Extra 1

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Habían pasado 7 años, mi relación con Tom era realmente fuerte, estábamos casados hace ya dos años y esperábamos un bebé, tenía exactamente 8 meses de embarazo y era una niña ¿lo podían creer? Tom me cuidaba demasiado, era muy sobreprotector.

Los chicos se habían separado por un tiempo y estaban volviendo como banda pero no tenían el mismo apoyo que antes...yo dejé la música y me dediqué a ser ama de casa por el embarazo pero como lo prometí había abierto mi propio restaurante que ahora tenía varias sedes en la ciudad, pero nosotros nos fuimos a vivir al campo ¿por qué? A Tom después de un tiempo le empezó a molestar mucho la ciudad y decidimos comprar una casa en el campo.

Bill, mi precioso Bill ahora se la pasaba de fiesta con amigos y bueno ahora bebía demasiado, me preocupaba ya que siempre se le veía tomando alcohol pero él decía que no era alcohólico, que solo lo hacía de vez en cuando. Sabíamos que no era así pero él era muy terco como para hablar de este tema.

—Mi amor, siempre venimos ¿por qué no la sueltas ya?—Pregunto Tom acariciando mi espalda.

Veníamos cada semana a donde estaba enterrada Cloe, había muerto hace un año y su muerte me devastó por completo, había sido mi compañera por muchos años, fue y siempre será mi primera mascota, era la perrita más hermosa y cariñosa del mundo para que me la arrebataran de esa forma, y si la mataron a la pequeña.

Tom me acompañaba siempre en mi pésame pero él sentía que ya era hora de soltar su muerte y verla de manera feliz, pero yo simplemente no podía ¿cómo no iba a sentirme culpable por la muerte de mi pequeña? Pero ahora venía una integrante nueva que esperábamos con ansías.

—Cariño, no puedo—Deje las flores en el piso y me levante con cuidado, la barriga ya pesaba y me dolía un poco al agacharme—Nos acompañó por muchos años y se fue así, simplemente no puedo—Un nudo en la garganta apareció y apreté mis ojos al sentir las lágrimas en los ojos.

—Mi amor ella está feliz, siempre recuerda que ella estará agradecida por ser una buena madre, la consentiste y ella se fue amada por nosotros—Rodeó mi cuerpo con sus brazos y escondí mi rostro en su pecho.

Después de tantos años, casi 9 años aún seguía sintiendo lo mismo por aquel adolescente que me enamoro profundamente, mi corazón latía fuerte por él y mis nervios aún los provocaba como siempre. Era y será el amor mi vida.

Agradezco aquella vez que lo perdone y gracias a ese viaje que me regaló me di cuenta que estaba completamente perdida, enamorada, muerta de amor por el.

—Vamos cariño—Dejo un casto beso en mi cabeza y me tomo la mano para dedicarse a caminar.

Le di una última mirada a su tumba y seguí a Tom, la casa estaba al lado de la tumba de mi pequeña así que solo debíamos caminar un poco para llegar.

Llegamos a la casa y Tom se dirigió a la cocina para traerme un vaso de agua.

—Ten cariño—Extendió su brazo y tome el vaso con agua.

Últimamente me cansaba muy fácil, me dolía mucho la espalda, los primeros meses de embarazo todo me daba náuseas y mareos pero ya después del 4 mes todo fue mejorando quitando los dolores de cuerpo, como pesaba la barriga y él hambre tan grande que me daba.

—Gracias mi amor ¿quieres comer algo? Tengo hambre—Sonreí y este me tomo de la cintura para acercarme a él.

—Tengo hambre de ti—Susurro y deje el vaso en el mesón de la cocina para dejar un beso en los labios de mi amado.

—Sabes que no podemos hacer nada cariño.

Los primeros meses me daban ganas de arrancarle ropa, me sentía demasiado hormonal pero el doctor nos dio indicaciones de no hacer nada hasta que el bebé nazca.

—Lo sé pero ya falta poco—Sonrió coqueto y reí al ver su expresión.

—La bebé nos mantendrá ocupados, necesitará de muchos cuidados y lo sabes así que no creo que tengamos mucho tiempo para eso—Deje mis manos en su pecho—Aunque podemos dejar a la bebe unos días con mi madre o Bill—Deslice mis dedos por su pecho.

Mi madre, mi relación con ella nunca fue la mejor desde que decidió no apoyarme con la música y bueno cuando se enteró lo de Tom me dijo que no convenía estar con él y un montón de cosas, después de un tiempo logró entender lo qué pasó con Madisson y me pidió perdón por todo. Le conté sobre el embarazo y al parecer eso lo cambió todo, ahora se preocupaba más por mi y siempre estaba al pendiente.

Realmente nunca entendí a mi madre pero al fin y al cabo es mi madre, ella me crió, me cuido y siempre estuvo ahí para mí entonces le perdoné todo daño que hizo.

—Cariño debemos contarle a Gustav y Georg sobre mi embarazo, ellos son los únicos que no saben—Deje un beso en la mejilla de él para acercarme a la cocina, quería preparar algo ya que me moría del hambre.

—Lo sé ¿quieres que los invitemos y les contemos? Hace rato no los veo y podemos organizar algo para contarles la sorpresa—Se acomodó en el asiento del mesón para poder verme.

—Me parece buena idea—Le dedique una sonrisa y busque en la cocina que hacer para comer.

—¿Y Sofia? No vas a contarle?—Dijo y suspire.

—Sabes que ya no hablo con ella, me traiciono de la peor manera.

Sofia siempre fue mi mejor amiga, le contaba todo a pesar de que estuviera ocupada pero ella no, cuando empecé con la música se alejó de mi y al parecer ella le pasaba información a Madisson sobre la relación de Tom y yo, jamás pensé que ella fuera a hacer algo como eso, le confié muchas cosas, la dejé entrar a mi vida y a la de los chicos como para que me pagara de esta manera. Pero ya es tema pasado.

—Está bien cariño, cómo tú digas—Sonrió cálido. Él sabía que cualquier cosa me alteraba así que evitaba problemas.

—ISA—
Dios mío santo que emoción, iba a hacerlo más largo pero el de mañana estará mejor y espero que les guste este extra, no serán mucho pero espero que sea de su agrado y para que estén en contexto Tom tiene 28 y Kiara 27. No se olviden de comentar y votar, los quiero mucho, bye💗

  𝐋𝐚 𝐧𝐨𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐞 ; Tom Kaulitz Where stories live. Discover now