6. Gryffindor vs. Ravenclaw.

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Los días pasaron de manera rápida y no tan dolorosa, de igual manera, cada día extrañaba más y más a sus amigos, pues nunca habían pasado tanto tiempo separados.

Molly le mandó cartas varias veces, deseándole que estuviera bien y que se asegurara de comer (incluso le había mandado pastel de manzana más de cuatro veces en una semana).

Harry le respondía todas las cartas, le decía que saludara al resto de los Wesley y comía grandes rebanadas de pastel de manzana mientras se escribía con su amigo.

Amigo.

A Harry le resultaba raro llamarlo de esa manera, esa persona no tenía cara en la mente de Harry, pero cualquier encantamiento que hubieran utilizado en Hogwarts, había funcionado. Harry nunca se había sentido tan en sintonía con alguien que con el autor de aquellas letras verdes.

Había veces en las que se escribían todo el día, era lo primero que hacía Harry al despertarse y lo último que hacía antes de dormir.

Había veces que no se escribían, el periodo más largo de tres días, las palabras grises de Harry aún marcadas en el pergamino, indicándole que la otra persona aún no las había leído.

Cuando su amigo se dignó a contestarle, Harry le preguntó si estaba bien y él le dijo que había estado ocupado.

Harry lo entendió y volvieron a escribirse como si nunca hubieran cortado la conversación.

Esa mañana llegó al correo de Harry una carta de Ron:

Hola Harry, Ron aquí.

Hermione me ha contado que lo del amigo por correspondencia ha salido bien, eso es bueno, ¿cierto?

Sólo espero que no te consigas un nuevo mejor amigo, no le digas a Hermione que te escribí esto.

Las clases están bien, son mucho más relajadas que en años pasados (tal vez sea porque ahora no tengo a la muerte respirándome en el cuello mientras intento hacer los deberes).

Estar aquí sin ti es bastante aburrido, Hermione me obliga a pasar horas en la biblioteca y ahora que es mi novia la idea de hacerme la tarea no le agrada.

¡Volví a jugar qudditch! Dudo que ganemos el campeonato sin ti, aunque Ginny es bastante buena y ha llenado de esperanza el equipo.

Hablando de Ginny, creo que le agradaría si le escribieras.

Te quiere, Ron.

PD. Si algún día le enseñas esta carta a alguien, quemaré tu casa.

Harry guardó la carta en el cajón de su escritorio mientras sonreía, Ron y él no solían escribirse muy a menudo y mucho menos eran afectivos, pero Harry sabía que no podía tener otro mejor amigo que no fuera Ron.

Harry sacó un pergamino en blanco, dispuesto a escribirle a Ginny.

''Querida Ginny:''

Eso fue todo, no sabía cómo continuar la carta, no tenía idea qué le podría decir, su situación con Ginny era...rara.

Harry estuvo con ella las veces que Ginny lo necesitó después de la tragedia que había ocurrido en su familia, pero una vez que las cosas comenzaron a relajarse, Harry se alejó.

Adoraba a Ginny, ella siempre era alegre y divertida, ¿acaso era esa la razón por la cual ya no congeniaban tanto? Ginny era esta extraña mezcla de colores, naranja explosivo, rojo fuerte.

Y Harry últimamente sólo era un azul apagado.

Tuvo que desechar al menos 4 hojas intentando escribirle, después de lo que parecieron horas sentado en su escritorio decidió que necesitaba ayuda para lograrlo.

The calm before (after) the storm | Drarry |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora