No pasaron mas de 15 minutos que el Dibu apareció en el patio con un parlante gigante, mal alto que el. Rápidamente el patio ya estaba invadido de gente y Otamendi se encargó de agarrar el micrófono de karaoke para cantar canciones de la T y la M.
Cuando quise ver Enzo ya estaba ahí agarrando el otro mientras cantaban juntos además de tirarse unos pasitos.
"Dios en el cielo y en la tierra, como en Malvinas preparados pa la guerra. Es la ilusión por la tercera, cuarenta millones te siguen donde sea"
-"Le mandamo cumbia perro"- gritó Julián apareciendo en la escena tirandose en la pileta.
Ya se estaba descontrolando todo y lo peor es que me encantaba.
Los demás se miraron entre sí y sin dudarlo se tiraron al agua casi al mismo tiempo, entre ellos Gio, Gonza, Licha, el Cuti, el Dibu etc. Reí ante esto, estaban re locos.
Cuando volvi mi vista a Enzo ya no estaba ahí, Ota estaba cantando solo con un vaso en la mano y unos lentes que vaya a saber uno de donde los sacó.
Me sobresalté al sentir que unos brazos me agarraban de la espalda y piernas sosteniéndome como un bebé.
-Bájame pelotudo- grite pataleando todavía asustada- No se te ocurra Enzo.
-Me das un beso y te bajo- frenó el paso y habló con una sonrisa pícara en su cara.
-Amigos- dije mientras me sujetaba más de su cuello para no caerme, era imposible cuando se le ponía algo en la cabeza.
-Un beso de amigos- repitió y rodeé los ojos- Que? Los amigos se dan besos.
-Estás loco vos- dije riendo y negando.
-Bueno listo, a la pileta- no me dejo responder y en dos segundos estábamos los dos sumergidos en el agua mientras que los demás gritaban festejando.
Julián que estaba más sacado que nunca me abrazaba y daba besitos en la cabeza como felicitándome por unirme a él.
-Te voy a matar Enzo- hablé tratando de empujarlo y hundirlo pero obviamente tenía menos fuerza que el.
-A quien vas a matar vos morocha?- esta vez fue más rápido y me alzó quedando un poquito más alta que el.
-Mira cómo me quedo en vestido boludito, lo único que espero es que no se me trasluzca nada- hablé mirando para abajo tratando de ver algo pero era imposible.
-Están todos re en pedo, no nos van a ver, de última yo te tapo.
-Sos terrible vos, sabías?
-Puedo ser peor, pero me estoy conteniendo- sonrío guiñándome un ojo mientras me pasaba un mechón de pelo por atrás de la oreja.
-Ah si?- hablé corriendo su pelo para el costado tratando de peinarlo un poco.
-Y.. si pudiera yo..-
No terminó de hablar porque nos asustamos cuando vimos que rápidamente todos estaban saliendo del agua casi espantados. Como nosotros estábamos más atrás no nos habíamos dado cuenta de lo que estaba pasando, pero de todas formas salimos rápido sentándonos en el borde.
-Julián sos un pelotudo- habló una voz que pareciera ser del Dibu.
-Sos un asco gil- gritó De Paul.
Con Enzo nos miramos y no entendíamos nada así sin esperar más, nos acercamos a donde estaban todos reunidos.
Y ahí estaba, Julián había vomitado en la pileta.
Enzo al ver la escena estalló en una carcajada mientras que todos giramos a mirarlo, nadie se estaba riendo excepto el.
-Veni dale, salí- habló Enzo estirándole la mano a su mejor amigo quien estaba cabizbajo todavía en la pileta- Alguien que le traiga una toalla.
Minutos después Julián estaba envuelto en una toalla mientras abrazaba al Dibu pidiéndole perdón casi llorando. Todavía estaba totalmente borracho, pero su compañero igualmente lo abrazó y le dió palmaditas en la espalda tratando de que se calme.
-Llevatelo que te lo mato hoy- le susurró a Enzo entre dientes y nosotros dos nos contuvimos la risa, no era momento.
-Vamos a casa Juli- dijo Enzo finalmente mientras lo abrazaba por la cintura colocando uno de los brazos de su mejor amigo por su cuello- Jaz, yo te llevo.
Me dijo como si fuera una orden y ni me dio tiempo a protestar que ya estaba yendo para dentro de la casa.
-Igualmente la noche estuvo hermosa, gracias por invitarme de verdad- me dirigí al Dibu quien todavía estaba al lado mío cruzado de brazos.
Pobre, se le había cagado la fiesta.
-Venite cuando quieras, ya sos una más del grupito- me regaló una sonrisa y me abrazo por unos segundos y yo obvio se lo correspondí.
Casi casi que se me cae la baba.
Al subir al auto, me encontré a Enzo sentado sin remera mientras que miraba su celular. No podía sacarle la mirada, apenas me anime a mirarlo de reojo para no quedar tan obvia. Ahora tenía mas tatuajes en antes y estaba mucho más marcado físicamente.
-Se te perdió algo?- dijo con una sonrisa plasmada en su rostro- Nada que no hayas visto antes igual.
Rodee los ojos y desvíe la mirada para el asiento de atrás, ahí un cómodo Julián Alvarez se estaba durmiendo la siesta de su vida, con la boca abierta y todo.
-Se durmió el bello durmiente- hablé poniéndome el cinturón de seguridad.
-No se controla el boludo cuando toma, después pasan estas cosas. Vamos a ver qué onda mañana cuando se levante.. lo peor es que lo voy a tener que aguantar yo.
-Pobre Juli, no le digas eso. Llévamelo casa que yo te lo cuido.
-Puedo ir yo también?- preguntó mirándome todsvia sin arrancar el auto.
-No, vos no- dije esperando su reacción.
-Ah listo, quedamos así morocha- habló y lo codee mientras que a él se le formaba una pequeña sonrisa y ahora si, comenzaba a conducir.
Me fijé la hora, las tres de la mañana había durado poco la joda. Mejor igual.
Al llegar, Enzo estacionó el auto para que yo me baje, estaba disfrutando tanto el trayecto que ni me había rescatado de que ya habíamos llegado.
-Gracias por traerme hasta acá, no se porque siempre queres traerme igual- hablé
-Porque me quiero asegurar de que llegues bien, nada más- dijo conectando su mirada con la mía.
-No hace falta.
-No me molesta para nada, posta- aseguró y asentí rendida.
Me acerqué para darle un beso en el cachete pero él fue más rápido dejando uno en la comisura de mis labios.
Lo miré todavía quedando a centímetros de su boca y sentia su respiración golpeándome. De repente una ola de calor me invadió el cuerpo. Se atrevió a acercarse un poco más al punto que nuestros labios se rozaban y cerré los ojos disfrutando de su tacto.
-Ya llegamos a casa?- habló Julián todavía dormido. Enzo y yo nos separamos al toque dando un saltito alargando la distancia.
Dios mío.
ESTÁS LEYENDO
A Kilómetros- Enzo Fernández
Romance"A veces hay que irse bien lejos para poder saber cual es el camino correcto." Comenzada 19/01. Capítulos todos los días Finalizada.
