que te preocupa ni por qué estás llorando.

Betty: ¿Le dijiste eso a tu mamá?

Armando. Pero claro que sí, ¿acaso no lo escuchaste?

Betty: No, no lo escuché, el monitor se me cayó, se rompió y se dañó, así que no pude escuchar lo que le respondiste a tu mamá. ¿Pero de verdad... de verdad crees que Armandito es tu hijo y no de Michel?

Armando (levantándose de la cama toma la mano de Betty y tira de ella para que se levante también) : Ven mi amor, vamos a la recámara de Armandito, tienes que hablar con mi mamá.

Betty: Ay no, que pena con tu mamá, debe estar pensando lo peor de mí, que te engañé y que su nieto no lo es.

Armando: No Betty, mi amor, te aseguro que nada de lo que crees es así, mi mamá tampoco cree que tú puedas ser capaz de engañarme, por favor ven, vamos a la recámara del niño para que hables con ella.

Betty (suspira y secando sus lágrimas) : Esta bien, vamos.

CONTINUARÁ...........❤️

Historias de Betty y ArmandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora