Tú a Canadá, yo a Alemania | Manuel Neuer

Capítulo 34

Dedicado para Daniela ♥ ¡Feliz Cumpleaños!

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Intento apagar mi celular pero este, después de la llegada del mensaje, comienza a vibrar avisándome que la batería se está agotando.

La puerta del armario se abre bruscamente. Los abrigos no me cubren y soy fácilmente encontrada. Jeremy al darse cuenta de mi presencia, me jala haciendo que salga del armario y debido a la fuerza y su poca delicadeza caigo al suelo, junto a algunos abrigos.

-¿Qué hacías ahí adentro?-pregunta molesto y entrecerrando los ojos, con una faceta de él, que no había visto hasta ahora. Las apariencias engañan.

-Estaba...-mi mente se queda en blanco debido al nerviosismo-yo...-Jeremy alza una ceja por lo que me rindo y me armo de valor-Escuché todo, Jeremy-me levanto del suelo para no quedar en una posición débil y es que Jeremy no es tan alto-Tú engañas a mi mamá con otra persona.

-No lo hago-niega incrédulamente y cambia su expresión de molestia por una de indignación.

-No mientas. Escuché todo-Jeremy se queda callado por lo que decido irme pero él me toma del brazo para detenerme.

-¿Crees que Brenda va a creerte?-sonríe de lado y cuando lo hace retiro bruscamente su mano para eliminar aquel contacto con mi brazo. Ya lo admitió-Tú y tu maldita clon han intentado separarnos, ¿acaso te creerá después de todo? No tienes prueba de nada, estúpida-Lo miro con odio pero también con confianza porque él no sabe que tengo pruebas. De pronto siento a mi celular vibrar de nuevo e involuntariamente poso mi mano en el bolsillo para que pare de hacerlo pero Jeremy baja la vista hacia mi mano y se da cuenta de lo que tengo-Dame tu celular.

-¿Por qué lo quieres?-pregunto con voz dura.

-¿Me grabaste?-Joder, ¿cómo lo adivinó?

Me quedo sin decir nada y sin previo aviso me impulso para que estemos separados por la mesa. Debo llegar arriba.

Jeremy pone sus manos a cada lado de la mesa y me vigila atentamente para ver qué lado decidiré-No hagas esto más difícil de lo que es, linda-Ahora ya no soy una estúpida ¿no?-Sabes que yo hago feliz a tu mamá.

Mi corazón late muy rápido y es que tengo miedo de lo que Jeremy pueda ser capaz de hacer.

-Una felicidad a base de mentiras.

De pronto Jeremy salta encima de la mesa arruinando así las piezas de ajedrez armadas. Logro zafarme por un pelito y corro hasta las escaleras. Comienzo a subir rápidamente pero Jeremy me agarra de las piernas haciéndome caer.

Mi pecho golpea la escalera de madera y no puedo evitar chillar de dolor. El aire se escapa de mis pulmones debido al impacto.

-¡Ayuda!-grito lo más fuerte que puedo pero debido a la música supongo que nadie me escucha. Mi pecho me duele terriblemente e intento respirar.

-¡Cállate, zorra!-Jeremy me tapa la boca con una mano e intenta alcanzar con la otra el bolsillo de mi pantalón pero no se lo permito.

Abro mi boca y muerdo sus dedos haciendo que así me suelte y retroceda. Aprovecho la oportunidad y con todas mis fuerzas me impulso para levantarme y así correr hasta llegar a la puerta, la abro y salgo finalmente del sótano pero Jeremy me toma haciendo que regrese. Forcejeamos y tengo tanto miedo de que por hacer esta estupidez los dos nos caigamos de las escaleras.

-¡Suéltame!-grito entrecortadamente. El dolor de mi pecho hace que no respire con normalidad y, debido a eso, mi voz suena muy rara.

-¡¿Qué está pasando?!-un chico alto de cabello negro y ojos azules nos mira con sobresalto y confusión.