— Hola —Dijo Tom nervioso volteando a donde estaba sentada— Te buscan Olivia —.
Caminó hacia mi riendo y dejó a mi amiga en la puerta, me levanté casualmente como si aquí no hubiera pasado nada y cuando pasé por su lado me detuvo tocando mi brazo.
— Si, lo prometo Olivia —Sonreí dándole una mirada de agradecimiento y me acerqué a besar su mejilla—.
Me sonrió guiñándome un ojo alejándose ya con su camisa en la mano para subir a la habitación, camine hacia mi amiga quien estaba boca abierta viéndome inmóvil y arqueando una ceja.
— Eres una maldita —Dijo en voz baja dando pequeños brincos de emoción, me reí de solo verla y negué con la cabeza jalándola de la mano para que entrara— Mira lo bueno que está —.
— Espera a que te cuente lo que acaba de pasar —Subimos a la habitación corriendo literalmente y se sentó en la cama viéndome atenta esperando el chisme—.
— ¡Escúpelo ya Liv! —.
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— No lo puedo creer —Dijo viéndome sorprendida, todo el rato que estuve hablando así estuvo, con la boca abierta sin creer mis palabras— ¡No lo puedo creer! ¡Estuviste a nada de comértelo Liv! —.
— Lo se, lo se —Me reí como una niña emocionada por un juguete nuevo— Pero no pude, no podía dejar de pensar en mi madre y no pud... —.
— Liv perdóname pero si ella va tener un bebé de otro, lo tuyo no fue nada grave en comparación —Dijo alzando las manos como en defensa explicando su punto— Además él estuvo de acuerdo todo el tiempo en estar contigo así que ¡al carajo! —.
Le di la razón con tal de dejar el tema por la paz y bajé rápido a recibir la pizza que habíamos ordenado, abrí la puerta tendiéndole el dinero al repartidor para luego tomar la pizza, entré a la cocina por las bebidas y unos cuantos dulces también, todo lo que amerita una pijamada.
Camine lento por llevar cargando las cosas ya que apenas y podía cuando vi bajar a Tom usando pijama por las escaleras.
— Te ayudo —Se acercó apresurado quitándome el peso de las bebidas y los dulces lo cual agradecí internamente—.
— Gracias —Dije sonriendo avergonzada sin mirarlo a los ojos— También por lo de hace rato —.
— No es nada —Soltó una risita, se veía nervioso y con mucha razón, estuvimos a punto de hacerlo hace apenas un rato—.
Llegamos a mi habitación y se abrió paso por la puerta entrando como si nada viendo a Lucia sentada en el suelo con una mascarilla puesta.
— Déjalo ahi —Le señalé la mesita que tenía junto a la cama para que pusiera las cosas—
Gracias —.— ¿Quieres quedarte? —Dijo Lucia de repente invitándolo a cenar con nosotras, volteo a verla sorprendido, ella sonreía mientras yo la miraba en shock, no entendía que carajos hacia— Vamos a ver una película —.
Tom me miró arqueando la ceja y yo seguía en shock sin saber que decir, me encogí de hombros en respuesta.
— Bueno pues... —Se rió nervioso viendo a mi amiga— Me encantaría pero mañana debo ir a una sesión de fotos muy temprano por la próxima pasarela así que... —.
— ¡Grandioso! —Dijo Lucia aplaudiendo mostrando su euforia la cual yo sabía que lo hacía por molestarme— ¿Podemos acompañarte? —.
— Claro, si Olivia está de acuerdo —Respondió tratando de darle una salida pero siendo sincera si tenía ganas de ir así que asentí—.