Dancing With Your Ghost

10

Francia 2019

—Tienes que volver.

Estaba en un café con Arthur y Carla.

—Yo voy a estar ahí -seguía tratando de convencerme- y Carla también.

—Thena no puedes seguir así.

Di un largo sorbo a mi bebida.

—Como amo los mochas extra cargados y extra fríos.

—Lo mismo, pero con el macchiato.

—Carla -dijo Arthur exasperado- no ayudas.

—Sí no puedes con el enemigo únetele -contesto y le dio un pequeño beso.

Este suspiro exageradamente y continuo todo el rato así, Carla y yo estábamos acostumbradas a sus dramas así que nosotras continuamos con nuestra charla.

—¿Athena?

Un chico que se me hacía conocido camino hacía nuestra mesa.

—Soy cesar de la fiesta de hace tiempo.

Me sorprende lo pequeño que es el mundo. Creí que nunca lo volvería a ver.

—Oh... pues hola -Diego he simple y mi amiga me pateo debajo de la mesa- ¡Auch! ¿Que fue eso?

—Siéntate con nosotros.

Arthur la miro a forma de reproche y está solo tuvo que verlo a los ojos para que se calme.

—Charles nos espera en la pista -se levanta- ...te espera a ti.

Dijo finalmente poniendo un pase de padoock club en mi bolso y se despidió junto con Carla que me hizo unas de señas aprobación a sus espaldas.

—¿Charles? Me tienes que poner al día guerrera.

—Es hermano de Arthur -le explique- el chico que se acaba de ir y ella es mi mejor amiga, ambos lo son.

—Creí que ellos eran pareja.

—Sí lo son.

—Y como haces para llevarlo con tanta calma.

Me encojo de hombros y me levanto haciendo que el castaño me siga.

—Vamos Ares -digo y este se levanta.

—No lo había visto -se agacha y saluda a mi perro.

Caminamos por un rato con Ares guiándonos a quien sabe donde.

Hablamos de todo, como tratando de conocernos. Ya se hacía tarde, tendría excusa para no ir al circuito.

El italiano recibe una llamada y se separa un poco de mi.

—¿Que tienen Ares?

El perro estaba un poco inquieto, escuché el ruido de un monoplaza y la piel se me erizó.

La adrenalina que solía sentir volvió.

—Tu también lo sientes -dije finalmente.