C: 94 - SIENTO QUE LA ESTOY GANANDO

1.3K 122 6
                                    

Narra Ginny:

-Los rayos del sol habían entrado por la ventana y estaban directamente sobre mis párpados. Frunci el ceño y, abriendo mis ojos gruñi ante la necesidad del sol para vengarse de mi por desafiar su calor y brillo por toda la madrugada.

Y entonces, cuando me di cuenta de la situación. Sentí las manos de Benjamín sobre mi cuerpo. Una estaba aferra a mi abdomen, y la otra estaba un poco más abajo, casi llegando a mi feminidad.

Sentí mis mejillas sonrojarse al recordar lo que habíamos hecho anoche y, al sentir nuestros cuerpos desnudos pegados y dándonos calor, sonreí.

Pero a mi cuerpo, llego nuevamente aquel calor que me había invadido anoche y, pegándome más al cuerpo de mi novio, sonreí. Sentí su cuerpo detrás de mi.

Ahora quería más, de él y se su cuerpo. Necesitaba despertarlo, así que rápidamente empecé a frotar mi trasero sobre él. Lo único que conseguí al principio fue que Benjamín se quejara y volviera a dormirse, pero como siempre dicen... "el mago que persevera lo alcanza".

Y yo quería eso, seguí moviéndome lentamente sintiendo por fin su miembro rozando con mi trasero. Y cuando menos me di cuenta, escuche un jadeo ronco del rubio. Sonreí satisfecha al saber que mi plan estaba dando frutos, así que seguí con mis movimientos.

No fue hasta que sentí las manos de Ben apretar mi cuerpo y jalarme hasta él, que di un pequeño grito ahogado-

Ben: ¿No tuviste suficiente anoche? -preguntó con una voz ronca y sexy gracias a su recién despertar-

Ginny: El sol está tomando venganza y me despertó. Necesito enseñarle que esta habitación sigue caliente. -sonreí divertida-

Ben: ¿Así que me usas para vengarte del sol? -sonrió divertido-

Ginny: Algo así. ¿Te importaría volverte a dormir mientras yo sigo con lo mio?

Ben: Si tu estuvieras dormida y yo soy quien quiere pelear con el sol, ¿tú te dormirías?

Ginny: Si va a valer la pena, si. -sonreí-

Ben: ¿Me darías permiso de hacerlo? -preguntó sorprendido-

Ginny: Obvio. Siempre y cuando solo seamos tu y yo.

Ben: Eso es más que obvio. -sonrió-

Ginny: ¿Entonces?

Ben: Bien, pero ni pienses que haré algo. Quiero seguir durmiendo.

Ginny: Relájate. -sonreí- Será rápido.

-Benjamín rodó los ojos, pero aún así asintió y, después de acostarse mejor, cerro sus ojos para seguir "durmiendo".

Yo por el otro lado, me subí y sente en su regazo para empezar a frotar nuestras partes otra vez. Jadee un poco al sentir su miembro haciendo fricción con mi zona y no pude evitar mojarme un poco.

Aún así, era lo que necesitaba y así seguí, hasta que sentí como estaba completamente mojada y lubricada para seguir con lo mio... y Benjamín. Así que, con cuidado, agarré el miembro de Ben y de un senton, lo metí dentro de mi.

Di un pequeño grito al sentir todo de él dentro de mi. Pero al mismo tiempo escuche un gruñido de dolor por parte del rubio-

Ginny: Sigue durmiendo. -lo regañe-

Ben: ¿Cómo quieres que lo haga? Estas tan estrecha y... por Merlín, la erección mañanera no ayuda de mucho. -me miró-

Ginny: Lloras como una niñita. -rodé los ojos-

Ben: Me sigues diciendo eso y te juro que seré yo quien se vengue de ti. -me miró mal-

Ginny: ¿Ah si? -pregunté divertida- ¿Y qué harás? -dije moviéndome en círculos-

Ben: Ahh, no hagas eso. -cerro los ojos-

Ginny: Te dije que siguieras durmiendo. Esto es entre el sol y yo. -dije empezando a montar y a brincar despacio sobre mi rubio-

Ben: No es mi culpa que... que hayas maldecido al sol toda la madrugada. -jadeo-

Ginny: Claro que si. Tu fuiste quien inicio.

Ben: Pero eras tu quien gritaba que eras más caliente que el sol... por Merlín, sigue moviéndote así. -sonrió-

Ginny: ¿Te gusta así? -sonreí-

Ben: Oh si, se siente muy bien. -suspiro con una sonrisa-

Ginny: Sabes, no entiendo por qué siempre que tenemos sexo empezamos peleando.

Ben: Siempre peleamos, no sé por qué te sorprendes. -sonrió divertido-

-Después de eso sentí como fue él quien dio una estancada profunda sobre mi haciéndome gemir un poco alto.

De inmediato me lleve una mano a mi boca y miré mal al rubio quien estaba sonriendo-

Ginny: No hagas eso, nos van a escuchar. -jadee sintiendo otra penetración más-

Ben: No es mi culpa que seas tan... Ahh, si, tan traviesa. -sonrió- Además, no puedes gritar, recuerda.

Ginny: Déjame poner los hechizos. No sé por qué no quieres. -rodé los ojos-

Ben: Ya te dije anoche. Mis padres sabrían qué hechizo se usó. Tienen una especie de alarma gracias a que una vez Daphne casi explotó toda la casa intentando practicar un hechizo.

Ginny: Pero no creo que sepan que hicimos el hechizo para esto.

Ben: Créeme, Ginevra. Lo sabrán. Son padres, saben todo. -me miró-

Ginny: Grito mejor en tu habitación de Hogwarts. -suspire rendida-

Ben: Si quieres cuando lleguemos podemos cumplir tu petición de los gritos. -sonrió-

Ginny: Bien, pero sigue moviéndote. -sonreí- Se siente increíble cuando tu lo haces.

Ben: Es obvio. Sé lo que te gusta.

Ginny: Entonces sigue haciéndolo, niño bonito. Tengo una competencia contra el sol y siento que la estoy ganando. -sonreí cerrando mis ojos-

-Y así fue como Benjamín logró tomar el control de todo esto y empezó con sus penetraciones dentro de mi.

Yo solo sonreía mientras tenía una mano sobre el cuerpo del rubio y la otra la tenía en mi boca intentando controlar mis gritos y gemidos que el chico estaba sacándome.

Admito, era difícil, pero sin duda alguna la adrenalina de saber que no pueden escucharnos era muchísimo más excitante y me hacia volverme loca-.









CONSENTIRTE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora