Capítulo 25

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Bruno sigue ausente, ignoro qué pasó con su familia, su vida y lo demás, quiero hablar con él, decirle que estoy en una relación desde hace unos días, desde hace cuatro días, ahora llevo la cuenta, que cosas. Muchas cosas están cerca, el cumpleaños de Milán, la decisión de Teo, porque en siete días se cumple dos meses, el primo de Milán está convencido de que puede convencer a su familia, pero solo dice eso o es lo que me cuenta Vlad, aunque no lo veo convencido, siento que se acerca el final para ambos, pero no quiero intervenir, porque es su final y no el mío.

- ¡Entonces diles lo que está pasando Teo!; exige mi hermano.

- ¡Se trata de mi familia, si se los digo de golpe, no va a funcionar!; espeta Teo.

- De golpe, en serio, de golpe, ¡estamos saliendo semanas, carajo, estamos saliendo casi un mes! y ¿Qué no va a funcionar?, ¿Qué es lo peor que puede pasar? dime; explota Vlad.

- ¡Que pierda a mi familia, que me odien por lo que soy, tengo que decirles que es por el estudio y nada más!; contesta colérico mientras se agarra los cabellos.

- ¡Pero acabas de decir que no están convencidos, que donde van a vivir hay mejores universidades, entonces, no entiendo!; masculla mi hermano.

Su discusión se escucha en toda la cuadra, Milán estaciona su coche en la esquina de mi casa y aún no nos ven, pero nosotros sí.

- Es...

- Teo y mi hermano, es verdad lo que dice Vlad, tus tíos quieren que estudie en otra ciudad, no dejarán que se quede, cierto; comento con una mueca de disgusto.

- Ellos son muy estrictos, esa es la única verdad

Volvemos a escucharlos, están en otro tema, pero no modulan su tono de voz.

- ¡Para ti es fácil, tus padres te entendieron y ahora tus hermanas!; se queja Teo.

- Fácil, mis padres están muertos Teo, no es fácil salir del closet como dicen, pero dime ¿Qué pasará después?, les seguirás mintiendo hasta que te paguen todos los estudios y esa mierda

- ¿Crees que es por el dinero?; pregunta ofendido.

- Mis padres y yo éramos muy unidos, los amo con todo el alma hasta el día de hoy, aunque ya no pueda decírselos, les dije mi orientación por dos razones Teo, la primera, porque en cualquier momentos los perdería para siempre, y la segunda, porque quería saber cuál era su opinión, y así me hubieran escupido en la cara, los seguiría amando, pero antes de decírselos analice nuestra vida, nuestra cercanía, y algo en mi me decía que podía decírselos y que me entenderían, a pesar de que un día papá habló mal de los homosexuales y que mamá me criticó por no llevar parejas mujeres a la casa

- ¿Cuál es tu punto?

- Desde ahora juras y perjuras que no te van a entender, que te van a odiar y que eso te va a doler, pero en las últimas semanas te has quejado de ellos, te has desahogado conmigo, entonces no entiendo que te va a doler, perder su cariño o su bolsillo

Es suficiente para que ambos comiencen a golpearse, no lo dudo y salgo del coche para separarlos. Milán se adelanta y sujeta a Teo por detrás, este tiene el labio partido, me pongo en el medio y abro los brazos para que mi hermano no avance.

- ¡Eso te molesta, perder el dinero de papi y mami, entonces quédate con tu dinero, con tu familia, vete, lárgate!; masculla mi hermano con la respiración acelerada, mientras lo amenaza con el dedo índice.

- Eres un imbécil, un cabrón, soy un juego para ti, desde el principio sabías mi situación, te divertiste conmigo todo este tiempo, ahora tienes el camino libre para seguir siendo un puto

No Se Enamoren de Ari (Por favor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora