𝕃𝕒 𝕄𝕒𝕣𝕔𝕒 𝕋𝕖𝕟𝕖𝕓𝕣𝕠𝕤𝕒

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~𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚 𝐇𝐞𝐚𝐯𝐞𝐧~

-No le digan a su madre que han apostado-imploró a Fred y George el señor Weasley, bajando despacio por la escalera alfombrada de púrpura.

-No te preocupes, papá. Tenemos grandes planes para este dinero, y no queremos que nos lo confisquen.-

Por un momento dio la impresión de que el señor Weasley iba a preguntar qué grandes planes eran aquéllos, pero, tras reflexionar un poco, pareció decidir que prefería
no saberlo.

Pronto nos vimos rodeados por la multitud que abandonaba el estadio para regresar a las tiendas de campaña.

El aire de la noche nos llevaba estridentes cantos mientras volvíamos por el camino iluminado de farolas, y los leprechauns no paraban de moverse velozmente por encima de nuestras cabezas, riéndose a carcajadas y agitando sus faroles.

Cuando por fin llegamos a las tiendas, nadie tenía sueño y, dada la algarabía que había en torno a nosotros, el señor Weasley consintió en que tomaramos todos juntos una última taza de chocolate con leche antes de acostarnos.

No tardaron en enzarzarse en una amistosa discusión sobre el partido.

El señor Weasley se mostró en desacuerdo con Charlie en lo referente al comportamiento violento, y no dio por finalizado el análisis del partido hasta que Ginny se cayó dormida sobre la pequeña mesa, derramando el chocolate por el suelo.

Entonces nos mando a todos a dormir.

Hermaione, Ginny, Hanna y yo nos metimos en nuestra tienda.

Mientras me ponía la pijama y me subía a la litera, temía que en un arrebato de ira Hermaione contará todo enfrente de Hanna.

Desde el otro lado del campamento llegaba aún el eco de cánticos y de ruidos extraños.

Me había costado en una de las literas superiores, encima de Hanna, estaba boca arriba, observando la lona del techo de la tienda, en la que debes en cuando resplandecía los faroles de los leprechauns.

Por primera vez, en estas últimas semanas, lo último que paso por mi cabeza antes de irme a dormir no fue la muerte del anciano y la de la mujer, ni Pettigrew, sino, Hermaione.

Y sobre lo que debía hacer para que Hermaione no le contará nada a mis hermanos.

Repasaba diferentes maneras de lograrlo, pero dudaba que funcionarán con Hermaione, tenía que pensar en algo rápido.

(...)

-¡GINNY! ¡HEAVEN! ¡HANNAH! ¡HERMAIONE! ¡Deprisa, levántese! ¡Tenemos que irnos!-me levanté sobresaltada.

Y vi el gesto de pavor qué tenía el señor Weasley dibujado en su rostro.

Sin comprender muy bien lo que sucedía, pero intuyendo que algo malo ocurría, porque el ruido del campamento parecían distintos, bajé de la litera y me puse los zapatos.

Los cánticos habían cesado.

Se oía gritos, y gente que corría.

Salimos de la tienda a toda prisa, detrás de el señor Weasley.

Harry y Ronald ya estaban afuera de la tienda, ambos al igual que nosotras, en pijama.

A la luz de los escasos fuegos que aún ardían, puede ver a gente que corría hacia el bosque, huyendo de algo que se acercaba detrás, por el campo, algo que emitía extraños destellos de luz y hacía un ruido como de disparos de pistola.

𝓗𝓮𝓪𝓿𝓮𝓷 𝓟𝓸𝓽𝓽𝓮𝓻 (Draco Malfoy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora