𝓗𝓮𝓪𝓿𝓮𝓷 𝓟𝓸𝓽𝓽𝓮𝓻 (Draco Malfoy)

𝕃𝕒 𝔻𝕖𝕣𝕣𝕠𝕥𝕒

~𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚 𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧~

El profesor Dumbledore nos mando a los estudiantes de Griffindor de regreso al Gran Comedor, donde se nos unieron, diez minutos después, lo de Ravenclaw, Slytherin y Hufflepuff.

Todos parecían confusos.

-Los demás profesores y yo tenemos que llevar a cabo un rastreo por todo el castillo.-explicó el profesor Dumbledore, mientras McGonagall y Flitwick cerraban todas las puertas del Gran Comedor.-Me temo que, por su propia seguridad, tendrán que pasar aquí la noche. Quiero que los prefectos monten guardia en las puertas del Gran Comedor y dejo de encargados a los dos Premios Anuales. Comuniquenme cualquier novedad.-Añadió dirigiéndose a Percy.-Avísenme por medio de algún fantasma.-El profesor Dumbledore se detuvo antes de salir del Gran Comedor.-Bueno necesitaran...-Añadió.

Con un movimiento de la varita, envió volando las largas mesas hacia las paredes del Gran Comedor.

Con otro movimiento, el suelo quedó cubierto con cientos de
mullidos sacos de dormir rojos.

-Felices sueños.-dijo el profesor Dumbledore, cerrando la puerta.

El Gran Comedor empezó a bullir de excitación.

Los de Griffindor contaban al resto del colegio lo que acababa de suceder.

Sentí una pesada mirada y me volví en busca de esa mirada, me topé con esos ojos brillantes de un color metálico.

Draco me miraba con una mezcla de preocupación y molestia, suponía que estaba así por lo que le había gritado cuando salimos del Gran Comedor.

Pero su gesto cambio.

-¿Estas bien?-Preguntó sin pronunciar ninguna palabra.

Asentí discretamente.

-¡Todos a los sacos! ¡Ahora mismo, se acabó la charla! ¡Apagare las luces dentro de diez minutos!-gritó Percy.

-Vamos.-Nos dijo Ronald.

Agarramos cinco sacos de dormir y nos lo llevamos a un rincón.

-¿Creen que Black sigue en el castillo?-Susurró Hanna con preocupación.

-Evidentemente, Dumbledore piensa que es posible.-dijo Ronald.

-Es una suerte que haya elegido esta noche, ¿se dan cuenta? La única noche que no estábamos en la torre...-dijo Hermione mientras se apoyaba con sus codos para hablar.

-Supongo que con la huida no sabrá en qué día vive.-dijo Ronald.-No se ha dado cuenta de que es Halloween. De lo contrario habría entrado aquí a saco.-Hermione y Hanna se estremecieron.

A nuestro alrededor todos se hacían la misma pregunta.

-¿Cómo ha podido entrar?-

-A lo mejor sabe cómo aparecerse.-dijo un alumno de Ravenclaw que estaba cerca de nosotros.-Como salir de la nada.

-A lo mejor se ha disfrazado.-dijo un Hufflepuff, de quinto curso.

-Podría haber entrado volando.-Sugirió Dean Thomas.

-Hay que ver, ¿es que Heaven y yo somos las únicas personas que nos hemos leído Historia de Howgarts?-Preguntó Hermione, perdiendo la paciencia.

-Son las únicas desquiciadas capaces de hacerlo.-Comento Hanna.

-Casi seguro, ¿por qué lo dices?-dijo Ronald.

-Porque el castillo no está protegido sólo por muros-indicó Hermione-, sino también por todo tipo de encantamientos para evitar que nadie entre furtivamente. No es
tan fácil aparecerse aquí. Y quisiera ver el disfraz capaz de engañar a los dementores. Vigilan cada una de las entradas a los terrenos del colegio. Si hubiera entrado volando, también lo habrían visto. Filch conoce todos los pasadizos secretos y estarán vigilados.-