Historias de Betty y Armando

Nuestra continuación.

Capítulo VIII.

Ecomoda - Sala de reuniones 15:30

Algunos días después...

Armando, Betty, Catalina, Nicolás y Gutiérrez empacan sus pertenencias al finalizar una reunión.

ARMANDO: - ¿Y cuándo crees que tendrás los precios para el lanzamiento de la nueva colección, Cata?

Catalina se levanta, agarra unas carpetas y su bolso.

CATALINA: -Estarán listos para finales de esta semana, Armando. No te preocupes.

Catalina se da vuelta para salir de la habitación, y se regresa a decir: 

CATALINA: Ah, Betty, Armando... no olviden que hoy es cena con el Dr. Vásquez, ese inversionista que mencioné. Tiene muchas ganas de hablar con usted y creo que será un gran negocio para Ecomoda.

Betty sonríe.

BETTY: Es verdad Doña Catalina, casi lo olvido... ¿A qué hora será la reunión? 

CATALINA: - A las ocho. Te hice una reserva en Mesón en San Diego. Conoces el lugar, ¿no, Armando?

Armando inmediatamente mira a Betty y nota que ella se sentía incómoda. Catalina mira de Betty a Armando, sin entender.

CATALINA: ¿Hay algún problema, Betty?

BETTY (DISFRAZADA) No, no hay problema... 

ARMANDO: (INTERRUMPIENDO) Catalina, ¿no puedes concertar una cita en otro lugar?

Catalina encuentra extraña su reacción.

CATALINA - Ay, lo siento Armando, pero fue un pedido del Doctor Vásquez. Dijo que siempre que viene a Bogotá le gusta ir a este restaurante y realmente no me imagino que sea un problema...

Betty se levanta de su silla por impulso, interrumpiendo a Catalina.

BETTY: - Lo siento, pero necesito resolver algunos asuntos en la presidencia. Permiso.

Betty sale rápidamente de la sala de reuniones. Catalina mira a Betty y se vuelve hacia Armando.

CATALINA - ¿Dije algo mal?

ARMANDO: No, Cata. No te preocupes. (MIRANDO A LOS DEMÁS) Si me disculpan.

Armando se levanta de su silla, dirigiéndose hacia la presidencia. Nicolás y Gutiérrez salen del salón.

CATALINA: - Armando, espera.

Armando se da vuelta. Catalina espera que Nicolás y Gutiérrez salgan del salón. Cuando la puerta se cierra, Catalina dirige su atención a Armando.

CATALINA: - Perdón Armando, no quiero inmiscuirme, pero ¿pasa algo?

Armando suspira.

ARMANDO: -Espero que no, Cata. Espero que no.

Armando besa a Catalina en la mejilla y sale de la habitación. Catalina está preocupada.

Presidencia de Ecomoda - 15:41 pm.

Armando ingresa a la Presidencia y Betty rápidamente pasa sus manos debajo de sus lentes, secándose algunas lágrimas. El lo nota.

ARMANDO: Beatriz...

Betty lo disimula hurgando entre los papeles que hay sobre la mesa.

ARMANDO: Betty, ¿podemos hablar?

Betty no responde. Armando se acerca, dando la vuelta a la mesa. Gira la silla en la que está sentada Betty, haciéndola mirar hacia él. Se arrodilla frente a Betty y le toma las manos. Ella baja la cabeza sin mirarlo.

ARMANDO: Beatriz, lo siento.

Betty mantiene la cabeza gacha.

BETTY: (Susurrando)... ¿por qué?

Armando respira hondo.

ARMANDO: Por haber sido la causa de esos recuerdos que te atormentan...

Betty solloza y se seca más lágrimas. Armando se siente cada vez más culpable.

ARMANDO: (CULPABLE) Ese día en el Mesón de San Diego... ese día fue un error, fui un imbécil, arrogante, estúpido... Betty, lo siento mucho.

 Betty hace callar a Armando con un beso. Él se sorprende, pero rápidamente la abraza con fuerza. Betty se aleja, tocando su frente con la de Armando.

BETTY: Doctor, lo siento... No está bien vivir así... No está bien...

Armando respira hondo. Betty lo mira y nota que tiene los ojos llorosos. Ella le pasa la mano por la cara. Él cierra los ojos y siente su tacto. 

BETTY: - No podemos llenarnos de sufrimiento y remordimiento cada vez que sucede algo que nos recuerda el pasado. 

Armando se levanta rápidamente, dándole la espalda a Betty. Ella lo nota pasándose la mano por la cara, tratando de ocultar las lágrimas. 

ARMANDO:- (DISFRAZADO) Si quieres puedo ir solo... También podemos programarlo para otro día... Lo que prefieras, Betty. 

Betty, todavía sentada, suspira.

BETTY: - No. No vamos a cancelar. Vayamos juntos al Mesón Armando.