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C: 91 - ¿ME PERMITE ESTÁ PIEZA?

Narra Ginny:

Astoria: Oh por Merlín, Ginny. -sonrió sorprendida-

Daphne: Mírate, eres una princesa.

Leila: Estás hermosa. Mira tu cabello, por Merlín. -sonrió sorprendida-

Pansy: Necesito tips de cómo hiciste ese ondulado. -sonrió emocionada-

Ginny: Gracias, chicas. -sonreí sonrojada- Mi cuñada Fleur me ayudo.

Ben: ¿Verdad que es la más bella de esta noche? -sonrió orgulloso-

Daphne: Oh si, no diremos nada solo porque es tu novia...

Leila: Exacto. Pero esta más que claro que... oh por Merlín. -dijo boquiabierta mirando a mi espalda y la del rubio-

-Las chicas y yo miramos en dirección a donde la rubia con traje de gala color rojo oscuro veía, y así como ella, todas sonreímos emocionadas al ver a Hermione Granger entrar y venir a nosotras con una sonrisa tímida.

Pero lo que nos sorprendió, fue verla con ese vestido rojo intenso y su cabello peinado de forma increíble, como una linda princesa de cuentos de hadas. Las chicas y yo sonreímos y caminamos hasta ella quien sonrió sonrojada.

Benjamín solo llego a nosotras con confusión y saludo a la castaña-

Ben: Bienvenida, Hermione. -sonrió-

Hermione: Gracias, es...

Astrid: Oh, Beni. Por fin te encuentro. Ven, debes ayudarme a recibir a los invitados. Tu padre no deja de platicar en la entrada con Lucius y Rabastan. -rodó los ojos-

Ben: Por eso digo que debo irme. Diviértanse, chicas. -dijo dando una pequeña reverencia a nosotras y caminando junto a mi suegra-

-Después de eso, las chicas y yo empezamos a halagar a Hermione-

Astoria: Las dos son unas princesas esta noche.

Daphne: Si, sin duda alguna se ven increíbles.

Leila: Las flores son bellas y cortarlas para regalarlas es el mejor detalle. Pero a usted, señorita... Si fuera una flor, la dejaría en mi jardín y jamás la arrancaría, así podría seguir admirando toda mi vida su increíble belleza. -sonrió-

Daphne: Oh por Merlín. -sonrió sorprendida-

Astoria: ¿Estás bien, Leila? -sonrió divertida-

-pero la rubia no contestaba, estaba tan embobada con la castaña que ni siquiera se había dado cuenta de que todas habíamos escuchado sus lindas palabras. Sin duda los Greengrass tenían eso en común-

Pansy: Ni siquiera Hermione reacciona. -sonrió divertida pasando una mano frente a mi mejor amiga-

Ginny: Será mejor que las dejemos un rato y se pierdan en su burbuja.

Daphne: Es lo mejor. -rió divertida-

Astoria: Vengan, les mostraremos el lugar. Papá y Beni organizaron todo este año. -sonrió emocionada-

Daphne: Exacto, la temática es el hielo, la nieve, el yule, el invierno. La escultura de hielo mágica sin duda las dejara boquiabiertas.

Ginny: ¿Escultura de huelo mágica?

Pansy: ¿Dónde está?

Astoria: Síganme a mi y a Daphne si quieren verla. -sonrió-

Ginny: ¿Y Leila y Hermione?

Daphne: Déjalas un rato. Están en su mundo de amor, no nos prestarán atención ahora. -rodó los ojos divertida-

Astoria: Si, además Leila es una Greengrass. No le pasara nada a Hermione estando con ella.

Pansy: Tranquila, esta en buenas manos. No se perderá con esta gente a lado de Leila.

Ginny: Bien, entonces vamos. Quiero ver esa escultura. -sonreí emocionada-

...

-

El baile había empezado hace más de tres horas. Las chicas y yo estábamos juntas y las seis bailabamos juntas en la pista de baile. Al principio los pasos habían sido fáciles y liberales lo que nos ayudo a Hermione y a mi a entrar en ambiente.

Pero después de la hora y media, los pasos de baile elegantes y difíciles empezaron a ser los principales para los próximos bailes. Todas estábamos sentadas mirando a los otros invitados ya que Hermione y yo no nos sentíamos listas para ese tipo de cambio en la pista.

No queríamos hacer el ridículo y mucho menos dejar en vergüenza a la familia Greengrass por invitarnos a un baile el cual ni siquiera podíamos bailar. Pero en ese momento, Benjamín Greengrass por fin llego frente a mi.

No lo había visto desde que su madre se lo llevo a la entrada para saludar a los invitados como el buen anfitrión que debía ser. Y verlo frente a mi, con una reverencia y una mano extendida hacía mi, me hizo sonrojarme-

Ben: Bella señorita, me es imposible pasar un minuto más lejos de usted. Por favor, ¿me permite esta pieza? -sonrió-

-miré a las chicas con emoción y ellas, locas por verme bailar por fin con mi rubio favorito, asintieron.

Regresé mi vista al rubio y asentí aceptando su mano. Benjamín sonrió y me llevo a la pista de baile donde habían algunos esperando la siguiente melodia para seguir bailando, y en ese momento recordé que no era capaz de seguir los pasos-

Ginny: Espera, no sé los...

Ben: Tranquila, he pedido personalmente una melodia para que podamos bailar sin problema alguno. -sonrió-

Ginny: ¿Ah si? -pregunté sorprendida-

Ben: Si. Perdón por no estar contigo en toda la noche.

Ginny: Descuida, eres el anfitrión y el primogénito de tu familia. Es normal que estés ocupado en esta clase de eventos.

Ben: Lo sé. Pero quería estar contigo desde que inició el baile y no he podido hacerlo gracias a mis deberes.

Ginny: Ahora estas aquí. -sonreí- Es lo que cuenta.

Ben: Me alegra que pienses así -sonrió aliviado- Bien, ahora amor mio. Pon tus manos en mis hombros o donde quieras.

Ginny: ¿Por qué?

Ben: Porque la melodia esta a punto de empezar. -sonrió acariciando lentamente mi cabello por mi espalda y bajando sus manos hasta colocarlas en mi cintura-

-Yo asentí, y en ese momento las notas lentas y elegantes de un violin empezó a sonar dando como referencia el inicio del baile. Todos se pusieron en posición el piano empezó a tocar dejando así, el sonido de una hermosa melodia.

Sonreí maravillada y no fue hasta que sentí como Benjamín empezó con los pasos, que puse una mano en el pecho del rubio y la otra en su hombro. Y así fue como empezamos a bailar lentamente, escuchando la maravillosa, elegante, romántica y espectacular melodia que esta noche nos estaba regalando como nuestro primer baile oficial de esta fiesta-.