"Los opuestos se atraen"
-Primer libro-
INFIDELIDAD: Una palabra que muchos ya escucharon, un echo que ya algunos vivieron y que les rompió el corazón, aquellos que no conocen ese sentimiento, desean jamás sentirlo, porque deja una cicatriz que casi...
Caí a la cama cansado tras la tercera ronda, Kendall cayó en mi pecho igual de cansada y sudada, miré la hora en mi celular el cual tenía varios mensajes de Gunther, eran las 12:00 pm, me acomodé en la cama sin mover mucho a la hermanosa rubia que tenía en mi pecho, con mis brazos abracé a Kendall por los hombros y cuello mientras mi celular quedaba enfrente de nosotros, revise los mensajes de Gunther los cuáles eran preguntándome mi paradero y pidiéndome que lo llamara
— ¿Que tal habrá seguido la fiesta? — Escuché la voz de Kendall
— Buena por lo que veo — Abrí el vídeo que mi mejor amigo me había mandado
En él se veía a todos bailar, las luces de la casa apagadas y solo una luz de discoteca girando en el techo, todos cantando y riendo entre si, se veía que el ánimo no había cambiado ni siquiera con lo que había pasado
— ¿Realmente te gustan ese tipo de fiestas no?
— Si — Acaricié su cabello mientras con mi otra mano me metía a la aplicación de Instagram
— Ojalá está noche hubiera acabado diferente
— ¿De que hablas? — Ella levantó la mirada algo apenada
— Si Scarlett no hubiera llegado, tu seguirías en la fiesta riendo y pasándola bien
— Prefiero mil veces quedarme haciendo el amor contigo que escuchando música fuerte y tomando cerveza, pasaría todos mis fines de semana contigo si pudiera — Ella me sonrió como un ángel
— Oye, ¿Que harás cuando el año termine? ¿Irás a alguna universidad? — Se acomodo espaldas arriba, dejando los brazos en mi pecho y apoyando su barbilla en ellos
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— No, las universidades no son lo mío, quizás me enfoque en las acrobacias
— Mi mamá de seguro ya debe estar buscando la universidad perfecta para mí, pero tengo miedo de cual eliga
— ¿Por qué?
— Las mejores universidades están en otras ciudades, dudo que acepte que estudié en una universidad de Mellowbrook
— Osea que quizás tengas que irte de la ciudad — La miré con preocupación
La idea de que se fuera, que la vería poco o que la únicas veces que pueda escuchar su voz sea por llamada a la distancia me aterraba.
— Lo más seguro es que si — Se acercó a mí y me beso — Pero no pensemos en eso ahora, solo quiero estar contigo
Se acomodó en mi pecho de nuevo y yo dejé el celular de lado para poder abrazarla, acaricié su espalda lentamente sintiendo como poco a poco se quedaba dormida en mis brazos, sonreí al sentirla tan relajada con mi presencia, eso indicaba que confiaba en mí, que se sentía segura a mi lado y quería que así fuera, que jamás temiera a que algo le pasara