¡Big brother!

Fiesta

Los Barbablancas esperaban ver al capitán de los Mugiwaras con esa expresión de asco que tenía en Marineford.

Esperaban verlo mirándolos con fiereza y una sonrisa psicótica en su rostro, con su fuerte haki golpeándolos a todos.

Esperaban sus ojos sarcásticos o una mueca de desagrado dirigidos a ellos, pero no….esto.

No esperaban esto.

El hombre era todo lo contrario a lo que habían visto en Marineford.

Cuando llego, parecía menos imponente, su haki era fuerte, pero no porque él estuviera oprimiéndolos, solo que estaba allí, alto y libre, al igual que el de su padre.

Parecía más bajo de lo que era, menos feroz, y sus ojos carecían de asco o repugnancia.

Sus ojos eran brillantes y llenos de alegría, una fuerte sonrisa adornando sus rasgos y la emoción parecía consumirlo al ver su barco.

—¡Nami, es una ballena!—Exclamo con emoción, moviendo a la navegante con entusiasmo.

La navegante gimió exasperada, dándole una reprimenda de como se estabas comportando.

Luffy pareció darse cuenta donde estaba, y su postura cambió, dejándolo recto y una mirada calculadora en sus ojos.

El nerviosismo los abarco, no querían pelear con este hombre y su psicopatía.

Hasta que sus ojos se posaron en su padre y se pusieron alertas.

Los ojos de Mugiwara se expandieron, y llego al lado de Barbablanca, mirándolo con asombro en su expresión. Hasta que esta cambio a una pensante, y se cruzo de brazos.

Un ambiente incómodo se formó en el barco, y algunos huyeron de allí para no tener que aguantarlo.

El rostro de Mugiwara repentinamente se volvió serio, y una pequeña sonrisa adorno sus labios, cruzando miradas con Shirohige.

Shirohige entrecerró sus ojos con sospecha, mirando al menor con duda. ¿Este era el hombre que había salvado a Ace?

—¿Cómo llego mi hermanito a tu barco?—La pregunta llegó repentina, y algunos abrieron sus ojos con pánico.

¡Si se enteraba que habían secuestrado a Ace, podría atacarlos!

Marco se aclaro la garganta para hablar, mirando las miradas divertidas de la tripulación contraria.

Antes de que pudiera decir una palabra para romper el aire tenso, Ace llegó, mirándolos con duda, hasta que vio a Luffy.

Una sonrisa se formó en su rostro, caminando hacia él mayor.

—¡Luffy, viniste!—Abarco al mayor, quien sonrió al tenerlo a su lado.

Su mirada cambió radicalmente a una soleada, sonriendo con gracia.

—¡Claro! ¡Hay fiesta!—Celebró, y un puchero se formo en sus labios—¡Esto está tan muerto! ¡Brook, música!—

Barbablanca y Marco parpadearon sorprendidos cuando la música resonó por todo el barco. Vieron como los Mugiwaras se mezclaron con su tripulación, como el espadachín iba al lado de Garp y le pedía del alcohol que bebía.

El cocinero había pedido el favor de usar la cocina, siendo recibido con gusto.

Dirigieron su mirada hacia Ace y Luffy, quien ahora revolvía los cabellos del rubio y de Ace.

Estaba sorprendidos cuando Ace trajo a un rubio de la nada presentándolo como su otro hermano.

Vio como Mugiwara le susurraba algo a los dos, los cuales asintieron dudosos.