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C: 112 - EL DILEMA DE LAS CHICAS GREENGRASS

Hogwarts-

—La luz de las antorchas proyectaba sombras largas en las paredes de la habitación privada de Daphne Greengrass. Las cortinas de terciopelo verde oscuro colgaban pesadamente, creando un ambiente sofocante, mientras ella caminaba de un lado a otro, con una expresión tensa en su rostro.

A pesar del lujo que rodeaba a las habitaciones privadas de los miembros más distinguidos de Slytherin, la incomodidad era palpable.

Daphne no dejaba de dar vueltas, con sus pasos cada vez más rápidos, mientras sus pensamientos giraban en torno al mismo problema.

Astoria y Leila, sentadas en la cama de Daphne, la observaban en silencio, susurrando entre ellas de vez en cuando. La tensión en el aire era casi tangible- Daphne: ¿Y si Ben ya lo sabe? -soltó abruptamente, deteniéndose por fin, aunque su cuerpo parecía vibrar de nerviosismo- ¿Qué si ha descubierto que fuimos nosotras las que respondimos la carta?

Leila: Vamos, Daphne... Daphne: ¡No! ¡Ben ya sospecha algo... lo noto! ¡Lo noto! -exclamó finalmente, deteniéndose de golpe frente a su hermana y su prima- No deja de hacer preguntas. Si descubre lo que hicimos, ¡se va a enfurecer!

-Leila rodó los ojos y soltó una pequeña carcajada, z Leila: Daphne, siempre te pones tan dramático. No creo que Ben haga tanto drama por eso.

Daphne: ¡Claro que lo hará! -replicó, frunciendo el ceño- No estás entendiendo. Es un Greengrass, Leila, y los Greengrass somos dramáticos por la naturaleza. ¿No lo sabes ya? Tú también eres una.

-Astoria, que había permanecido en silencio hasta ese momento, acomodándose suavemente su asiento-

Astoria: TIene razón. Ben no es de los que dejan pasar algo tan fácilmente.

-Leila suspiró, resignándose-

Leila: Quizás... pero, ¿qué podemos hacer ahora? El daño ya está hecho.

Daphne: ¡No! -exclamó agitada, comenzando de nuevo su frenético caminar- No puedo simplemente sentarme a que descubra que fui yo quien firmo como nuestra madre.

-Astoria se inclinó un poco hacia delante, con una expresión más comprensiva-

Astoria: Daphne, no sabemos si Ben ya sospecha tanto. No lo he escuchado mencionar el tema más que una vez, y cuando lo hizo, ni siquiera estaba del todo seguro, tú ni siquiera estabas ahí. -se cruzó de brazos- Tal vez podamos mantener esto bajo control.

-Daphne se detuvo nuevamente, clavando su mirada en su hermana menor-

Daphne: ¿Ya mandaste a buscar a Ginny?

-Astoria asintió con calma-

Astoria: Envié a Draco. -respondió con calma- Él se encargará.

-Leila arqueó una ceja, su tono burlón cuando habló-

Leila: ¿Estás segura de que fue una buena idea enviar a Draco? No parece muy... apropiado para traer a la novia de Ben hasta aquí.

-Astoria rodó los ojos, cruzando los brazos al escuchar eso-

Astoria: Draco puede ser complicado, y sí, a veces cae mal, pero es un amor conmigo y puedo confiar en él para todo.

-Leila sonrió con burla-

Leila: Estás enamorada de él, ¿verdad?

-La castaña se sonrojó al instante, bajando la mirada-

Astoria: Sí, lo estoy. Es perfecto. -respondió con un susurró y una sonrisa tonta-