Capítulo 13 : La carrera

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Hoy me levanté llena de energía e ilusión, ya que como ayer ya habíamos acabado con la recolecta, hoy tocaba la decoración con pintura. Todos los años era mi parte favorita del Habunga, ya que era cuando mejor me lo pasaba.
Me preparé, y me dirigí a las habitaciones de mis hermanos, para poder despertarlos e ir cuanto antes a recoger a los Sully.

                                                                         En la habitación de Aonung

Hacía tiempo que no entraba aquí. Todo estaba iluminado, por lo que me extrañó que Aonung no se hubiera levantado aún.
Pensé en gastarle una broma, pero recordé cómo me fue la última vez que lo hice, así que decidí no intentarlo.

Ley'ha : - Aonuuuung, despiertaaaaa...- le dije, pero él no se movió ni lo más mínimo.- Venga Aonung, que vamos a llegar tardeee.- le dije mientras lo sacudía.

Aonung: - Ummg.- se quejó él. Como nada de lo que hacía daba resultado, tuve que ser un poquitito más extrema.

Ley'ha: - ¡AONUUUUUUUUUNG, AYUDA ME DESANGRO!_ dije. Seguro que esta vez sí que lo despertaba.

Aonung: - ¡Q-QUE, D-DONDE!- dijo él exaltado y levantándose de un golpe. Sabía que de esta forma sí que conseguiría despertarle.

Ley'ha: - Ahh, ehhm.... Buenos días Aonung. ¿Ya te has despertado?- dije disimulando.

Aonung: - ¡¿PERO TU NO TE ESTABAS MURIENDO?!- dijo él mirándome con los ojos muy abiertos, buscando algún índice de sangre o herida.

Ley'ha: - ¿Pero que dices?, si yo estoy genial. De verdad Aonung algunas veces dices unas cosas....- dije notando como él se había  me quedado mirando extrañado.- Bueno, lo que sea. Levántate ya que vamos a llegar tarde.- le dije, para seguido de eso irme lo más rápido que pude antes de que se diera cuenta de que le había gastado una broma.

Ahora mi siguiente víctima sería Tsireya. Claro que si ella se despertaba a la primera, no tendría por que gastarle ninguna broma.

                                                                                   En la habitación de Tsireya.

Como en la habitación de Aonung, aquí todo estaba muy luminoso. Pero lo que diferenciaba a una habitación de otra, era que sin duda esta estaba mucho mas limpia que la de Aonung. Y por no hablar de la inmensa cantidad de conchas que tenía por todas partes, que ha diferencia de Aonung, esta estaba llenísima.

Ley'ha: - Reyaa... buenos días hermanita..._ dije pero nadie contestó. Aún así decidí darle una segunda oportunidad.
- Venga Tsireya.... Despierta que sino, vamos a llegar tarde.- dije obteniendo el mismo resultado.
- Pues que pena, ya que no despiertas, tendré que decirle a Lo'ak que  se vaya sin nosotros. Ya que el pobre ha venido para recogernos.- dijo mientras sonreía maliciosamente. Estaba completamente segura de que esta vez sí que despertaría.
Y así fue, ya que esta se levantó al instante y giró su cabeza a todos lados buscando " A su queridísimo amigo" Lo'ak.

Tsireya: - Q-QUE, ¿DÓNDE ESTÁ?- dijo ella emocionada, y aún con los ojos casi cerrados.

Ley'ha: - ¿Dónde está quien Reya?- dije yo disimulando, mientras me aguantaba la risa.

Tsireya: - LO'AK...¿DÓNDE ESTÁ ÉL?- dijo mientras seguía buscando.

Ley'ha: - No se de que me estás hablando, anda lávate la cara y prepárate para irnos.- dije yo mientras me iba de la habitación.

                                                                                 Unos minutos más tarde...

En otra Vida// Neteyam.  (REESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora