—¡¿Heeseung?!.
El solo me miró serio para luego solo saludarme con una mano.
—Pasa—hice un gesto indicándole que pasará— No quiero sonar grosera pero, ¿que haces aquí?.
El paso y yo cerré la puerta detrás de mi, al darse cuenta que yo no avanzaba el se volteó y levanto una bolsa que tenía en su otra mano.
—Traje tu teléfono—dijo el cómo si fuera cualquier cosa.
—Oh—tarde un rato en reaccionar—muchas gracias, no te fueras molestado.
El se me quedó mirando con el brazo extendido esperando que agarrara la bolsa, al ver que no lo hacía se aclaró la garganta algo incómodo.
—Ah si, perdón—dije avanzando para agarrar la bolsa.
Pero cuando lo hice el puso la bolsa detrás de el vacilandome.
¿Qué crees que haces Lee Heeseung?.
—En realidad no vine solo por eso—dijo mientras soltaba una sonrisa algo incómoda.
—¿Paso algo?—dije dudosa mientras avanzaba a mi sala invitándolos a sentarse.
El paso y se sento en uno de los muebles poniendo la bolsa a un lado. Yo me senté en el sillón que estaba frente a el.
—Agradezco todo lo que haces por Meli, eres una gran amiga para ella pero hay algo que he notado últimamente.
—Gracias supongo, ¿A qué te refieres?.
Después de que yo soltarás esas palabras la sala se quedó en total silencio.
Claro sin contar mi corazón latiendo a mil por hora, la idea de que Heeseung estuviera en mi casa era surrealista.
—Mira, se que no te caigo tan bien pero—hizo un pausa para luego levantarse de su asiento y quedar más cerca de mi.
Mierda.
Super mierda.
—Tu no—tartamudee, ni siquiera puedo terminar la maldita frase.
El se me quedó viendo esperando que la terminará pero viendo que no lo haría siguio.
—Quiero llevarme bien contigo, sabes, pasaremos más tiempo en el mismo lugar porque ahora mi hermana va estar más tiempo contigo y pues ya conoces a nuestros papás.
Después de eso levantó su mano para yo estrecharla en manera de una especie de tregua.
Yo me levanté a pesar de los nervios y la estreché y DIOS. Fueron solo unos segundos pero ese contacto fue tan malditamente potente eléctrico.
No pude pensar en nada en ese momento estaba demasiado nerviosa como para lanzarmele.
El se digirio a la puerta pero antes de que la abriera agarre un poco valor y lo detuve.
—¡No me caes mal!.
Eso hizo que Heeseung se volteara con una expresión de total confusión. Al parecer tengo más valor cuando el no me está mirando porque es cuánto me dió su atención caí, caí como un plátano
No literalmente, eso sería mi suicidio social.
Prosegui a duras penas.
—Es que yo—dije mientras evitaba su mirada y jugaba con mi mano de los nervios —no quiero ser grosera, solo me pongo un poco nerviosa, si? pero no me caes mal —dije por fin mirándolo a los ojos.
Al escuchar eso el de quedó inmóvil por unos segundos y luego me regaló una sonrisa aniquiladora.
Vaya, al parecer si sabes sonreír.
Bien, ya me morí.
Debió al hechizo que dejó en mi luego de dejarme ver su sonrisa salió por mi puerta. Posiblemente me quedé frente a la puerta por unos minutos, tal vez una hora pero entiéndanme, si lo del cine me asesino esto me mandó al cielo de ida y vuelta.
°°°·.°·..·°¯°·._.· ·._.·°¯°·.·° .·°°°
Ese día no puede dormir, no pegue el ojo en toda la noche, ¿cómo podría?.
—¡Mierda!
Dije mientras apretaba una almohada contra mi cara con toda la intención de ahogarme en ella.
—¿Eso es todo lo que pudiste decir?— me dije a mi misma recordando mis palabras anteriores.
Para que mentir, por más que dijera odiarlo, por más odioso que fuera, aún así todas las noches imaginaba escenarios donde hablaba con el, al menos en mi imaginación soy más valiente.
—sili mi pingi in pici nirviisi.
Esa sonrisa, dios mio, jamás he visto algo tan hermoso,¡lo juro!. Sus ojos, la forma en la que se hace más chiquitos cuando sonríe es tan ¡AHG!.
Después de recordar justo ese momento mi cara se volvió un tómate, es casi de fantasía el poder que tiene en mi incluso sin estar aquí.
°°°·.°·..·°¯°·._.· ·._.·°¯°·.·° .·°°°
—¡Hey! ____.
—¡_____!.
Sentí como me acudían de los hombros y cuando levanté mi vista ahí estaba Meli con una cara de preocupación.
—Disculpa, me distraje —dije disculpándome por por quinta vez por mi obvia distracción hoy.
—¿Te sientes mal? —dijo —¿es por lo de ayer? perdón, fui una idiota, se suponía que era una salida para nosotras dos y luego salió Heeseung y Jisung, mierda, perdón, perdón, perdón
Heeseung, oír su nombre me da escalofríos.
—¿Qué? no, no, no, no, Meli, tranquila, ayer la pasé increíble, en ningún momento me hiciste sentir excluida, ¿ok? —dije mientras levantaba mis manos en señal de calma.
Ella se llevó una mano al pecho y suspiro.
—Ya me había asustado— dijo para luego mover una silla a mi lado —por cierto, ¿vas a venir a mi casa hoy?.
Su casa.
¡Su casa!.
¡Casa de Heeseung!.
—¡¿Tu casa?! —grite involuntariamente y todos se me quedaron viendo, luego baje un poco el tono de voz —¿Tu casa?—dije susurrando.
Meli se rió de la situación un poco para luego contestarme.
—Si, si, si, se te olvida que tenemos que hacer la maqueta del aparato digestivo para biología, ¿no te acuerdas?.
—Perdon, estoy un poco más imbécil de lo normal, claro que me acuerdo, ya tengo los materiales —dije mientras me frotaba el entrecejo.
—Bien, entonces después de esta clase nos vamos para mi casa, puedes almorzar ahí, hoy mi hermano cocina —dijo con una sonrisa.
Por una parte amaba poder pasar más tiempo con mi mejor amiga, es raro cuando se nos presentan oportunidades así pero por el otro,¿cómo se supone que estaré en el mismo espacio que Heeseung?.
Debí estar demasiado tiempo metida en mis pensamientos porque antes de lo esperado la campana que dió inicio a mi próxima tortura ya había sonado.
Se que sueno como una loca y ustedes dirán "____ no es para tanto", cuando se trata de Lee Heeseung si es Lara tanto, créanme, no es nada fácil tener a ese hombre adelante.
—¿Lista para irnos ____?.
ESTÁS LEYENDO
ᴇʟ ʜᴇʀᴍᴀɴᴏ ᴅᴇ ᴍɪ ᴍᴇᴊᴏʀ ᴀᴍɪɢᴀ (Heeseung y tu)
ФанфикEl hermano de tu mejor amiga siempre ha logrado hacer sentir en ti cosas que nadie más ha hecho y eso te molesta, te molesta tanto pensar en el. ¿Realmente lo odias?