En un mundo de Alfas y Omegas, Samuel De Luque, un Omega que desconfía en los Alfas, conoce a Rubén Doblas, un Alfa un tanto juguetón y por la extraña decisión de sus madres, ambas Alfas, de comenzar a convivir juntas el mundo de ambos dará un giro...
Era la hora del almuerzo de aquel miércoles, Samuel, Luzu, Herny y Jesús se habían sentado juntos reunidos en una de las mesas para poder conversar entre ellos. El azabache estaba feliz de tener un momento libre de las juntas del consejo, así que estaba disfrutando de la compañía y más que nada estaba muy pendiente de Luzu, a quien se lo veía normal como siempre, risueño y alegre; estaba feliz de verlo de aquella forma, lo tranquilizaba saber que el Alfa estaba tomando las cosas bien, sin duda la partida de Lana lo había lastimado pero en una charla con su mejor amigo le dijo que estaba dispuesto a mejorar, a seguir viviendo como siempre, hasta que creciera y volviera a enamorarse.
-Ya va a llegar el día del maratón ¿van todo bien con los preparativos Vege?- preguntó Jesús.
-Aaahh que mal- se quejó Herny- ojala llueva para no tener que participar- agregó bebiendo.
-Eso no serviría de nada, tan sólo cambiarían la fecha y ya- respondió Jesús igual de decepcionado- tendríamos que correr igual- bufó.
Mientras comían sus alimentos contemplaban a sus compañeros de curso haciendo lo mismo centrados en sus propias charlas y risas.
-Por cierto- dijo Herny llamando la atención de sus acompañantes- escuché un rumor sobre Rubius- agregó terminando su bebida.
-¿Un rumor?- inquirió Luzu deteniendo su acción de llevar su sándwich hasta su boca.
-¿Qué rumor?- preguntó Samuel con cierta curiosidad.
-Aunque realmente no creo que sea cierto pero...- se acercó más al centro de la mesa y sus amigos lo imitaron- dicen que Rubius y el presidente del consejo estudiantil, Raúl Alvarez, están saliendo-.
-¿Qué?- aquello tomó completamente desprevenidos a los otros tres ¿Sería posible?
Herny continuó- parece que últimamente ellos dos se juntan muchos en los recesos, incluso luego de clases y que cada vez que los ves juntos se ven algo íntimos, como amigos muuyy muuuuyyy pero muuuyyy cercanos- dijo alargando sus ultimas palabras y poniéndole muchísimo énfasis.
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Luego del almuerzo comenzaron nuevamente las clases, lo comentado por Herny seguía dando vueltas en la cabeza de Samuel ¿Rubén y Raúl? ¿Realmente sería así? Él no era de creer mucho en los rumores, eran, a su criterio, una bobería que no merecían la pena escuchar pero no iba a negar que aquello llamaba poderosamente su atención. Quizás así fuera mejor, tal vez así Rubén dejaría de molestarlo ¿No? Tendría una pareja y no tendría que cruzárselo muy seguido en casa. Le daba igual. Si, aquello le daba completamente igual... entonces ¿Por qué estaba escondido entre unos arbustos con Luzu? Era hora del último receso y ambos habían salido a buscar a Rubius, más porque su amigo insistía pero él no había puesto mucha oposición a seguirlo.
-¿Dios, por qué tengo que hacer estas cosas como si fuera un espía?- preguntó en su susurro a su compañero- ¿A mí que más me da ese rumor?- se preguntó ahora a sí mismo.
