Capítulo 13

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Era ya de tarde, el sol estaba empezando a ocultarse y el cielo tomo un color anaranjado y amarillo, pero estaba lo suficientemente nublado para no notar esto. Sonic aún estaba en las prácticas con otros caballeros, en cuánto escuchó el sonido de la campana, que significaba el término de la práctica, se sacó el casco de su cabeza y llevó su armadura hacía el almacén y salió corriendo de ahí.

—¿Vas con mucha prisa no es así? —dijo Silver cruzándose dando una pequeña risa de burla.

—Claro, es la cena con la familia real y yo como un buen y responsable guardaespaldas, escoltaré a la princesa hacía la sala de banquetes —respondió Sonic, volteando a ver a Silver con nerviosismo.

—Claro ¿quieres que te guardemos algo de la cocina? —dijo Shadow, sacándose el casco de la cabeza.

—Deberías Sonic, casi no tienes tiempo para nada —mencionó el zorro marrón.

—No, no es necesario, gracias ¡ya tengo que irme! —Sonic entró rápidamente hacía los pasillos y empezó a correr con dirección al pasillo de la alcoba de Amy dejando a los caballeros atrás.

Esperaba llegar a tiempo y acompañarla, no quería que ella vaya sola y que el rey lo reprendiera por no hacer su trabajo cuando debería.

Cuando finalmente estaba a unos pasos, se tropezó con sus mismos pies, lo que hizo que cayera sobre una armadura puesta en exhibición en ese pasillo, lo que causo un gran ruido. Amy al escuchar este fuerte sonido, abrió la puerta de su habitación y vio al erizo entre las partes de la armadura, al verlo en esa posición no pudo contener la risa y empezó a lanzar carcajadas.

—¡No se ría! No es algo tan gracioso —farfulló Sonic, trató de levantarse pero falló en el intento volviendo a caer sobre la armadura. Se levantó lentamente, dirigiéndose a la eriza, la cuál parecía estar aguantando sus ganas de reír, cuando Sonic al ver la situación en la que estaba, comenzó a reír junto a ella.

—¿Estás bien? —preguntó Amy, ofreciendo su mano para que el erizo pudiera ponerse de pie, aún riendo ligeramente.

—Sí, gracias alteza —respondió Sonic, sosteniendo su mano y levantándose, también riendo—, lamento eso, lo arreglaré enseguida.

—No te preocupes, te ayudaré —dijo Amy, se puso de rodillas y agarró una parte de la armadura.

—No es necesario. ¿No llegarás tarde a la cena con tu familia? —preguntó Sonic, con algo de pena por lo ocurrido.

—De igual forma esto es mejor que estar escuchando a mi tía y a mi padre parlotear por horas en la hora de la comida, te ayudaré —respondió Amy, dirigiendo su mirada a Sonic.

Ambos se acercaron a la armadura y empezaron a reconstruirla, para que quedará como antes, con sus partes en su lugar.

Pasaron algunos minutos tratando de averiguar que parte iba en cada lugar, era similar a armar un rompecabezas gigante.

—Creo que se ve bien —dijo Sonic terminando de colocar el casco.

—Sí, ¡está excelente! —exclamó Amy, poniéndose de pie.

Sonic carraspeo y volteó para ver a la eriza.

—Ahora, ¿me permite escoltarla hacía el salón de banquetes? —preguntó Sonic, ofreciendo su brazo para que Amy pudiera tomarlo.

Amy sonrió y agarró su brazo, caminaron escaleras abajo con dirección al salón.

—¿Me escoltarás siempre? —preguntó Amy, ya que a ella, usualmente no le gustaba que la cuidaran demasiado.

—Solo si quieres que lo haga —respondió Sonic mirando a la eriza.

Amy estuvo sorprendida por su respuesta, claramente había cambiado su opinión respecto a eso, le alegraba que respetara su parecer. Ella le sonrió y volteó su mirada.

A pesar de la guerra | SonamyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora