Extra 4

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By Tom

Todo daba vueltas, las lagrimas no dejaban de salir y mi pecho cada vez dolía más. La angustia me estaba consumiendo y no podía respirar.

Mi esposa, mi vida, mi todo, mi salvación aún seguía con sus ojos cerrados y no me dejaban verla, solo quería saber cómo estaba y cómo estaba nuestra pequeña. Mis manos temblaban y mi corazón se iba a salir del pecho.

—Familiares de Kiara Hamill—El doctor salió de una habitación y me levante de una.

—Yo! Soy yo!—Alce la voz y me acerqué al doctor con rapidez—Dígame por favor que ella esta bien—Lo mire con angustia.

—Usted debes ser su esposo, el señor Kaulitz—Asentí con mi cabeza—Ella esta bien, aquella pelea le causó mucho estrés y como no debe de tener muchas emociones ni alterarse mucho entonces se desmayo pero está bien, solo necesita algo de reposo y para mañana podrá irse y la bebe también esta muy bien, esta saludable.

Mi corazón en ese momento se ablando y todo miedo salió de mi interior, esta bien, esta bien, dije varias veces en mi cabeza.

—¿Puedo verla?

—Claro, esta en la habitación 711–Le sonreí al doctor y salí corriendo a aquella habitación.

Y ahí la vi, acostada en esa camilla, pálida y con sus ojitos cerrados, el terror que me daba verla de esta manera...cuando dejaba de comer y se desmayaba, era demasiado terca pero lo logro, súpero su problema con la comida y ahora está más feliz que nunca.

—Mi vida, debí ser yo quien abrió la puerta y tu no—Suspire y tome sus manos, estaba helada—Los chicos se fueron y mañana vendrán a visitarte—Con mi otra mano acaricié su rostro—Kiara no sabes cuantas veces voy a disculparme por todo lo qué pasó en el pasado, todo lo que sufriste por mi y todo lo que hice, en serio lo lamento y por culpa mía perdiste a tu mejor amiga.

Ahora sentí como mi corazón se estrujaba de dolor. Su mejor amiga estaba del lado de Madisson, como siempre esa zorra queriendo dañarle la vida a los demás pero no más, pondré una orden de restricción para que Sofia no vuelva a hacerse a Kiara.

—Te amo mi amor, ahora solo descansa, mereces descansar—Deje un beso en su frente y me recosté en el sillón que estaba al lado de la camilla de mi esposa.

Odiaba este lugar, lo odiaba con mi vida, todas las veces que Kiara estuvo aquí y no por buenas razones, todo eso dolía absolutamente todo dolía y ahora solo veníamos por su embarazo, para saber cómo estaba la bebe y cómo estaba ella de salud.

Después de tantos años volvió a aparecer nuestro pasado y eso era lo que menos quería, Madisson supongo que se rindió después de un tiempo un tiempo y se lo agradezco a la vida y ahora Sofia, Kiara siempre me hablaba de ella y como era su amistad se notaba que la amaba, pero jamás pensé que esa niña fuera a hacer tal cosa.

Después de unos minutos deje de lado mis pensamientos y sentí como mi cuerpo se iba durmiendo, por alguna extraña razón tenía demasiado sueño así que cerré por un momento mis ojos y me dormí.

By Kiara

Abrí lentamente mis ojos y una luz muy intensa me hizo cerrarlos de inmediato, mi cabeza dolía un poco y solo escuchaba un pipipi. Volví a abrir mis ojos esta vez más lento y noté como estaba en una camilla, mire todo con detenimiento y si, estaba en el hospital.

A mi lado estaba Tom dormido como un bebé, se veía tan lindo pero tan incomodo que no quería que durmiera ahí.

—Tom—Le llame pero no despertó—Tom!—Grite y este se levantó de un susto.

—Que! Que!—Miro a todos los lados y luego me miro a mi para acercarse rápido—Mi vida, despertaste—Me tomo de las manos y dejo muchos besos en mi rostro.

Sonreí al sentir sus labios y cerré mis ojos disfrutando de la sensación que me brindada.

—¿Qué fue lo qué pasó? No recuerdo muy bien—Susurré y abrí mis ojos encontrándome con los suyos.

—Te desmayaste mi amor, Sofia te altero un poco y todo eso causó el desmayo—Me quitó el cabello que tenía en el rostro y dejo un casto beso en mis labios.

Sofia...

—Entiendo—Fingí una sonrisa.

—Lo lamento tanto, debí ser yo quien abría la puerta y tu no, de no haberla visto antes te juro que la echaba antes.

—Amor ya no importa, solo quiero dejarla atrás, ya no quiero saber absolutamente nada de ella—Alce mis hombros y recosté mi cabeza en la almohada.

Después de unos entró un doctor a la habitación y me miró con asombro.

—Vaya, despertaste rápido—Me sonrió y asentí con mi cabeza—Eres muy fuerte señorita Kaulitz, el golpe en la cabeza hubiera podido ser mortal pero tú eres muy fuerte.

Me toque la cabeza y noté que tenía un parche en él así que supongo que me abre abierto un poco la cabeza.

—Mi bebe ¿está bien? Quiero saber de ella—Dije.

—La bebe está en perfecto estado, está muy bien de salud, está creciendo fuerte y ya casi nace—Lo mire extrañada ya que me habían dicho que aún faltaba al menos un mes para su nacimiento—En dos semanas aproximadamente puede nacer ¿haz tenido contracciones?

—Un poco pero creí que solo eran dolores normales—Reí nerviosa.

—Ya casi nace la bebe así que necesito que te cuides muy bien, ahora los dejaré solos para que hablen—El doctor salió.

Mire a Tom y este estaba pálido, con la boca abierta y mirándome con los ojos abiertos, solté una carcajada al verlo así y negué con mi cabeza.

—Ya tan rápido?—Reacciono y me abrazo—Voy a poder verla dentro de pronto! Ya quiero verla! Quiero tenerla en mis brazos, contarle todo sobre nosotros y mimarla mucho—Sonreí al escucharlo, de verdad era el hombre más hermoso de este mundo.

—Lo sé cariño, pero calma que apenas va a nacer y no te va a entender—Reí y deje un beso en su mejilla—Tom te amo.

—Yo te amo más mi amor—Dejo un beso en mi mejilla y sonrió.

Ahora iba a tener una hija con el famosísimo Tom Kaulitz ¿cómo era eso posible? Quizás el destino.

—ISA—
Lamento decirles que ya casi se acaban los extra pero espero que les gusten mucho y los están disfrutando. Gracias en serio por todo el apoyo los amo demasiado, no sé olviden de votar y comentar, bye💗

  𝐋𝐚 𝐧𝐨𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐞 ; Tom Kaulitz Where stories live. Discover now