Heredero ☘ ChanIn

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—Ho-hola, Jisung, ¿qué sucede? —habló Jeongin con su voz entrecortada, mientras Chan succionaba y pellizcaba aún más sus pezones.

—¡Jeongin! ¿Mañana tienes tiempo? Queremos ir con Félix y Seungmin de compras, por cierto, ya volvió.

Chan recostó el cuerpo de Jeongin sobre la mesa, tomó sus pantalones bajándolos, abrió sus piernas y bajó solo la parte de enfrente del bóxer dejando ver su necesitada erección.

—No-no lo sé, Jisung, ma-mañana debo trabajar —cerró sus ojos apretándolos fuertemente.

Chan tomó el miembro de Jeongin en su boca, succionó fuertemente la punta mientras jugaba con sus testículos y lo observaba fijamente.

—Jisung, te puedo- Ah~ —Jeongin cubrió su boca y observó como Chan había tomado todo su miembro en su boca, pudo sentir como tocaba la garganta del alfa con su miembro.

—¿Jeongin? ¿Estás bien? Si no puedes está bien, pero que conste que quería ayudarte para que tú esposo no se resistiera y te...

—Ah~ Chan, sigue así~ —Jeongin no lo soporto más, Chan había pasado de su miembro a su ya húmeda entrada.

—Cre-creo que es mal momento, adiós —se escuchó como la línea se cortaba.

Jeongin tiró su teléfono a algún lugar de la mesa y levantó sus piernas para darle más acceso a Chan, tomó la cabeza del alfa y lo forzó a subir hasta que sus labios volvieron a juntarse.

Chan habló sobre sus labios.

—¿Qué dirá tu amigo de ti? —soltó una pequeña risita, mientras jugaba con el cabello azabache del omega.

—¿Eso interesa? Además, lo he escuchado gemir peor con Minho, ya me tocaba hacerlo sentir celos —habló Jeongin con una sonrisa pícara, mientras acariciaba la nuca de Chan.

—Eres tan descarado, y eso me encanta —Chan juntó sus labios nuevamente, sus bocas se acariciaban desesperadamente como si nunca lo hubieran hecho. Chan introdujo su lengua a la cavidad bucal ajena, sus lenguas se encontraron y comenzaron una guerra entre sí, Jeongin ganó esta vez, mordió el labio de Chan el cual soltó un pequeño jadeo y se separó de los labios de su esposo.

Jeongin pasó su lengua sobre la poca sangre que salía del labio de Chan, se observaron fijamente, sus lobos estaban saltando de felicidad, se sonrieron mutuamente.

—¿Qué quieres, mi lindo omega? —habló Chan tocando las hermosas piernas de Jeongin.

—Quiero que follemos, aquí y ahora —habló firme mientras deshacía el nudo de la corbata de Chan y mordía su labio inferior.

—¿Quién soy yo para decirte que no? —el alfa tomó nuevamente al omega y lo atrajo hasta que sus labios chocaron.

Jeongin empujó el cuerpo contrarió, separando así sus labios, el cuerpo del alfa chocó contra la mesa, el omega cayó de rodillas frente a él. Jeongin mordía su labio inferior, mientras desabrochaba el cinturón de Chan.

—No sabes lo mucho que quiero tu pene en mi boca, quiero sentir absolutamente todo tu semen en mi boca —habló bajando el cierre.

Chan levantó una ceja, le gustaba cuando Jeongin no media sus palabras y más aún cuando era dominante.

—Todo tuyo —habló con una sonrisa pícara.

El omega relamió sus labios, bajó el bóxer encontrándose con la grande erección del alfa. Y justo cuando la iba a tomar en su boca otra llamada los interrumpió.

Jeongin frunció el ceño levemente esperando para saber quién los interrumpía por tercera vez en ese día.

—Hola, mamá, ¿cuándo? —Jeongin lo observaba expectante—. Sí, está bien ya vamos saliendo de todas formas, nos vemos —Chan colgó y acomodó sus pantalones correctamente.

—Se les está haciendo costumbre interrumpir —habló molesto Jeongin, levantándose y acomodando su ropa.

Chan soltó una pequeña risita, luego lo recompensaría.

—Tienes razón, pero mi madre y padre quieren quedarse en nuestra casa hoy, según mamá porque "papá está aburrido en casa". Pero bien sabemos que es para saber qué hacemos o no —habló tomando de la cintura al omega, mientras lo observaba fijamente, estaba molesto pero se veía tan tierno.

—Sí, eso me molesta. Pero, ¿por qué no les demostramos que hacemos mucho más de lo que imaginan? —una sonrisa pícara de asomó en la cara del omega.

—Me parece bien —Chan sonrió haciendo sus ojos unas pequeñas líneas.

Jeongin llevó sus manos a los hermosos ojos del alfa, acarició alrededor de la zona y dejó un pequeño beso en cada línea.

Chan abrió sus ojos lentamente y sonrió aún más para después besar la cabeza del omega.

—Vamos, mis padres son puntuales —lo tomó de la mano y salieron de la oficina.