Historias de Betty y Armando

Nuestra continuación.

Capítulo XXVII.

Día siguiente. Faltan cinco días para Nochebuena.

Presidencia de Ecomoda - 08:15 am.

Betty guarda algunos papeles en una carpeta. Armando abre la puerta de la sala de juntas, entrando a presidencia.

ARMANDO: ¿Estás lista?

BETTY: Estaba terminando algunas cosas aquí.

ARMANDO: ¿Has preparado el discurso?

BETTY:- NERVIOSA) Ay, Armando, ¿por qué yo? Estás mucho más tranquilo cuando se trata de hablar en público.

ARMANDO: Porque no soy el presidente de esta empresa, mi amor, y aunque lo fuera, tú eres el genio detrás de esta idea.

BETTY: (CON DUDA) Pero.

ARMANDO: Sin peros. ¿A quién además de usted se le ocurriría esta idea de una campaña benéfica? Mereces ser la voz que nos lleve un paso más arriba en la nueva trayectoria que Ecomoda aún está por seguir. Y si me necesitas, estaré a tu lado, con mi mano lista para tomar la tuya.

Betty sonríe y toma una de las carpetas. Armando se acerca a la mesa y le ofrece la mano para que la tome.

ARMANDO: ¿Nos vamos, señora Presidenta?

Betty extiende su mano para tomar la de Armando. El anillo brilla en su dedo. Armando se detiene un momento, mirando el anillo. Mira a Betty y luego se inclina y besa el anillo. Los dos abandonan la presidencia de la mano.

Producción Ecomoda - 08:30 a.m.

Betty y Armando están parados en un pequeño escenario improvisado en medio del centro de producción, Gutiérrez está más adelante en el escenario hablando por el micrófono, Varios trabajadores ocupan el lugar. El Cuartel de Feas está al fondo, observando.

GUTIERREZ: Ecomoda se prepara para cinco días de intenso trabajo por una noble causa para ayudar a nuestros hermanos más necesitados. Este año, como agradecimiento por todos los regalos que han recibido esta empresa, sus accionistas y empleados, creamos la primera Campaña Benéfica de Ecomoda.

Todos aplauden emocionados. Betty y Armando aplauden mientras observan a los empleados.

GUTIERREZ: Queremos darle la bienvenida a los 50 trabajadores para que en estos 5 días previos a las celebraciones navideñas podamos alcanzar la meta de confeccionar ocho mil prendas de vestir que serán donadas a familias necesitadas en esta Navidad.

Gutiérrez continúa su discurso, Betty mira a los empleados sonriendo. Armando la mira lleno de orgullo. Entrelaza su mano con la de ella. Betty vuelve su rostro hacia Armande con los ojos brillantes, Betty mira a los presentes y de repente su expresión cambia. Entrecierra los ojos al ver a alguien en el grupo de trabajadores temporeros y la sonrisa de Betty se desmorona y sus ojos se llenan de lágrimas.

Armando siente la mano de Betty sudar contra la suya. Él gira su rostro para mirarla, notando la tensión.

ARMANDO: (Susurrando) Betty, ¿qué pasó?

Betty no responde. Su cuerpo comenzó a temblar involuntariamente. Armando nota la mirada de Betty e intenta identificar lo que ve entre la multitud, pero no puede, vuelve a mirar a Betty.

ARMANDO: (Susurrando) ¿Beatriz?

La respiración de Betty es irregular. Suelta la mano de Armando. El público comienza a aplaudir el discurso de Gutiérrez, sin darse cuenta de lo que sucede.

Armando se gira hacia Betty, sujetándola por los hombros.

ARMANDO: ¿Betty? Betty, habla conmigo. ¿Qué paso?

Betty finalmente se vuelve hacia Armando, pero su mirada se transfigura en absoluto terror. Armando encuentra extraña su reacción e intenta abrazarla.

ARMANDO: Betty, mi vida, ¿qué pasa?

BETTY: ¡Déjame ir!

Armando se asusta y la suelta. Betty sale corriendo, dejando a Armando atónito.

GUTIÉRREZ: ¡Y los presidentes de Ecomoda dan la palabra!

Gutiérrez señala donde estaba Beatriz segundos antes. Armando mira a Gutiérrez asombrado y niega con la cabeza. Gutiérrez, al darse cuenta en el escenario, habló por el micrófono disimulándolo. Armando se va apresuradamente.

Pasillos de Ecomoda - 08:55 am.

Armando fuerza la puerta de la Presidencia, la cual está cerrada con llave.

ARMANDO: ¡Betty Betty, abre la puerta, por favor!

Las puertas del ascensor se abren y las chicas del Cuartel rápidamente se acercan hacia Armando, preocupadas.

BERTA: Doctor Armando, ¿qué le pasó a Betty?

ARMANDO: (NERVIOSO) Yo no entiendo. (TOCANDO LA PUERTA) ¡Beatriz!

INESITA: Doctor, ¿ha probado la puerta de la sala de reuniones?

ARMANDO: Está cerrada también.

Armando se encuentra en un estado de nervios deplorable. Se tapa los ojos con las manos, desesperado. Los cuarteles están confundidos, sin saber qué hacer.

AURA MARÍA: ¡Espera! Betty me dio una llave de repuesto de esta puerta.

SOFÍA: ¿Y qué esperas para buscarla Aura María?

Aura María corrió hacia su escritorio. Armando apoya su cabeza contra la puerta de presidencia, consternado.

INESITA: Doctor, por favor mantenga la calma. ¿Que fué que sucedió? ¿Pelearon?

ARMANDO:- (AFLIGIDO) No, Inesita. Ella vio algo, alguien. No sé.

Aura María regresa con unas llaves y se las entrega a Armando. Prueba algunas hasta que una de ellas funciona y la puerta se abre. Entra Armando. La Presidencia está desierta.

Armando ve abierta la puerta de la antigua habitación de Betty. El Cuartel avanza hacia el interior de la presidencia, Armando ingresa al pequeño salón notándolo vacío. Mira por todas partes. Hasta que nota movimiento cerca de uno de los archivadores de hierro de la esquina.

Hace un movimiento que da a entender al cuartel que los dejen solos. Se acerca con cuidado, intentando no asustar a Betty. Está sentada en el suelo de la sala, apoyada en el archivador. Ojos rojos de tanto llorar. Armando se arrodilla a su lado.

ARMANDO: (Susurrando) Beatriz...

Betty no lo mira. Armando le pone la mano en el hombro, suavemente. Betty se da vuelta bruscamente, sorprendida. El sonido del pánico da paso a la vida.

BETTY: Armando...

Armando cierra los ojos y da un profundo suspiro de alivio. Betty se arroja a los brazos de Armando, abrazándolo con fuerza.

ARMANDO: ¿Qué está pasando, mi vida?

Betty llora entre sollozos que sacuden tanto su cuerpo que Armando tiene que esforzarse mucho para no soltarla. Él le acaricia el pelo, suavemente.

ARMANDO (PREOCUPADO): Quién. ¿A quién viste, Beatriz?

Betty esconde su rostro en el hombro de Armando, mojando su traje. Llora, angustiada.

BETTY:- (VOZ CORTADA) Miguel