14화

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Sus brazos están ferozmente atados a las esquinas de una tabla de madera; intenta moverse o romper las cadenas, le es imposibles. Siente el roce áspero contra su cintura, el cual asciende por su pecho como una serpiente húmeda a la espera de su asfixia intermitente. Intenta gritar, pero su garganta quema como si hubiese vertido ácido en ella. La serpiente rodea su cuello y siente algo húmedo contra el costado de su cuello, cerca del núcleo de su aroma, cerca de...

      —Jungkook, Jungkook —el alfa retrocede cuando el pelirrojo despierta de un sobresalto. —¿Estás bien?

      El omega mira alrededor ubicando dónde se encuentra; sudor frío recorre sus sienes y el latido de su corazón anuncia peligro, es irregular. Toma una bocanada de aire y se talla los ojos.

       —¿Llegamos? —desvía la atención; Taehyung lo analiza con desconfianza. Hace minutos le vio removerse incomodo, asustado. Decide no preguntar, duda que vaya a decírselo.

       —Es la siguiente parada.

      Ninguno dice mucho cuando llegan al destino seleccionado; Jungkook todavía parece desconcertado por la siesta, el alfa no se atreve a preguntar. Entonces, así se bajan del tren y toman sus mochilas antes de avanzar fuera de la estación. A los dos pasos, Taehyung es consciente de dónde están cuando las olas rompen la costa y el sonido se expande a dónde están. La queja está de nuevo fresca en sus labios, hasta que el crepúsculo despejado les da la bienvenida; boquea con las palabras en los labios, la calma del lugar le recuerda a días donde no necesitaba pensar en nada que no fuese el verano. Mira a Jungkook de reojo, ya está acercándose a un taxi para que los llevé a... A Taehyung le gustaría saber a dónde. El omega solo le indica que suba.

       —¿Ya puedo preguntar a dónde me llevas? —murmura como si estuviesen huyendo de la policía, temeroso de que el conductor escuche sus planes.

       —¿Siempre eres tan impaciente?

       —Solo cuando soy secuestrado.

       —Tú accediste a venir —le señala, recriminatorio.

        —Cómo si de negarme no hubieses buscado la manera de manipularme para que accediera —Jungkook siempre se salía con la suya, es algo que tiene bien presente.

       Entonces, el omega le regala una sonrisa que lleva pequeños pliegues a la comisura de sus ojos. —Chico listo, me conoces bien.

       Taehyung solo rueda los ojos, irritado por la inocencia que plantea tener en una situación como esta. —¿Al menos me dirás sobre qué es tu investigación?

       —Sobre Yoongi —últimamente tiene la sensación de que oculta algo. —Para serte sincero, me ha sorprendido su discusión y más aún cómo me la ha contado.

       —¿Te lo ha contado?

       —Hablamos después de la fiesta, sí —y hay tenue terror en los ojos del alfa que le buscan esperando...— No, no le conté nada. Paranoico —bufa para tranquilizarlo. —El caso es que... Me contó. En confianza, me parecen sumamente dramáticos; qué estrés —rueda los ojos. —En fin —retoma tras un suspiro. —Yoongi mencionó algo sobre que... Jimin está tomándose más libertades de las que debería.

       —Claro, son novios —musita.

       —Sí, pero Yoongi no acostumbra tener relaciones formales —al menos eso creía. —El asunto es que... Algo aquí no me cuadra.

       —¿Y vinimos a la playa para...?

       —Haces muchas preguntas.

       —Creo estar en mi derecho —¿le mintió a sus padres por esto? —Si no me lo dices, creeré que me trajiste aquí solo para pasar tiempo a solas conmigo—finge usar una de las cartas que Jungkook le mostró en sus primeras reuniones.

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