Alumno para Dos

15.- Decisión

ADVERTENCIA: CONTENIDO 🔞

CAPÍTULO 15:
DECISIÓN

Con dificultad para caminar llegó Gun a su lugar de trabajo, siendo objeto de observación de sus compañeros que no disimulaban su curiosidad.
-Oye, ¿por qué caminas de esa forma?-. Le preguntó uno de sus colegas.
La invasión hacia su cuerpo era un acto que Gun ya lo tenía familiarizado, por lo que la razón de aquella forma de caminar no era más que los golpes y latigazos que recibió en sus nalgas.
-Nada, sólo me duele un poco las piernas. Hoy estaba haciendo un poco de ejercicio en el gimnasio y me sobre exigí. Es todo-.
-Vaya el tipo de ejercicio que tuviste. Un personal trainer te llevó a los baños, ¿verdad?-.
Todos se echaron a reír después haber oído a Atthaphan.
-¡Idiotas!-. Respondió Napat con una sonrisa.
-Bien, ya me tengo que ir. Mi turno ha acabado y papi ya me espera. Nos vemos-.
-Adiós, P'Gun-.
-Nos Vemos, Nong Gun-.
El joven Atthaphan desapareció de la vista de los trabajadores y la muchedumbre apenas comenzaba a cruzar la puerta de entrada.
A pesar del dolor, Gun comenzó a moverse de un lado a otro atendiendo a varios clientes que se posicionaban en la barra sin parar.
Una pareja solicitó a Gun preparar un trago por lo que se apresuró a buscar el set de coctelería.
Se agachó para obtener el set en uno de los estantes, cuando una voz habló.
-Chico guapo, ¿podrías atenderme, por favor?-.
-Lo siento, estoy ocupado. Pide a otro barman que te atienda-. Respondió Gun aún escondido.
-No, yo quiero que tú me atiendas-.
Gun se levantó molesto, pero no duraría mucho cuando vio quién era el hombre exigente.
-Oh, Perth-. Sonrió.
El chico agitó su mano y le mostró una bella sonrisa.
-Espérame un momento, ¿sí?-. Dijo el barman.
-De acuerdo-.
Gun coloco su cuerpo en modo velocidad a tal grado que en menos de 3 minutos ya estaba de vuelta con Perth.
-Pensé que no vendrías. Ya es muy tarde, son casi las dos de la mañana-.
-Al principio pensé en no venir, pero realmente quería verte. Te extraño-.
-Mucha atención de mi parte no tendrás-.
Tomó una copa y preparó un trago.
-Ten, corre por mi cuenta-.
Sin quitar la vista de los ojos de Gun, Perth aceptó la copa y la bebió en un sorbo. Se levantó de su asiento y caminó hacia el pasillo que conducía al baño. Aprovechó el preciso momento que Gun levanta su vista y con su dedo índice lo llama.
Son esos aquellos momentos que no se pueden perder, así que esa invitación fue aceptada.
Gun siguió a Perth hasta el baño y se encerraron en uno de los privados.
-Realmente te extrañaba-. Dijo Perth acariciando su rostro.
-Pues aquí me tienes-.
Inició Perth bajando su mano hacia el interior de los boxers de Gun. Al tocar su trasero, este dio un respingo de dolor.
-¡Auch!-. Se quejó.
-¿Estuviste con alguien? ¿Qué te hizo?-.
-Azotes-.
Perth sonrió por fuera, pero se molestó por dentro. Su chico se estaba acostando con otra persona. Lo peor de todo, es que ese desconocido estaba ganando puntos satisfaciendo a Gun.
-¿Te gustaría otros azotes?-.
-No, pero puedes complacerme de otra forma-.
El tiempo era demasiado limitado como para pensar en alguna idea. Entonces, ¿cómo podía complacerlo?
Volteó a Gun apegándolo a la pared y bajó sus pantalones. Le dio una fuerte palmada en una de sus nalgas enrojecidas e introdujo uno de sus dedos humedecidos con saliva.
-¡Ahhh! ¡Perth!-.
Este acto aceleró rápidamente el corazón de Perth. La sangre en sus venas subió su temperatura haciendo arder el cuerpo de Gun.
Entraba y salía de su cuerpo hasta sentir el pasaje estrecho.
Cuando logró el cometido, sacó de su bolsillo un paquete de condón. Rasgó su envoltura y se apresuró a colocárselo.
-Ya venías preparado, ¿verdad?-.
-Contigo siempre-.
Ingresando el miembro erecto de Perth, Gun cerró sus ojos e imaginó que la persona que estaba tras él era Mark. Una costumbre que adoptó su propia mente después de que ese hombre se había implantado en todos sus pensamientos.
-¡P'Gun! ¡P'Gun!-, Repetía Perth.
Lógicamente, no podía pedirle a este amante que se hiciera pasar por Mark, así que sólo podía llamarlo Nong. Una forma sutil de llevar a cabo su fantasía sin que Perth se diera cuenta.
-P' me vuelve loco-. Decía Perth.
-¡Ahh! ¡Nong, se siente tan bien!-.
La realidad que Gun no podía negar es que Perth era un experto en el sexo. Si lo compara con Boat, su tutor estaría un escalón más arriba que él. Tomando en consideración que Perth y Boat son los dos únicos amantes que satisfacen sus pervertidos gustos.
Pero en términos generales, Mark estaba en un nivel diferente y no podía compararlo con el resto, porque sencillamente en su forma de hacer el amor, era único.
-Nong.. voy a venirme.. Por favor-.
El astuto chico tapó la punta de su dedo con el fin de obstaculizar la acelerada salida del líquido.
-Mmm... Ahhggg.. No lo hagas...-.
-Aún no es tiempo-.
En ese instante, cuando el cuerpo de Gun estaba en su límite, se escucha la puerta principal abrirse.
-Nong Gun, ¿estás aquí?-.
Perth tapó inmediatamente la boca ajena con su mano libre, evitando la salida de los gemidos que amenazaban con retumbar en las paredes del cuarto de baño.
A medida que escuchaban los pasos, más nervioso se colocaba el ambiente.
-¡Nong Gun!-. Repetía la voz.
Perth presionó aún más su mano contra la boca de Gun para que no se escapara ningún tipo de sonido.
-Shhh-. Susurró en su oído.
Al rato, los pasos se alejaron hasta sentir la puerta cerrarse.
Perth se tiró hacia atrás cayendo sentado en el retrete del baño donde acomodó a Gun sobre su cuerpo. Soltó al chico quien no dudó en botar el aire acumulado.
-Hazlo a tu ritmo-. Le ordenó.
-¡Vamos! Duele... Me aprisionas la punta... y quiero-.
-Yo aún quiero seguir, así que baja-.
El chico no tuvo más opción que obedecer e inició sus movimientos de arriba y abajo buscando un lugar donde aferrarse.
-Abre más tus piernas-. Ordenó Perth.
-Sí.. Sí...-.
Perth sintió una conexión muy especial con Gun, a pesar que no fue mucho lo que hizo a este chico. De todas formas logró llenarlo de placer y anotarse varios puntos a su favor.
No obstante, hubo algo que el chico ignoraba completamente: la otra persona tenía el nombre de Mark en su mente.
-Suéltalo... Nong... por favor... Ya no aguanto-.
Finalmente, sacó su dedo que estuvo durante mucho tiempo en el mismo lugar, permitiendo que Gun soltara todo lo acumulado, mientras que él mismo lo hizo en el interior del mayor.
-¡Mierda! Se sintió tan bien-. Habló Gun intentando regularizar su respiración.
Perth volteó el rostro de Gun y le dio un tierno beso.
-Ya vete. Te están buscando, así que es mejor que te apresures-.
-Entonces, ¿ya te vas?-.
-Sí, sólo quería verte y tenerte. Te llamaré mañana-.
Gun asintió y se apresuró a subirse los pantalones, luego salió a lavar su rostro y se fue hacia las barras.
-Al fin te veo ¿Dónde estabas? Está repleto y yo solo no puedo-. Reclamó uno de sus compañeros.
-Lo siento, estaba tomando una llamada importante-.
-Toma la orden de esos dos asientos esquinados-.
Dos chicas que estaban allí en espera, cuando vieron a Gun casi se derriten. Y no se demoraron en coquetearle.
-¿Puedo tomar su orden?-.
-P', quiero tener tu número, ¿puedo?-. Dijo una de las chicas.
Gun soltó una pequeña risita y respondió enseguida.
-Lo siento, las mujeres no están dentro de mis gustos-.
Sin más que decir, se retiró apresurándose hacia la salida donde divisó al chico que estuvo con él en el baño y que ahora se retiraba.
-Ve con cuidado-.
-Está bien-.
Tomó a Gun de la barbilla y le dio un suave beso.
-Te llamaré mañana, ¿de acuerdo?-.
-Sí-.
Terminado el breve diálogo, Perth se alejó de aquel lugar sin nada más que agregar a sus pensamientos.
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Title marcó a sus amigos para darle una buena noticia después de haber reunido a la banda hace un par de semanas atrás.
Así es, dos semanas en los que Gun parecía estar más conectado con Mark, quien pasaba prácticamente todos los días en su departamento después de terminar sus labores. Las excusas para ir hacia Gun eran variadas, comenzando por aquellas sin sentidos, como dejar sus llaves en casa a propósito, y otras con mayor cordura, como pedir que revisara los avances para las canciones de TEMPT.
Perth sólo iba día por medio y en las noches. Gusto que adquirió desde aquella noche que lo visitó en el bar.
Gun terminaba de guardar su bajo eléctrico en el estuche cuando Perth le anunciaba que venía por él.

Salió rápidamente de su hogar a pasos agigantados hasta llegar hacia Perth. Lo divisó y le hizo una seña con la mano.
-Al fin llegas, P'Gun. Ya me estaba impacientando-.
El chico le dio una sonrisa coqueta y luego agregó:
-No te apures, ya estoy aquí-.
-Entonces, vamos. Title debe estar impaciente-.
Con cariño, Perth besó los gruesos labios de Gun y abrió la puerta para subirse al automóvil que prontamente se puso en marcha. Aunque este beso lo sintió un poco más frío que otras veces, no le dio importancia.
-¿Qué es eso tan importante que nos tendrá que decir Title?-. Preguntó a Perth.
El chico enfocado en la carretera, dio una respuesta precisa y concisa.
-No lo sé-.
-Debe ser muy importante como para llamarnos rápidamente-.
-Yo creo que son buenas noticias-. Respondió Perth con plena seguridad transmitiendo confianza a Gun.
No faltaba mucho tiempo para llegar al lugar de reunión de la nueva banda donde los esperaban Title, Plan y Mark.
Al divisar al chico de cabello negro, Title lo regañó inmediatamente.
-Vaya, al fin llegan-.
-Pues ya estamos aquí-. Respondió Perth.
Gun, el último en entrar, buscó entre los presentes a Mark, encontrándolo rápidamente. Podríamos decir que había un imán poderoso en los ojos de ambos porque Mark no despegaba su vista de la otra persona desde que había entrado, transmitiendo aquella atracción que logró percibir Gun.
Mark se acercó a él para saludarlo.
-Hola-.
-Hola, Nong-.
-Te llamé, pero no respondiste-.
Gun lo miró sorprendido, con una sonrisa nerviosa.
A pesar de que ya se conocían, Mark aún tenía ese efecto de hacer temblar a Gun con tan sólo mirarlo, así como ocurrió aquella vez que lo intimidó cuando apenas se conocían.
-Eh... ¿de verdad?-.
"¿En qué momento me llamó?"
-Sí, quería saber si podía recogerte, pero veo que ya tenías a alguien que te trajera. Por eso no atendiste mi llamada, ¿cierto?-.
-No.. No... Es que no lo escuché, de verdad-.
Sacó su celular y revisó las notificaciones. Efectivamente, tenía 3 llamadas perdidas de Mark.
-Lo siento, tal vez estaba en la ducha-.
-No te preocupes-.
Mark se alejó unos metros dejando a Gun apartado. Se dispuso a acercarse para aclararle unos puntos a Mark, pero Title interrumpió su propósito.
"Si tan sólo te hubiera contestado, habría venido contigo y no con Perth", pensó.
-Bien, chicos. Hoy los cité porque tengo una excelente noticia-.
-¿Qué pasa?-. Preguntó Perth expectante.
-Vamos a duplicar las horas de ensayo porque nos quieren probar para ser contratados y presentarnos en un bar-.
Plan fue el primero en saltar.
-¡¿De verdad?!-.
-¡Es fantástico!-.
Perth volteó hacia su derecha y se apresuró a abrazar a Gun.
-¿Lo ves? Te dije que eran buenas noticias-.
-Oye, ¿cómo lo conseguiste tan rápido?-. Preguntó Gun después de soltar abruptamente el abrazo de Perth.
-Bueno, Earth conoce al dueño de un Bar que estaba en busca de una banda, entonces le mostró uno de nuestros ensayos y pidió una audición en dos semanas más-.
Perth se dio cuenta de la actitud incómoda que mostraba Gun y no quiso quedarse con la duda. Esperando hasta el final de la reunión, se alejó junto a aquel chico hacia una esquina solitaria.
-P', sé que estás un poco incómodo con mi presencia y la de Mark-.
-¿Eh?-.
-Lo sé todo, no te preocupes. Mark y yo estamos en buenos términos, así que no quiero que te estreses-.
Gun bajó su cabeza y soltó un respiro antes de decir lo que quizás le rompería el corazón al hombre que tenía de frente.
-No es eso... Perth, yo... quiero decirte algo importante-.
El oyente frunció el ceño al oír aquellas palabras acompañadas del nerviosismo de Gun.
-Dime-.
El corazón de Gun ya estaba en claridad de lo que quería y deseaba desde hace un tiempo, sólo bastaba un pequeño empuje desde su mente. Ya había una persona que le quitó la llave de su corazón, pero no era la que tenía frente a él. Esa era la noticia que tenía a Gun temblando.
-Pues... ya estoy decidido-.
-¿Qué dices? No puedo entender-.
-Sé lo que quiero... y a quien quiero-.
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