El rarito. (USarg)

cap.28:planes,declaración

Narra paraguay:

Soy hombre de pocas palabras y muchas acciones. No te voy a decir "Te mataré", lo haré directamente, eso es lo que río de la plata o "argentina" no entiende. Yo no hablo, hago.

Es un ser despreciable, tiene los ojos de papá, el cabello de mamá, y una mezcla de la personalidad de ambos. Su belleza es la misma que la nuestros padres, su actitud valiente es de papá, su lado "dulce" de mamá, esa inteligencia de ambos, y educación quimica mia.
Esa mirada intensa que tiene con la cual te das cuenta sí está enojado, triste, o feliz, una mirada tan expresiva como la de papá...¡Lo odio! ¡Maldito pendejo idiota! ¡Sí no hubiera explotado esa bomba con esa piedra azul, papá y mamá estarían vivos!

¡Joder! Solo escuchar su nombre o ese "nombre" que se puso ahora, me repugna. Juro que lo voy a matar en cualquier puto momento, hasta ahora solo lo estuve vigilando de cerca por medio de venezuela, ya sé absolutamente todos sus domicilios, secundaria ******, casa ******, parque ******, sé todo.
Solo tengo que pillarlo en un momento que esté solo y ¡Pum! Un secuestro, tortura y lo mando al otro mundo.
Nadie lo extrañará...

Me encontraba en el domicilio de venezuela, estaba en el sofá tomando una copa de vino. En eso, venezuela se hizo presente.

-Un día agotador ¿no es así?-me dijo con una sonrisa, se sentó en el sofá de delante.-Dime ¿te pasa algo?-me preguntó.

-La verdad que sí, hoy fue un día algo agotador.-le respondí.
Se quedó mirandome un momento, como esperando algo.
-¿Qué pasa?-le pregunté.

-Te hice una pregunta y no me respondiste. Ahora dime. ¿En qué piensas?-me dijo.

-Tienes razón, perdón por eso.-le dije rápidamente-Solo estoy en uno de mis planes, para mi querido hermanito "argentina".-le conté.

Me miró de arriba a bajo, con una seja baja y la otra subida, su sonrisa por un momento parecia forzada. Agarró la botella de vino que había en la mesa y siguió por servirse un poco.

-Dime ¿cuales son tus planes?-me preguntó con interés.

-¿Por qué querés sabes?-le pregunté, ya que rara vez me pregunta esas cosas.

-Solo curiosidad amigo ¿No era que nos contabamos todo? Yo siempre te digo mis planes, pero sí no quieres decirme no me lo digas.-me dijo con una sonrisa al final, su voz era seria pero se notaba que intentaba no hacerse escuchar tan serio.

-Tenes razón, siempre me cuentas todo.-
Dije para intentar no ser maleducado.
-Mis planes para mañana son seguir a río de la plata-me interrumpió en ese momento.

-Perdón que te interrumpa, paraguay. Pero ya no es río de la plata. Ahora es argentina, pero continua.-me dijo.

Lo miré un segundo antes de continuar.
-Bueno, voy a seguir a "Argentina", y cuando esté solo lo voy a traer, mis planes son acabar con él ¡pero! Quiero verlo sufrir.-le conté de a poco.
-No voy a traer y dañar a algún amigo suyo, ya que no tienen la culpa de lo que él hizo, así que mi manera de hacerlo sufrir va a ser mediante dolor fisico.-

Sus ojos anaranjados se abrieron ante mis últimas dos palabras, su sonrisa permanecia, se veia intrigado y con mayor interés que antes.

-Wow, suena increible ¿Qué tipo de dolor le harás experimentar?-me preguntó con curiosidad e interés. Agarró la copa que estaba arriba de la mesita de marmol, agarró la botella de vino y se sirvió un poco más.