Némesis[✔️] ©️

21_Adíos ✔️

Némesis

Quizás sea porque está escrito en mi destino ser infeliz que tengo que pasar el resto de mi vida construyendo un muro destrozado que no destruí, reparando el tejido de un corazón roto que no rompí. No tengo certeza, pero algo muy dentro de mi corazón me dice que mi madre es la culpable de todo, no necesito pruebas porque la mayor de todas fue poner la vida de su propia hija en peligro, jugar a ser la jefa de los alacranes quienes llevan años intentando apoderarse de una ciudad entera a base de asesinatos y droga. Lo peor de todo es que la apoyé, la ayude a vengarme de una familia que no tiene nada que ver, de unas personas que amaron a mi abuelo y mi padre. Hay muchas cosas que aún no sé y quiero descubrir.
Le hice una promesa al señor Benson y tengo palabra, debo de ayudarle a atrapar Lucrecia y alejarme de Chad, después de todo, es eso lo que quiere.

__Me dejas sola... por favor __pido a Chad. Tenía planeado irme mañana a primera hora, pero lo haré hoy, no soporto más este horrible dolor que siento dentro de mi cuando sé que nada de lo que haga va a ser suficiente para que alguien en esta jodida vida me quiera, no por mi físico, no por el sexo, sino de esa rara y extraña forma cuando vez a alguien y tu corazón se agita, cuando solo piensas en que esté bien y si algo malo le sucede seas un escudo que lo protegerá. Ese día, pude ver como las balas salían de esa pistola en cámara lenta, no lo pensé, fue un impulso de mi corazón correr y recibirlas por él, porque no sabía cuanto le quería hasta que por mi cabeza pasó que le podía pasar algo malo.
Todo esta pesadilla comenzó con un horrible plan de venganza que planeó mi madre para tomar lo que nos pertenecía y acabar con la vida de Chad para que su familia sintiera lo que supuestamente mi madre sintió cuando perdió a mi padre, luego vino conocerlo, el sexo, las pelas y su estúpido e insoportable carácter. No negaré que el sexo con el es algo que Jamás experimente, pero mucho más su intensa forma de besarme y mirarme, su forma de caminar y como pierde los papeles cuando le provoco y me porto mal, o la forma en que ama a su abuela y hace lo posible por verla sonreír, sin dejar atrás como permite que su tía apachurre sus mejillas sin poner quejas. Quizás no sea tan malo, solo no se deja querer, no permite que entren en su corazón y eso está mal porque sé que cuando lo permita, lo hará bien.

Lentamente se pone de pie y sin decir nada sale por la puerta cerrando esta de un ligero pero seco portazo. Suspiro para contener las lágrimas y reunir la fuerza suficiente para poder ponerme de pie y sacar mis cosas para irme. Si quiero alejarme de Chad, debo de empezar por aquí. No puedo tenerle cerca y fingir una relación frente a todos, mentirle a su abuela y a mi misma es horrible.
Camino hacia el armario y saco mi maleta dejándola caer al suelo, no puedo hacer mucha fuerza. La abro agachándome con cuidado y dejo caer la ropa dentro de esta, cuando está lista la cierro y tomo mi celular, el que antes me había devuelto el señor Benson.
Miro a mi alrededor, no a pesado un día y ya me marcho ¿Qué diré a la señora Lara? Tomo la maleta y la arrastro fuera de la habitación, aún duele un poco la herida pero puedo moverme mucho mejor ya sin los puntos. Pues antes tenía mucho miedo de que se abrieran. Logro bajar la escalera satisfactoriamente y sin que nadie me pueda ver, pues Chad no se donde estará metido y los señores Benson al parecer están en su habitación.

Cruzo la puerta y bajo las escaleras sin ningún problema hasta que dos guardaespaldas obstaculizan mi salida por la puerta principal.

__¿A donde va señorita? __habla unos de ellos, Moreno de casi dos metros, con más músculos que un elefante.

__Me largo a casa, con permiso __intento esquivarlo y pasar pero ambos vuelven a impedir mi huida. Resoplo con disgusto.

__No puede salir salir señorita, son órdenes del señor Chad __ se queja el otro.

__Me vale un huevo lo que diga tu jefe, quítense del medio __protesto con rabia pero sin gritar, no quiero que me escuchen.

__No podemos dejarla marcharse señorita, el señor Chad...