A pesar de la guerra | Sonamy

Capítulo 22

Canción recomendada: Kiss Me - Sixpence None The Richer

—¿Me permite una pieza, alteza? —preguntó algún invitado a sus espaldas.

Amy se dio la vuelta y vio a un caballero vestido con un traje azul marino, una máscara color dorado y una gran capa de aterciopelado que cubría gran parte de su cabeza, haciéndolo lucir algo misterioso.

Ella aceptó con un movimiento de cabeza, dio una reverencia extendiendo las esquinas de su vestido, su contrario hizo una reverencia ante ella y delicadamente tomó su mano, empezaron a caminar unos pasos al centro de la sala esperando el inicio de la melodía, Amy puso su mano derecha en el hombro de su contrario y el erizo colocó la suya en su cintura, lo que causó un cosquilleo en ella y pronto la música empezó a sonar.

Aunque estaba bailando con el invitado, aún estaba tratando de buscar a Sonic por toda la habitación, poniéndose algo triste por no encontrarlo en ningún lugar.

—¿Busca a alguien en especial? —preguntó el invitado aún bailando con ella notando su mirada perdida.

—No, no para nada, solo estoy algo distraída, disculpe —contestó Amy rápidamente para fijarse en sus pasos de baile.

—Estoy seguro que pronto encontrará a ese alguien que busca —respondió su contrario seguro de si mismo y con confianza.

—¿Cómo está tan seguro de eso? —pregunto ahora dándole curiosidad el extraño invitado, mirándolo directamente.

—Porqué te dije que trataría de hacer todo lo posible para estar esta noche contigo ¿no es así?

Amy lo reconoció inmediatamente, su voz sus palabras, sus ojos verdosos, era su caballero, era Sonic, su rostro se ilumino rápidamente al saber que era él.

—¿Sonic? pero cómo ¿Cómo entraste aquí? —preguntó Amy sorprendida y feliz a la vez por verlo, pero a la vez susurrando para que nadie los escuchara.

—Sabes, te dije que tengo unos cuantos trucos bajo la manga —respondió para luego dejar salir una pequeña carcajada acercándose a su rostro y guiñando un ojo en señal de complicidad.

Amy pronto sonrió a su comentario, ahora bailaba con más alegría y felicidad. Pronto se sumaron más invitados a la pista de baile, haciéndolos desaparecer entre tanta gente.

Sonic agarró la mano de su contraria y la elevó al aire, haciendo que ella diera un vuelta, sus púas se elevaban haciéndola reir, los pasos parecían tan fáciles, pronto todos los invitados se fijaron en el baile de la princesa con el misterioso invitado.

Amy agarró su mano en el hombro de Sonic nuevamente dando vueltas.

—¿Dónde aprendiste a bailar? —preguntó la eriza impresionada por sus pasos de baile.

—Solo sigo a la música y los sonidos, eso y que tuve alguna ayudita con clases de baile.

Amy soltó una pequeña risa con un suspiro, dirigiendo su vista al trono de su padre, el cuál estaba entablando una conversación con los padres de Darín, los reyes de Solis.

—Es perfecto, pero, ¿mi padre no te dirá nada por no estar vigilando?

—No te preocupes, tengo a amigos cubriéndome, planeé todo para esta noche. —Sonic dio un paso en falso casi resbalando en el piso. —Parece que aún necesito tomar algunas clases más.

—Tienes razón, no debería de preocuparme por eso, mejor aprovechemos el momento que tenemos —reconoció después de lanzar una risa.

Sus ojos pronto se volvieron a encontrar, cómo si recordarán el momento de la anterior noche, el momento dónde por poco besa esos labios color carmesí con suavidad.