Narrador/a:
Los días pasaban y ninguno de los dos amantes deseaba hablarse, ambos aplicaron la ley del hielo lo cual desesperaba al otro pero su orgullo les impedía terminar con esa pelea que se había extendido a ya días, pero para Kick no era tan difícil, la estadía de su abuelo lo distraía y de echo le sirvió, estaba más comunicativo con su familia y servicial lo que llamaba la atención de su madre que como toda mamá lo conocía muy bien como para saber que algo sucedía, aunque no se quejaba de que le ayudará a lavar los platos como ahora.
— Así que ¿Sucedió algo?
— ¿Por qué preguntás? — La miré con extrañeza
— Una madre conocé a sus hijos a la perfección tanto que cuando un hijo que la mayor parte del tiempo es rebelde y esta metido en su mundo de acrobacias comienza a ser más comunicativo, ayuda a su madre a lavar los platos y bromea con sus hermanos, la madre comienza a darse cuenta de que algo le sucede, escupe ¿Que te pasa?
— Nada, simplemente me alegra que mi abuelo esté aquí.
— No, se que algo más te sucede, soy tu madre, puedes confiar en mi.
Kick la miró, pensando en si realmente decirle lo que le sucedió, seguramente lo regañara y lo castigará de por vida pero también lo aconsejaría, pero el consejo que le daría sería alejarse de Kendall y el acróbata sabía que eso no lo soportaría..
— No es nada mamá, descuida.
— Está bien, no te presionaré más pero recuerda que soy tu madre y que te apoyaré en todo lo que me pidas.
— Lo sé.
Y sin más se secó las manos y se fue dejando a su madre en la cocina, ella lo miró irse con preocupación, no quería que fuera lo que fuera que le sucedía afectará su rendimiento escolar y más en su último año, su rostro cambió a confusión cuando sintió agua en su mano y al girar la cabeza se sorprendió al ver el agua rebalsar
— ¡Ay no! — Rápidamente detuvo el agua.
Mientras que en la sala de estar la familiar hablaba o al menos todos menos Brad quien estaba recostado en el sofá más grande usando su celular mientras hablaba con sus amigos.
— Y así fue como conquiste el Monte Everest
— Bueno, ya sabemos de quién heredó mi hermano el gusto por las acrobacias.
— Ese muchacho me llena de orgullo.
— ¿De que hablaban? — Llegó a la sala de estar con cara curiosa
— De cómo el abuelo conquistó el Everest aunque a mí parecer parece una historia difícil de creer
— Yo le creo
— Tu eres idiota.
Justo cuando Kick iba a reclamar, alguien tocó la puerta llamando la atención de todos, Brianna se levantó del sofá pequeño que estaba colocado enfrente de la ventana y avanzó hasta abrir la puerta, sonriendo con interés al ver a Kendall con su diario y un estuche con sus lápices.
— Kendall, buen día — Ambas rubias se sonrieron con amabilidad
— Hola, buen día, ¿Clarence está en casa?
— Si claro, adelante
La rubia mayor entro y avanzó hacía la sala de estar donde nadie imaginaba su presencia mucho menos el chico con el que se besaba a escondidas de todos, este al verla se sorprendió y la miró con algo de rabia pero también felicidad, estar lejos de ella era una tortura aunque no lo aceptara.
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Amantes (Kick x Kendall)
Fanfic"Los opuestos se atraen" -Primer libro- INFIDELIDAD: Una palabra que muchos ya escucharon, un echo que ya algunos vivieron y que les rompió el corazón, aquellos que no conocen ese sentimiento, desean jamás sentirlo, porque deja una cicatriz que casi...