30. Persecusión

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—Para haberte quejado tanto, lo hiciste bastante bien.

Yoongi jadea, con el cabello sudado dejando caer gotas gruesas. Los demás en el salón lo aplauden. Se unió hace tan poco, pero es capaz de seguir las horribles rutinas y simulacros de Hoseok. Eso es un logro que tienen ellos solo por tener más de un año entrenando con Hoseok. Se nota que Yoongi en su memoria corporal tiene haber hecho mucho ejercicio y por ello aún conserva mucho aguante.

Uno que va creciendo por día.

Debido al mudo pedido -más bien exigencia-, no se menciona nada sobre la cicatriz de Yoongi. No en ese espacio al menos. Es una especie de entendimiento con Hoseok. Para hacer todo lo más natural posible, no van a mencionar esa cicatriz. Ni siquiera bajo la sensación de que puede ser una obligación.

Yoongi tose y se queda sentado en el suelo. El cuerpo le está hormigueando y se quiere bañar. Toma el papel que una chica le da, la clase de salida por haber terminado. Al abrirlo estira los labios y cierra los ojos. Hoseok se asoma a ver y no evita reírse.

Yoongi marry me.

— ¡Que ternura! ¡AUN NO SE CANSAN! —exclama Hoseok aplaudiendo eufórico y cayéndose de la risa. A lo lejos creen escuchar a un perro ladrando, pero es tan lejos que apenas es posible distinguirlo.

Dirían que las que saben que son fans de Yoongi, no han dicho nada al respecto. Por el contrario, se han dedicado a darle regalos ahora que está siendo más presente con el grupo en general y no solo con los miembros de Bangtan. Hoseok lo considera genial. Es una evidencia de que aparte de ellos, más personas van a pasar por alto la cicatriz como lo que es: una marca que no puede quitarse, pero que ni siquiera lo desfigura o crea alguna repelencia.

Tan solo curiosidad a como sucedió, siguiendo la admiración por sobrevivir a algo como eso. Claro que no conocen las demás cicatrices que Yoongi posee, pero ¿En que cambiaria lo impresionante que es? Que se sepa, nadie ha sobrevivido a ese nivel de ataque. Todo junto y al mismo tiempo. Si bien ha habido una que otra mordida a otros inmunes, no han sido así de salvajes y críticas.

En ese aspecto, Yoongi es la persona más fuerte del grupo, acabando en ser también la más frágil tras tanto aguantar.

El sonido de disparo los hace ver hacia la ventana, una ligera nota de fastidio y resignación, pensando un vago: bueno, ahí va otro a la lista. Sin embargo, el sonido casi histérico por la radio los hace levantarse a prisa.

¡NONO! ¡DETÉNGANLO! ¡PASÓ!

Hoseok se pone arriba de golpe, sujetando a Yoongi del brazo para hacerlo levantar. Están lejos de la entrada, pero si entró, es porque esa persona está corriendo. Cierra la puerta atrás y hace un escándalo, indicando a todos quienes sepan pelear que vayan a ayudar y quienes no, que suban a la azotea o tercer piso para no estorbar. Siendo una sola persona, con más de cincuenta encargándose es imposible que suceda alguna desgracia.

Y si sucede, Hoseok solo pide que no sea a ninguno de ellos.

~ * * * ~

—Bueno, tenemos a suficientes personas metidas en la cocina, también cuidando a los animales y en equipos de búsqueda, para mi propia sorpresa ¿Qué hacemos con estos niños que ahora quieren ayudar? —refunfuña Jin, algo inquieto. Varios niños que ya tienen más edad, quieren ayudar de alguna manera.

Y es un poco agobiante tener que ponerlos a ello, pero tampoco tienen forma de entretenerlos o hacer que no estén en una habitación sin hacer nada. Ellos son quienes piden alguna labor. Yeosang exhala, dejándose caer un poco con la silla.

— ¿y Si ayudan con los demás niños? Un servicio comunitario o algo así.

—Es eso o limpieza—concluye Jin y se frota la frente con ligereza—. Tal vez ayudar con los animales de granja. Recoger los huevos de las gallinas, pintar áreas comunes y esas cosas. Son divertidas y no pesadas al menos.

Sempiternal: D.E.A(live).D || BOOK 4#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora