the red and the cold│𝗺𝗮𝗿𝗸𝗵𝘆𝘂𝗰𝗸

🌻│24

La villa de los Lee era el lugar más caro de Miami, y su interior el más lujoso de las casas que Donghyuck había visto nunca. Eso no significaba que los Lee fueron como los típicos hombres ricos que aparecen en las películas familiares, y sus mesas de comida no eran tan austeras como la idea errónea común.

En su casa de Minnesota, las flores se sacaban directamente del jardín, pero el jarrón que decoraba la mesa de la villa era obviamente obra de floristas. También a los ojos de Donghyuck, que no conocía los muebles ni la costosa vajilla, parecían valiosos. Salvo por algunas de esas diferencias, era una cena que no se diferenciaba de la de una familia normal.

Pero se sentía muy incómodo en aquella posición.

¿Por qué no? Había demasiada gente alrededor que tenía el apellido Lee. Era bueno decir que estaba sobresaturado. Tanto si miraba al frente como si miraba atrás, un Lee estaba sentado en ese lugar. Era una visión onerosa para él.

Cuando sirvieron el aperitivo, el chef salió y preguntó qué ingredientes elegir del menú principal.

—Tenemos pollo, ternera y corvina. ¿Qué le apetece?

—Oh, yo...

Estaba medio despistado, no pudo contestar a tiempo. Entonces Mark se adelantó y sustituyó la respuesta.

—No le gusta mucho el pollo. Y ya que está cuidando mi cuerpo, creo que los platos de pescado son mejores que la carne roja. Prepare la corvina.

En ese momento, Donghyuck pudo sentir cómo los ojos de todos los miembros de la familia volaban hacia él, e incluso el hombre más indiferente no pudo evitar sonrojarse. A diferencia de Minnie, que actuaba con seriedad como si no pudiera nada, Mina alternaba las miradas, haciendo brillar sus ojos húmedos. Donghyuck sintió deseos de pedirle que no lo hiciera. Changwook, que tenía una expresión en la cara como la de su hija mayor, abrió la boca.

—He visto un artículo. No esperaba que conociera a mi hijo.

Se refería a aquella loca reunión nocturna secreta. Donghyuck tuvo que sentirse como un actor al que los paparazzi le preguntan por un romance. La diferencia es que los actores puedes pegar a los paparazzi, pero él no.

—Éramos compañeros de cuarto en la escuela.

Tras responder, Donghyuck trató de ignorar los ojos de Mina, que se volvieron más brillantes. Parecía dispuesta a idealizar todas las historias que tuvieran que ver con los dos hombres. Changwook parecía sorprendido.

—¿Fuiste al colegio con él? ¿No eres de Minnesota? Habrías ido a la escuela de St. Patrick con esa habilidad, pero ¿No lo dejaste desde entonces?

—Cuando entré en la USHL, me cambié de colegio. Nuestro Pegasus* era un equipo de Chicago.

La persona que contestó con voz elegante en su lugar fue Boah. Changwook giró la cabeza y miró a su mujer. Ella continuó, mirando a Donghyuck.

—En aquella época era un jugador inteligente que destacaba por su edad y era uno de los diez máximos goleadores del equipo. Era un extremo que jugaba en ambos lados del ataque y de la defensa porque tenía un buen manejo del disco y una defensa estable. Su potencia era un poco decepcionante, pero tenía velocidad y habilidades de patinaje para cubrirla. Su rendimiento actual tampoco es extraño.

El tono de Boah era elegante, pero con un breve paréntesis untado de arrepentimiento por parte de Donghyuck. No se diferenciaba de su marido cuando el pez que faltaba parecía ser un pez gordo. Al final del discurso, Boah miró a Changwook y le reprendió levemente.

—No tienes suficiente información sobre jugadores jóvenes para que te guste el hockey.

—... Hay muchos jugadores que desaparecen antes de llegar a la liga profesional, ¿Recuerdas a todos y cada uno de ellos?