Vamos de vacaciones.

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Un viernes más!!!

Diría que es un hermoso día de primavera, pero con eso de que me ando cociendo en mi jugo por el calor, no puedo pensar en otra cosa que no sea tener un ventilador cerca de mi jajajaja

En fin espero que disfruten en leerlo como yo al escribirlo.


Capítulo 9.
 

Mokuba estaba en su oficina pensando en los recientes acontecimientos, la llegada de Joey a la mansión, el noviazgo secreto de su hermano, la súper fiesta de compromiso por capricho de Joey, la invitación a cenar, todo era tan perfecto que el menor no podía creer que fueran tan compatibles después de haberse querido matar desde que se conocían, los amigos de Joey no se habían comunicado y no habían hecho escandalo, por lo cual se sentía raro, ellos deberían ser los primeros en estar presentes y apoyar a su amigo.

Tomó su teléfono y pensó en llamar a Yugi para ver que sabía sobre la relación de Joey con su hermano, pero se arrepintió. Joey le había dicho que todo había sido muy discreto, que de hecho no le había dicho nada a nadie por miedo a que lo tacharan de interesado… Mokuba sonrió al recordar que Joey había pagado la cuenta del restaurante y tenía unas inmensas ganas de gritar cuando lo pensaba, para él y su hermano era nuevo que alguien tuviera un detalle con ellos, una vez pronunciabas el apellido Kaiba la gente creía que por ser ricos ellos debían pagar.

Para su sorpresa Joey no creía en que el dinero determinara quien pagaba, sino que para él existía la igualdad, el dar un detalle reciproco a la persona que quieres… el menor volvió a sonreír al recordar la cara de felicidad de su hermano. Más decidido que nunca mando a llamar a su asistente y le pidió que preparara un viaje, tenía que asegurarse que ellos dos tuvieran más momentos a solas, más intimidad, esta relación era una en un millón, su hermano jamás volvería a tener un novio tan perfecto como Joey, así que él se encargaría de que duraran para siempre.

 











Duke había abierto el periódico esa mañana y con una enorme sorpresa había visto las fotos de Joey y Kaiba en un exclusivo restaurante de la ciudad, ambos había salido juntos, el empresario estaba tomado de la mano de Joey y en las fotos se veía que lo protegía de los paparazis, arrugó el periódico y lo aventó a la basura, al parecer esos dos habían empezado a ser unos descarados.

Su prometida entró al comedor y tenía una revista de chismes en las manos, en la portada de nuevo la imagen de esos dos tomados de la mano, la chica sonreía con verdadera felicidad al ver que su amigo vivía un romance de ensueño con el CEO, Duke bufó y decidido en molestar a Joey mandó a llevarle un ramo de flores gigante, él muchas veces se lo había regalado y al rubio le encantaban así que dispuesto a demostrarle que lo estaba observando le mandó el ramo más grande que la florería podía hacer.

 










Joey llegó a la mansión bastante molesto, se encerró en su cuarto y luego en el baño, ahí lloró por la frustración, estaba molesto con Duke por tomarse el atrevimiento de mandarle flores después de todo el daño que le había hecho, ¿qué pretendía con ese regalo? ¿qué lo perdonara? Poco le duró el enojo, ya que su amigo Yugi le mandó un mensaje y le pidió que hablaran, Joey sabía que el menor tenía un talento enorme para leer a las personas y una vez lo viera a los ojos sus enormes ojos amatistas lo obligarían a escupir la verdad, así que no podía verlo por el momento, si lo llegaba a ver seguramente lo obligaría a desistir de su venganza, de dejar a Kaiba y lo “ayudaría” a sanar su corazón.

Venganza con V mayúscula. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora