Señor Walker [+18] ©

Capítulo cuarenta y tres

-Deberia darles vergüenza ¿Pero que coño a sido ese show allá fuera?

Intento protestar pero Xion al ver mis intenciones me chista colocando su dedo en mi boca.

-Mejor no respondas, ¿Tienes idea de quién es el hombre al que tus amigas y tú acaban de golpear?

-Si, un imbécil.

- Miranda, también es una de las personas más influyentes de Rusia actualmente.

-Vaya mierda-ruedo los ojos con hastío.

-No hagas eso-pide con voz suave, extrañada centro mi atención en él.

-¿Que cosa?

-No le restes importancia a cosas que la tienen con tanta facilidad, y por supuesto no me blanques los ojos, eso solo me provoca castigarte y no es el momento ni el lugar adecuado. No frente a tus padres.

Entrecierro los ojos con molestia en tanto mascullo.

-No me puedo creer que hayas dicho eso delante de mis papás Xion.

—De todas formas están entretenidos charlando con mis padres dudo mucho que me hayan escuchado —ambos lanzamos una mirada hacia nuestros padres que muy entretenidos rien de algo que relató mi suegro.

Volviendo la mirada hacia Xion suspiro.

—Bien, se que estuvimos mal y que la violencia no era el camino correcto para resolver los problemas, de todo eso soy muy consiente, pero debes entendernos cariño ese maldito desgraciado le hizo mucho daño a Jessi, la pobre desde entonces no a querido saber de más ningún hombre en su vida esa escoria no vale ni siquiera la pena te lo aseguro.

Xion suspira resignado.

—Bien, me encargaré del asunto tranquila.

Sonrío pegando un chillido y lanzándome a sus brazos.

—¿Sabes que te amo?

La comisura de su boca se alza en una sonrisa pícara.

—¿Y tú sabes que te amo mucho más?

—No—bromeo—yo te amo más.

Niega divertido.

—Na, yo muchísimo más.

Ambos nos sonreímos, enamorada beso sus labios.

—¿Que te parece si subimos y celebramos nuestro enlace como corresponde?—propone pícaro.

—Xion—le chisto—Aqui están nuestros padres.

—Ni siquiera se darán cuanta de nuestra ausencia te lo aseguro.

Le lanzo una mirada a mis padres y luego otra a Xion.

—Vale, pero vamonos ya, antes de que se den cuenta.

—Como órdenes cariño.