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Su día pasó entre besos, caricias y sonrojos por parte del omega, Chan cuidó de Jeongin todo el día, ya que este aún estaba adolorido

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Su día pasó entre besos, caricias y sonrojos por parte del omega, Chan cuidó de Jeongin todo el día, ya que este aún estaba adolorido.

Al día siguiente se levantaron temprano (empezaron a dormir juntos), ya que era lunes y debían ir a trabajar, se ducharon y arreglaron, tomaron un pequeño desayuno hecho por ellos y salieron directo a la empresa.

Jeongin se encontraba al lado de Chan en la oficina del último mencionado, estaban observando unos documentos, Jeongin tenía sus lentes ya que su vista se cansaba al estar leyendo o viendo demasiado la pantalla de su ordenador.

Jeongin tenía su ceño levemente fruncido, Chan observaba su perfil mientras el omega estaba totalmente concentrado. Chan llevó su mano hasta la mejilla de su esposo y acarició levemente, esto hizo que Jeongin levantará su vista, lo observó con ternura pero con confusión al mismo tiempo.

—¿Por qué eres tan hermoso? —habló Chan sin dejar las caricias en su mejilla.

Las mejillas de Jeongin tomaron un fuerte color rojo, bajó la mirada a sus manos y comenzó a jugar con sus dedos.

—¿Por qué de la nada dices esas cosas? —habló aún observando sus manos.

—Porque es verdad.

Chan levantó su mentón, el omega lo observó directamente a sus ojos y el alfa lo atrajo hasta que sus labios se tocaron, Chan tomó la cabeza de Jeongin haciendo que el beso fuera más intenso, sus labios se movían y encajaban perfectamente, Chan pidió permiso para entrar su lengua a la cavidad bucal ajena, el omega por supuesto lo dejó entrar y enredo sus brazos alrededor del cuello del alfa.

Chan tomó la cintura de Jeongin y lo levantó, pasó sus manos sobre el trasero del Omega y apretó fuertemente, puso al omega encima del escritorio sin soltar en ningún momento sus apetitosos labios.

Se separaron con la respiración agitada, sus pechos subiendo y bajando, sus miradas chocaron intensamente, se miraban fijamente sin hacer algún movimiento, Jeongin llevó su boca hasta el cuello del Alfa comenzando a dejar marcas rojizas que pronto serían moradas, desabrochó los primeros botones de la camiseta que traía el Alfa hasta que logro ver su firme pecho, el Alfa al parecer hacía mucho ejercicio y eso lo demostraba su abdomen y sus músculos que resaltaban en sus brazos.

—Mhg~ Jeongin, creo que deberíamos parar —habló Chan, sin embargo, este tomaba con fuerza la cabeza de su omega quien cada vez bajaba más hasta llegar a su cierre del pantalón y quedar de rodillas frente a él.

Y justo cuando Jeongin iba a bajar el cierre.

—Señores Bang la reunión está por... —habló Jennie entrando y encontrándose con tal escena, Jeongin de rodillas y Chan con su ropa totalmente desarreglada, además de las marcas en su cuello y pecho.

—Oh, lo-lo siento —habló la omega tapando sus ojos y cerrando nuevamente la puerta.

Jeongin gruñó molesto y se levantó del suelo, Chan soltó una pequeña risita.

Heredero ☘ ChanInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora