Capítulo 45

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-¡Ayuda! ¡Por favor!-golpeando la puerta, intento hacer ruido pero aun así escucho como si afuera tiraran agua...y desearía que fuera solo agua.

Corro hacia donde está Zoe e intento despertarla pero es imposible.

De pronto lo recuerdo. Rápidamente saco mi celular del bolsillo y llamo a Lucas.

-Vamos, contesta, contesta-suplico al borde de las lágrimas y de la desesperación.

-¿Weigel?

-Lucas, alguien golpeó a Zoe y nos ha encerrado en el establo. Por favor, ven. Huelo a gasolina. Tengo mucho miedo.

-Iré para allá-habla con voz temblorosa-¡Jenna, llama a la policía!-escucho que grita pero también escucho claramente el sonido de algo prendiéndose.

-Oh, shit-ahora lo veo. La puerta comienza a prenderse en fuego-Hay fuego, Lucas.

-Oh por Dios-es lo último que oigo ya que la llamada se corta.

No pierdo más tiempo. Guardo mi celular en mi bolsillo e intento cargar a Zoe pero es una adolescente de aproximadamente cincuenta kilos y no es fácil.

El fuego crece cada vez más y no puedo evitar toser debido al gran humo negro.

Yo puedo, sé que puedo...

Primero es difícil...demasiado difícil...pero no sé cómo lo hago, tal vez es la adrenalina. Reúno fuerzas y tomo a Zoe por debajo de los hombros para arrastrarla por el suelo. Me detengo por instantes ya que no estoy acostumbrada a jalar tanto peso pero menos mal llego hasta las escaleras y aquí viene la parte complicada...

Intento cargar a Zoe pero sería imposible que pueda cargarla y subir la escalera. ¿Y ahora qué hago? No puedo dejarla aquí.

-¿Ellie?-Parece que el movimiento la ha despertado.

-Gracias a Dios-susurro.

-¿Qué ha pasado?-me mira con los ojos entrecerrados mientras se toca la cabeza.

-Alguien te ha golpeado y ha quemado el establo. Debemos salir de aquí. ¡Rápido!

Ella comienza a toser pero se levanta con debilidad-No puede ser-voltea a ver el gran fuego que bloquea la puerta-Esa es la única salida. ¡Vamos a morir!-comienza a llorar.

-¡Zoe! No vamos a morir-ella voltea sus ojos llorosos hacia mí-Ahora sube, debemos estar en un lugar alto.

El humo está llegando a mis pulmones. Intento con mi chompa taparme la nariz y Zoe hace lo mismo.

-Sube primero-le indico. Zoe, aun llorando, comienza a subir por la escalera vertical pero lo hace muy lento, creo que el golpe la ha debilitado demasiado-Más rápido, Zoe-estoy justo debajo de ella y es que es solo una adolescente, no puedo dejarla detrás de mí. Debo protegerla.

El calor comienza a llegar hacia mí. Tengo tanto miedo de que por demorarnos, el fuego llegue hasta nosotras y debo decir, que morir quemada...es la peor muerte del mundo.

-Eso intento-de pronto ella se suelta y cae encima de mí. La fuerza de la caída hace que yo también me suelte por lo que aterrizamos en el suelo.

Gruño por el dolor del impacto y del peso de Zoe, quien se retira lentamente.

-Lo siento-dice Zoe mirándome preocupada.

Me levanto con mucho dolor en el cuerpo-Está bien. Solo sigamos. Rápido, Zoe.

Zoe comienza a subir la escalera y en este momento las dos escuchamos unos gritos-¡Ellie! ¡Ellie!

Tú a Canadá, yo a Alemania | Manuel NeuerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora