CONSENTIRTE

C: 19 - CUÑADITO

Hogwarts-

Ginny: Deja de ser amargado al menos por un día y diviértete y convive, Greengrass. -dijo riendo sentada a mi lado-

-Lo admito, sigo sorprendido. Jamás he comido en otra mesa que no sea Slytherin, y menos sin mis amigos, Daphne y Astoria.

Estar aquí frente a los leones y sentado en medio de todos ellos era algo que me parecía sumamente sorprendente e incluso ilógico. En mis cuatro años aquí en Hogwarts jamás creí que este momento pasaría.

Sin embargo, aquí estaba. Fingiendo ser novio de la chica que menos pensé que dejaría entrar a mi vida, sentado en la mesa de Gryffindor, casa que no es de mi agrado en absoluto.

No desde que mi tatarabuela fue Gryffindor y abandono a mi tatarabuelo solo por ser de Slytherin y creer que él seguiría "el camino del mal"-

Hermione: Tú novia tiene razón, Benjamín. Deja de ser un poco anticuado con estas cosas y relájate un poco. -dijo divertida-

-Sabía lo que Granger trataba de decirme con esas palabras así que asentí en señal de respuesta y ella también lo hizo para después continuar su platica con Potter y Ronald los cuales no me miraban del todo bien desde que me senté a lado de Ginny-

Ben: Zanahoria, ¿cómo estás? -pregunté abrazando de la cintura a la mini comadreja-

-Mi tacto hizo que Ginevra se sobresaltara un poco. Obviamente ninguno de los dos parecía estar acostumbrado a este tipo de afectos y menos por parte del otro así que rápidamente cambié mis manos de su cintura hacía su mano izquierda y entrelace nuestros dedos-

Ben: ¿Todo en orden? -pregunté haciendo contacto visual con ella-

Ginny: S-Si, todo en orden.

-Vi como Hermione a su lado le dio un pequeño codazo muy disimulado el cual solo pude presenciar yo ante la postura en la que estaba-

Ginny: Digo. Si, todo en orden, mi lindo rubio. -dijo sonriendo-

-Sonrisa que obviamente era más falsa que Pansy Parkinson intentando ser delicada a la hora de comer-

Ben: Me alegro, pequeña. -dije dándole un pequeño beso en su frente-

-Inmediatamente todos a nuestro alrededor abrieron la boca de tan sorprendidos que quedaron, incluido Ronald y Potter.

Pero lo que me causó gracia fue el leve sonrojo que se formó en las mejillas de la mini comadreja. Era divertido verla así-

Ginny: Y-Yo, yo...

Ben: Que linda te ves sonrojada. -dije sonriendo-

-No mentía, era linda-

Ben: Ahora conozco algo más rojo que tu cabello.

Ginny: D-De n-nada. -dijo tartamuda-

George: Vaya, vaya, Fred. Parece que nuestro nuevo cuñadito le revuelve las neuronas a nuestra hermanita. -dijo una de las copiadoras a unos cuantos leones frente a mi-

Fred: Ya lo veo, George. Aparte de tartamuda, la deja dislexica. -dijo divertido-

George: Sorprendente.

Fred: Un gusto, cuñadito. Soy George.

George: Y yo Fred. -dijo sonriendo desde su lugar-

Seamus: No es cierto, tú eres Fred. -apuntó al primero que se presentó- Y tú George. -apuntó al otro- Me costó 3 años identificarlos pero sé perfectamente quién es quien ahora.

-Yo miré a ambas fotocopias con una ceja alzada. ¿En serio querían confundirme?-

Fred: Ay, no nos veas así, cuñadito. Debes irte acostumbrando a este tipo de bromas.

George: Exacto. Si serás novio de nuestra hermanita significa que no sólo tendrás la dicha de gozar de un miembro oficial de la familia Weasley.

Fred: Si no que gozarás del combo completo.

George: Eso significa.

Fred: Que ya eres familia, así que...

George: Felicidades, ya eres un miembro oficial de los Weasley.

Ben: ¿Qué? -pregunté riendo-

Ron: Ni crean que será un miembro oficial. -bufo enojado a lado de Granger-

Fred: Él es Ron.

George: El penúltimo miembro de sangre de la familia Weasley.

Fred: Que no te intimide, es muy llorón.

George: Pero hazle una broma y verás que no se aguantará. -dijo riendo-

Ron: Oigan, eso no es cierto. -dijo ofendido-

George: Si, claro.

Fred: Y tampoco es cierto que duermes abrazado a un osito de felpa.

Ron: Era secreto. -dijo en voz baja-

-Todos los presentes y los que estábamos atentos a la conversación de estos pelirrojos nos reímos. Definitivamente era algo con lo que podría molestar más adelante a Weasley-

George: Pero bueno, tú no eres relevante ahorita, hermanito.

Fred: Ahora lo relevante es.

George / Fred: Conocer al novio de nuestra pequeña hermanita. -dijeron al unísono-

-En ese momento recordé a Daphne y nuestra "conexión de clones", como solíamos llamar las veces en que hacíamos lo mismo que estos dos.

Sonreí de inmediato, era increíble tener una copia tuya como estos dos, y yo tenía a la mía-

Fred: Así que, dinos, Benjamín Greengrass.

George: ¿Cuáles son tus intenciones con nuestra hermanita? -preguntó entrecerrando sus ojos-

Fred: ¿Acaso la quieres sólo para un rato? -preguntó haciendo el mismo gesto que su gemelo-

Ben: ¿Qué? -pregunté confundido-

George: ¿Piensas casarte con ella?

-Apenas dijo eso, Ginny se empezó a atorar con el jugo de calabazas que estaba tomando en ese momento y empezó a toser-

Ben: Mini comadreja. -dije asustado y ayudándole a que respirara mejor- ¿Estás bien? -pregunté llevando toda mi atención a ella-

Ginny: Mejor, muchas gracias. -dijo con los ojos un poco abiertos-

Ben: Que bueno. -suspiré aliviado- No bebas tan rápido esta cosa, la pulpa a veces se te atora en la garganta y causa estas reacciones. -dije mirándola fijamente- Lo digo por experiencia.

Ginny: ¿Así que Benjamín Greengrass se ha atorado con la pulpa del jugo de calabazas? -preguntó burlona-

Ben: Oh, vamos. Solo, fueron unas veces. -dije rodando los ojos y riendo-

-Ginevra me vio alzando una ceja en señal de que no creía lo que le había dicho así que suspiré rendido-

Ben: Esta bien, me pasa casi todo el tiempo. -dije un poco avergonzado-

Ginny: La perfección se te ha ido, rubio teñido. -dijo riéndose-

Ben: ¿Así que me creías perfecto? -pregunté cambiándole la jugada-

-Consiguiendo un pequeño golpe de Ginny en mi hombro-

Ben: Auch. -dije fingiendo dolor- Que fuerza.

Ginny: Que débil.

-Ginny y yo nos quedamos viendo el uno al otro. Hasta se me había olvidado que estaba hablando con las fotocopias hace unos segundos.

Ahora mi atención estaba a mi derecha, y frente a mis ojos, junto a la chica pelirroja y de ojos marrones que me hacía contar mis verdades frente a los leones-.