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Ahora Stormy se encontraba en la casa de la abuela de Soos, todos estaban ahí y lo peor es que no durmieron lo suficiente ya que Dipper se había levantado con un grito pensando que era todo una pesadilla pero la pelirroja le dijo que no, que todo esto era real.
Por suerte seguía siendo de noche.
Vieron las noticias donde allí estaba Gideon siendo entrevistado. Invitó a toda la población de Gravity Falls a estar en la inauguración y dijo que había entradas gratis si tenían la insignia con el rostro de el.
—Es increíble que Gideon nos venciera. Por lo general evito los desastres, todo es mi culpa.— suspiró Dipper al lado de Stormy.
—Descuida, Dipper. Creo que yo voy a tener que ser la heroína de la familia ahora.— lo tranquillizó Mabel.— Venceré a Gideon con... ¡Mi garfio volador!— lo mostró.
—Mabel, no te ofendas pero... ese garfio nunca nos ayudó en nada.— dijo Dipper.
—¡Jalea a mi!— disparó hacia la jalea e hizo que se rompiera manchando toda la pared.
—Voy a aspirar la pared, creo.— avisó la abuela de Soos usando la aspiradora en la pared.
—Perdieron la cabaña, si, pero miren el lado bueno. ¡Ahora podrán vivir conmigo, Soos! ¿Quieren jugar a las carrras? No tiienen batería pero finjamos que si.— empezó a empujar los pequeños autos.
—...Mañana a penas despertemos recuperaremos la cabaña.— sentenció Stan apagando la luz para después acostarse.
Dipper repitió la acción y se puso nervioso al ver a Stormy acostada al lado suyo. Y muy cerca.
—¿Estás bien? Sobre... ya sabes.— murmuró.
—Si, tranquilo, Dipper. Solo tengo que descansar bien para que... eso...— Dipper asintió con la cabeza al saber a qué se refería.— se regenere bien. Lo puedo hacer pero no con tanta fuerza.
—Entiendo.— sonrió y miró sus ojos los cuales eran algo verdes, suspiró y Stormy contempló su rostro.
Sus ojos, su nariz, su boca... Se sonrojó ante eso y Dipper también ya que captó esa mirada.
—Yo... ¡debo dormir!— Stormy se dió vuelta y por primera vez se puso nerviosa con un chico. Bueno, con Aaron cuando empezaban a salir, pero con Dipper fue distinto.
Dipper rió nervioso y cerró sus ojos esperando dormir.
[...]
Al día siguiente se encontraban en la inauguración camuflados así Gideon no los reconoce.
—Entramos.— murmuró Dipper.
—¡Damas y caballeros!— miraron a Gideon en el escenario.— Hoy tengo el gran placer de anunciarles mi nuevo plan para la ex cabaña del misterio. Les presento...— sacó la tela mostrando una maqueta.— ¡Gideonlandia!
